Hace un tiempo, coincidiendo con el día 1 de abril ("día del fin de la guerra civil ") respondí a un bloguero lo siguiente relativo a mi visión de Cobas:
Emulando un histórico parte de guerra:
En el día de hoy, descabezado, descoordinado, inconexo, inadaptado al devenir de los tiempos, anclado en las gestas del siglo pasado, obcecado en batallas e inversiones perdidas, incapaz de replanteamientos estratégicos, abriendo continuamente frentes ególatras y viviendo en un mundo onírico el equipo de Cobas, han alcanzado mi paciencia y aguante sus últimos reductos. La guerra ha terminado.
Hoy he leído el informe trimestral, y me reafirmo totalmente en lo que pensaba, o mas bien creo que me quede corto. Analizando a groso modo el documento se pueden hacer las siguientes lecturas:
- Mismo mensaje de siempre, es el mejor momento, los grandes genios me avalan, expongo los casos que me conviene y con la información que me interesa, el margen es astronómico, el mundo no se entera de nada, etc.
- Pasando a la parte objetiva, o sea a los números del apéndice, es donde se puede ver la realidad, los rendimientos que si iban mal en época de vacas gordas, no van mejor con las flacas, la comparativa con sus indices de referencia es difícil de asumir, ya vamos para cuatro años y en su plazo optimo de cinco, si no media el milagro de la multiplicación de los panes y los peces, veremos el desastre. Y lo que es peor, todo sigue igual, vanagloria por los pequeños aciertos y clamorosos silencios por los resultados a cualquier plazo.
- En el informe cada vez va teniendo mas peso el negocio de Santa Comba, ahora hasta se publicita a la mujer del Sr. Parames, y el colmo es que puesto que todos los lectores en castellano ya hemos comprado, leído y asumido como nuestro norte y guía su libro, nos comunican que no seamos egoístas y que lo compartamos con los chinos para lo que han hecho un gran esfuerzo para traducirlo.
- Resumen: La buena gestión de los fondos es una parte del negocio, pero hay otras muchas, como explicaba irónicamente en el entrecomillado de la cabecera.
