El mercado de acciones está en el nivel más alto de todos los tiempos

A continuación, describimos una estrategia que se puede aplicar a cualquier instrumento líquido. Los autores usan esta estrategia para operar con acciones, forex y futuros. En este artículo nos limitaremos a las acciones de Estados Unidos.

Básicamente, la estrategia sigue un enfoque de seguimiento tendencial en los rangos temporales más amplios, como los gráficos diarios y semanales. Para las entradas, también se utilizan gráficos de 4 horas, 1 hora y 15 minutos. Las entradas solo se identifican técnicamente en los gráficos.

El análisis fundamental se hace solo para descubrir qué operaciones se pueden mantener durante más tiempo con una ventaja sobre lo que dicte nuestro objetivo de beneficio técnico.

Use los patrones de precios e impulso.

 

Criterios de entrada

Buscamos entradas potenciales en base a 3 criterios:

1. Patrón gráfico clásico

2. Oferta y demanda

3. ¿Hacia dónde va la tendencia?

Los 3 se pueden leer en un gráfico. Como patrón gráfico clásico para este artículo, elegimos el triángulo plano superior para las entradas largas, ya que a menudo conduce a rupturas explosivas, las cuales también son necesarias para nuestro segundo criterio.

 

Primer criterio 

La Figura 1 muestra un ejemplo de un triángulo de superficie plana, es decir, un triángulo con un límite superior horizontal. Puede ver el gráfico semanal de la marca estadounidense AmericanWoodmark (AMWD), en la que se formó un patrón desde la primavera de 2015 hasta la primavera de 2017, el cual necesitó 2 años completos. La calidad de este patrón es tan alta que se opera durante la ruptura de acuerdo con la enseñanza clásica de gráficos. Sin embargo, para aumentar nuestras posibilidades de ganar una operación y, al mismo tiempo, mejorar nuestra relación oportunidad/riesgo (CRV), elegimos otros criterios de entrada.

 

Segundo criterio 

Después de identificar el patrón gráfico, el valor aparece en nuestra lista de seguimiento y configuramos una alarma de un 3% más alto que el límite superior. Si el precio cierra más arriba, nuestro sistema nos notificará y, antes de que se abra el próximo día de negociación, analizaremos más detenidamente el escenario para identificar los puntos de entrada. Ese fue el caso que se dió el 31.03.2017. Como vemos en el gráfico diario en esa fecha (Figura 2), se formó otro patrón gráfico clásico justo antes de la ruptura: un rectángulo simple. Esto ocurre con mayor frecuencia en los mercados actuales, sobre todo en los últimos 10 años, ya que en los inicios, innumerables participantes del mercado siguen una variedad de estrategias y, por lo tanto, es ahí cuando con mayor claridad ocurren con menor frecuencia. En cualquier caso, el precio se cerró el 31 de marzo de 2017, tanto por encima de nuestro triángulo como por encima del rectángulo, pero con un volumen de negociación bastante intermedio, lo que indica poco interés en esta ruptura. La ruptura fue relativamente modesta y ciertamente le ha costado dinero a mucha gente. Esto también puede ser un problema para nosotros, ya que no necesitamos un desglose de un patrón gráfico clásico para entrar en la operación, sino una ruptura fuerte lanzada por el impulso que provoca grandes saltos. Lo ideal sería una ruptura fuerte, seguida de un declive igualmente feroz, que se ejecuta sin mucha dificultad hasta la barrera superior de nuestro patrón gráfico, donde luego buscaremos señales de entrada. En el mejor de los casos, la entrada ocurre exactamente en el punto donde convergen la línea de tendencia inferior y la barrera superior del triángulo.

Por supuesto, no siempre éste es el caso, pero ocurre con más frecuencia de lo que se piensa a primera vista. Sin embargo, el mercado no es un concierto de pedidos sino que en realidad todo se ve como en la Figura 3. Después de la ruptura fallida del rectángulo local, el precio bajó rápidamente a la formación del gráfico, tras la cual se produjo otra ruptura, pero esta vez mucho más explosiva formando un hueco en el precio, que excedió del precio fuera de las horas de negociación. Como resultado, la vela se convirtió en la zona de soporte 1 antes de la ruptura (ver Figura 2). Esta zona cumplió con nuestro criterio de entrada tanto para la oferta como para la demanda. El hueco se creó debido al aumento de la demanda durante el premercado, lo que significa que a muchos participantes del mercado les gustaría entrar, pero no pudieron o no quisieron, porque durante las primeras horas los precios de entrada fueron horrendos y no hubo liquidez. Posteriormente, cuando el precio regresó a la zona 1, muchos usaron esta oportunidad desaprovechada para entrar al mercado a bajo precio, lo que elevó el precio de nuevo.

 

Tercer criterio

Nuestra oportunidad no necesariamente tiene que ser un hueco, puede ser un impulso muy fuerte, fuera de toda proporción con los otros movimientos del gráfico, lo cual nos ayudará a identificar una zona determinada como la zona de entrada. Después de esperar con tanta paciencia nuestra entrada, se crea la primera oportunidad. Es importante destacar que necesitamos al menos un CRV de 3:1 y el impulso anterior debe haber formado un nuevo máximo histórico, lo que cumple nuestro tercer criterio: estamos yendo con la tendencia. Nuestro objetivo de beneficio está exactamente en este máximo, nuestro punto de salida en caso de pérdida por debajo de la zona 1.

 

La entrada 

Podemos entrar con una orden limitada que colocaremos en el límite superior de la Zona 1 o, para mejorar nuestras posibilidades, esperar las señales del mercado cuando el precio entre en la zona. Éstas podrían ser estructuras tales como patrones de gráficos clásicos en las ventanas de menor rango temporal (gráficos de 15 minutos y de 1 hora) o patrones de velas individuales en las ventanas de mayor rango temporal (gráficos de 4 horas y diarios). Esto generalmente aumenta la probabilidad de ganar, pero por otro lado de esta manera también perderemos los movimientos individuales porque no siempre obtendremos una señal de entrada. En nuestro ejemplo, la señal de entrada surgió al darse la ruptura de un triángulo en el gráfico de 1 hora que se había formado durante 2 días hábiles (Figura 3). Además, también tuvimos patrones de velas fuertes en el gráfico de 4 horas. Al elegir dicha entrada programada, también íbamos a reducir nuestras pérdidas y aumentar nuestro CRV. Sin embargo, esto también aumenta la probabilidad de que salgamos con pérdidas.

 

Otra oportunidad en la Zona 2 

Nuestro patrón triangular grande permanece intacto ya que la tendencia está intacta y aún no se ha alcanzado el objetivo del patrón gráfico clásico. Para tales triángulos se mide desde el punto más alto de la estructura al más bajo y agregándolo al punto de corte (Figura 4). De hecho, el gráfico semanal retornó a la zona 2. Lo cual se definió en base a la última vela antes del último hueco alcista en febrero de 2017. Por lo tanto, fue posible una operación a largo, cuyo objetivo de precio era el objetivo clásico del gráfico.

Gestión del riesgo y la posición

Arriesgamos un máximo de 0.5 % de nuestro capital por operación. Dado que podemos encontrar un sinnúmero de operaciones en los mercados de renta variable globales, queremos obtener la mayor cantidad posible para lograr una cuenta global más estable. Básicamente, reducimos el riesgo de una operación a 0 (en el punto de equilibrio) si la posición tiene el doble del riesgo inicial en beneficios. Mantendremos la operación por más tiempo que al llegar al valor del último máximo, dependiendo del sentimiento general del mercado y de los criterios fundamentales de las acciones en sí mismas. Describirlo con más detalle está más allá del alcance de este artículo. Del mismo modo, hay situaciones en las que las posiciones en pérdidas ya están cerradas antes de que se alcancen los puntos de salida predefinidos.

 

Resumen 

El proceso de identificación de oportunidades perseguido con esta estrategia se puede describir de la siguiente manera:

1. Escaneo del mercado de los Estados Unidos para las acciones que alcancen máximos históricos el viernes después del cierre del mercado o los fines de semana 

2. Si no hay un nuevo desbloqueo: identifique los patrones del gráfico, establezca su lista de vigilancia y ponga alertas en las marcas de ruptura 

3. Si se rompe de nuevo: la oferta y la demanda serán el criterio más importante. ¿Habrá zonas a partir de las cuales “explotará” el precio en la ruptura? En caso afirmativo, ponga la orden o alarma en estas zonas (según la intensidad de las zonas y la situación del mercado)

4. Durante la semana, espere a que suene una alarma en las zonas de ruptura

5. Si la señal de entrada tiene un CRV de 3:1, prosiga con la operación.

 

 

 

 

Este artículo ha sido extraído de la edición de abril de la revista TRADERS' by Rankia, si estás interesado en leer más artículos relacionados con el Trading, puedes suscribirte de forma gratuita a continuación.