No, no. No tiene que ver con manipulaciones para que entre gente pequeña. La participación en bolsa no hace más que caer semana a semana, como muestra la salida de flujos de fondos americanos.
La explicación más creíble que he leído ha sido doble, por una parte se han cambiado las reglas de los CDS al forzar que no haya disparo de CDS por acontecimiento de crédito a pesar de una quita del 50%, lo que hace que los CDS se hayan vuelto inservibles, lo que ha llevado a un cierre de todas las posiciones cortas basadas en CDS. Al mismo tiempo disminuye algo el riesgo sobre los bancos por la nueva política del EFSF y la elevación del Tier 1, independientemente de que sea insuficiente, y el menor riesgo dispara la compra de activos de riesgo, lo que unido al cierre de cortos y la entrada de los algoritmos que lo detectan en nanosegundos, provoca lo que se conoce como un melt-up, un disparo de la bolsa.
Ha sido por tanto una manipulación del mercado por parte de quienes tienen el poder de cambiar las reglas en medio de la partida, y es lo que han hecho con los CDS. Una manipulación no debe llevar a nadie a cambiar su posición ante el mercado, puesto que no cambian las perspectivas, sean estas alcistas o bajistas.
Va a haber consecuencias no previstas o al menos poco cuantificadas, como que sin CDS el interés por la deuda soberana va a caer en picado. Solo va a poder ser comprada pore el BCE o quizá los chinos, si son tan tontos como para poder engañarles como tales, que lo dudo. De hecho es lo que se ha visto, pues mientras la bolsa subía, el interés de los bonos italianos o su diferencial también subían, y ha llegado ya al fatídico 6% que marca el punto de quiebra segura si no se reduce en breve.
Mi recomendación es que el que pueda venda y se mantenga al margen hastea que pase lo que tenga que pasar. Esta vez ha sido un melt-up, la próxima podría ser un melt-down. Están jugando con cosas demasiado grandes que nadie conoce lo suficiente y nadie puede controlar.
Un EFSF apalancado que garantiza el primer 20% de las pérdidas es un arma que corta por los dos lados. Una herramienta destinada a resolver un problema de confianza, cuando el problema es de solvencia. Los problemas retornarán. Esta es una predicción demasiado fácil para poder tomar crédito por ella.