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¿Por qué no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA o directamente tomar beneficios?

19 respuestas
¿Por qué no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA o directamente tomar beneficios?
¿Por qué no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA o directamente tomar beneficios?
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#17

Re: ¿Por qué no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA o directamente tomar beneficios?

¿Quebrado algo que puede imprimir? imposible amigo, si jugamos en mi casa al monoply es imposible que yo quiebre, si la cosa se pone muy mal en el juego, echo a patadas a todos de mi casa.
s2

“Los dos guerreros más poderosos son paciencia y tiempo.” (León Tolstoi)

#18

Re: ¿Por qué no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA o directamente tomar beneficios?

Me has hecho reir scora,

Y eso vale por 10:)

Buen domingo,

Me paso mañana.

(No hay cárceles suficientes en el monopoly)...

*Por cierto,
Igual te quedas sólo jugando:::)

#19

Re: Por que no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA

Hola, buenas recomendaciones sin duda. Ahora no será suficiente con tener diversificado entre varias entidades, con 100,000 Euros por entidad? Y aunque una persona tenga 2,000,000 euros en depósitos, hasta ahora nadie en Europa ha perdido un céntimo...ni es Islandia que se nacionalizaron todas las entidades.

Gracias por tu aportación.

#20

Re: ¿Por qué no hay que comprar bolsa o si hay que abrir cortos en USA o directamente tomar beneficios?

Otro punto de vista
Dada la infravaloración manifiesta con la que los mercados bursátiles empiezan el año 2012 y las buenas perspectivas de resultados empresariales para el presente ejercicio, con crecimientos previstos del 10% a nivel mundial, deberíamos tener por delante un excelente año bursátil.

Puede ser un año de fuertes contrastes, con recesión económica en la periferia de la zona euro, España incluida, yun fuerte crecimiento económico a nivel mundial de alrededor del 3,5%. Ello va a tener su impacto en los beneficios empresariales, que habitualmente crecen de forma importante a partir de aumentos del PIB del orden del 2,5%. Eviten, por ello, comprar empresas cuyo negocio radique íntegramente en los países periféricos de la zona euro, salvo unos nichos de actividad muy específicos, y adquieran empresas exportadoras, por cierto mayoritarias entre las cotizadas.

En los momentos como el actual, en que los inversores tienen mucho más miedo del estrictamente necesario, las cotizaciones bursátiles pasan a ser muy inferiores al valor que se deriva de los beneficios que obtienen las empresas. Se genera una diferencia entre el valor de la empresa y su cotización, denominada descuento fundamental. Estos descuentos tienen su propio ciclo de vida: nacen, crecen y mueren... siempre mueren.

El inversor debe focalizar sus esfuerzos en tres aspectos: en conocer bien a las empresas, seleccionando a las mejores; en analizar la dimensión del descuento fundamental, asegurándose de que la empresa además de buena es barata, y en determinar la fase del ciclo de vida en que se encuentra el descuento, buscando preferentemente las de fase avanzada. ¿En qué fase del ciclo estamos actualmente? O, en otras palabras, ¿hasta cuándo seguirán las bolsas tan baratas?

El actual descuento - fruto de dos eventos (Lehman Brothers y la deuda periférica)-debería anularse completamente en menos de tres años. Dada su enorme magnitud, estaríamos ya inmersos en el inicio de un periodo de tres años muy favorable para la renta variable. De este mismo análisis se deducen, además, unas elevadas probabilidades de que no vuelvan a repetirse los mínimos que los mercados registraron en septiembre pasado (el Ibex a 7.500 o el a Eurostoxx-50 a 1.950).

Se puede argumentar que podrían ocurrir nuevos sucesos que perturbaran otra vez a los mercados. Es siempre una posibilidad, aunque la minimizamos a partir del análisis de los riesgos que conocemos, principalmente los referentes al foco principal que afecta al futuro de la zona Euro.

No tiene la eurozona un problema de deuda superior al del resto del mundo desarrollado. Países como EE. UU. o Japón tienen unos niveles de deuda superiores y son capaces, en cambio, de colocar su deuda a 10 años al 2% y al 1%, respectivamente. La problemática de la zona euro es más de alguna de sus partes que no del conjunto en sí mismo.

Los países de la zona euro que van muy mal, con decrecimientos económicos y tasas elevadas de paro, tienen dos alternativas: realizar ajustes o salir del euro. Si bien las dos opciones son malas, la segunda es mucho peor. Así que estos países seguirán, por su propio bien, la vía de los ajustes.

Por otro lado, los países de la zona euro que van bien - con un crecimiento medio en el 2011 del 2,6% y una tasa de paro media del 6,6%, y que representan un 70% del PIB de la zona euro-,tienen igualmente dos alternativas: facilitar la salida a los países que van mal, en lo que sería una refragmentación de mercados, o bien aprovechar la coyuntura para acabar el trabajo iniciado hace una década, complementando la unidad monetaria con la fiscal. Estos países elegirán, por su propio bien, esta segunda opción.

La zona euro es un proyecto a medio hacer. Si bien 17 países de la Unión Europea están dentro, otros 16 están fuera. El objetivo final es una zona euro extendida a toda Europa. Grecia es importante, sin duda, pero más lo es que otros países como Suecia, Noruega o Polonia quieran entrar en el club, para lo cual este tiene que estar bien diseñado y corregidos los defectos de fábrica.

No tememos, pues, por el futuro del euro, aunque esperamos que siga perdiendo valor frente al resto de divisas, para alivio de las empresas exportadoras de la zona euro... y de sus inversores, entre los que nos encontramos.
J.Puig