Por nuestra parte, los derivados que testamos finalizan su operativa este viernes, así que estamos ya en la fase de hacer balance del ejercicio.
¿Y cómo es ese balance? Pues la verdad es que espectacular. Tanto, que asusta un poco. El mecanismo básico que recomendamos siempre es el apalancamiento a largo plazo, con pequeñas variaciones a corto, y el resultado en 2025 ha sido excelente. Apalancándose los inversores liberan recursos para otras actividades, ya sean personales o empresariales, y gozan de todas las ventajas (aunque, claro, soportan también todos los riesgos) de estar invertidos al 100% de su patrimonio o incluso más.
La estrategia de picotear poco en el corto plazo y consolidar mucho en el largo, para que las comisiones y márgenes del broker no se coman la operativa, y para que la magia de la capitalización compuesta pueda operar, ha funcionado de maravilla a lo largo del año.
Ciertamente, ante las continuas alzas y siguiendo nuestra visión, hemos bajado progresivamente la exposición, y eso, por supuesto, hace que en un mercado alcista las ganancias no sean tan grandes como podrían ser. Pero, como se suele decir, "que los últimos euros los gane otro".
Al inicio de 2026 llegamos con una recomendación de exposición (siempre compradora) de las más bajas en muchos años.
Un saludo y felices fiestas.