Buenos días.
El dólar, que es un refugio seguro, cayó el lunes ante la mejora del sentimiento de riesgo, con la esperanza de que los inversores minoristas que se dirigieron a los fondos de cobertura la semana pasada hubieran dirigido sus miradas a otra parte.
La divisa estadounidense cayó frente a la mayoría de sus pares, mientras las acciones asiáticas se recuperaban tras cuatro días de pérdidas.
El dólar australiano, de mayor riesgo, avanzó, al igual que la libra esterlina.
En un principio, el dólar encontró apoyo, debido a que los operadores seguían temiendo que los inversores minoristas que se habían organizado en línea pudieran continuar su asalto a las posiciones cortas de los fondos de cobertura, lo que provocaría más volatilidad, pero el interés de la multitud parece haberse desplazado directamente a la plata.
A algunos les preocupa que las fuertes oscilaciones de GameStop y otros valores puedan presagiar una corrección del mercado.
«Tenemos que ver dónde se estabiliza la renta variable, y si se trata de un bache a corto plazo en los mercados de renta variable o si va a tener más recorrido a la baja», dijo Shinichiro Kadota, estratega principal de divisas de Barclays Capital en Tokio.
«El sentimiento de riesgo está impulsando al dólar ahora».
Las disputas sobre el tamaño del paquete de estímulo fiscal del presidente Joe Biden y los retrasos en la puesta en marcha de vacunas también fueron motivos de cautela.
Un grupo de senadores republicanos está instando a Biden, un demócrata, a reducir significativamente su propuesta de paquete de ayuda para la pandemia de 1,9 billones de dólares, y han presentado una alternativa de 600.000 millones de dólares.
El índice del dólar retrocedió un 0,1%, hasta 90,534, el lunes en Asia, tras una ganancia de aproximadamente 0,5% la semana pasada.
En las últimas semanas, el índice se ha mantenido dentro de un rango, después de rebotar desde un mínimo de casi tres años de 89,206 a principios de año.
Los inversores están tratando de evaluar si es probable que continúe la venta de casi un 7% en 2020, impulsada por las expectativas de una recuperación global en medio de un gasto fiscal masivo y una política monetaria muy flexible.
«La tendencia a la baja del dólar estadounidense se ha detenido por el momento», dijo Ray Attrill, jefe de estrategia de divisas del National Australia Bank en Sydney.
«Pero lo que ocurra durante el próximo día, semana o mes probablemente esté en manos del sentimiento de riesgo».
El dólar australiano subió un 0,2%, hasta los 76,57 centavos de dólar, revirtiendo una pérdida anterior ante nuevas señales de debilidad en la recuperación de China, un cliente clave para las materias primas australianas.
Los datos del fin de semana mostraron que la recuperación de las fábricas chinas se ralentizó en enero, afectada por una ola de infecciones de coronavirus.
La libra esterlina subió un 0,4% a 1,3739 dólares, acercándose al máximo de dos años y medio de 1,3759 dólares alcanzado la semana pasada.
El euro se debilitó un 0,1%, hasta 1,2185 dólares, mientras seguía fluctuando en un estrecho rango.
El dólar cayó un 0,1%, hasta 104,655 yenes, retrocediendo aún más desde el máximo de dos meses y medio de 104,94 alcanzado el viernes. (Editado por Shri Navaratnam y Jacqueline Wong). Reuters. Traducido por serenitymarkets.
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