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Valor del día en Europa: Adyen, farolillo rojo del AEX 25, abandona su objetivo anual de ventas.
AOF • 14/08/2025 a las 10:57
Adyen (-17,34 %, a 1211 euros) sufre fuertes pérdidas en la Bolsa de Ámsterdam. La empresa neerlandesa especializada en soluciones de pago y servicios financieros ocupa el último lugar del índice AEX 25, tras publicar unos resultados del primer semestre por debajo de las expectativas y revisar a la baja su objetivo de ventas para el año 2025. En los primeros seis meses del año, Adyen ha visto aumentar su facturación un 20 %, hasta los 1093 millones de euros, pero los analistas esperaban un nivel ligeramente superior: 1110 millones de euros según LSEG.
El aumento de la facturación neta se vio respaldado por «un incremento de la cuota de cartera de los clientes existentes».
El grupo neerlandés precisa que «su crecimiento se ha visto frenado por los cambios en los aranceles estadounidenses, que han afectado especialmente a los grandes comerciantes en línea con sede en la zona Asia-Pacífico».
Por su parte, el EBITDA aumentó un 28 % hasta alcanzar los 543,7 millones de euros, con un margen EBITDA del 50 %, frente al 46 % del primer semestre de 2024. Se esperaba que alcanzara los 550,8 millones de euros. Por último, el beneficio neto ascendió a 481 millones de euros, lo que supone un aumento del 17 %.
Al mismo tiempo, el volumen procesado por Adyen alcanzó los 649 000 millones de euros en los primeros seis meses del año, lo que supone un crecimiento del 5 % con respecto al año anterior.
Adyen precisa que, si bien sus avances han sido en general conformes a las expectativas durante el periodo, parte de sus clientes se han visto afectados por presiones externas. «Los cambios en los aranceles estadounidenses han afectado especialmente al comercio electrónico, mientras que las fluctuaciones monetarias también han repercutido en nuestros resultados», destaca el grupo neerlandés.
«En el primer semestre, nuestra rigurosa ejecución nos ha permitido crecer de forma continua en todas las regiones y sectores de actividad, aunque algunos clientes se han enfrentado a un entorno operativo más difícil. Ante la evolución de la dinámica del mercado, la capacidad de adaptación se vuelve tan importante como la capacidad de crecimiento», explicó Ethan Tandowsky, director financiero de Adyen.
Tras esta publicación, su competidor Worldline registra una de las mayores caídas del índice SBF 120. La empresa pierde un 1,38 %, hasta los 2,92 euros.
Perspectivas decepcionantes
Adyen está siendo sancionado por los inversores debido a sus perspectivas. El grupo considera que el entorno macroeconómico se ha vuelto cada vez más incierto.
Cuando se publicaron los resultados del segundo semestre de 2024, el grupo anticipaba una ligera aceleración del crecimiento de su facturación neta anual para 2025, suponiendo un crecimiento estable del volumen de mercado. Este último experimentó un aumento inferior a las previsiones de la empresa durante los primeros seis meses del año. Por lo tanto, Adyen considera que ahora es «improbable que se produzca la aceleración prevista». Se espera que esta tendencia continúe hasta finales de año.
No obstante, se han confirmado los objetivos financieros y se sigue esperando un crecimiento de la facturación neta de entre el 25 % y el 30 % hasta 2026 inclusive, y el margen del EBITDA debería ser superior al 50 % en 2026.
Adyen (-17,34 %, a 1211 euros) sufre fuertes pérdidas en la Bolsa de Ámsterdam. La empresa neerlandesa especializada en soluciones de pago y servicios financieros ocupa el último lugar del índice AEX 25, tras publicar unos resultados del primer semestre por debajo de las expectativas y revisar a la baja su objetivo de ventas para el año 2025. En los primeros seis meses del año, Adyen ha visto aumentar su facturación un 20 %, hasta los 1093 millones de euros, pero los analistas esperaban un nivel ligeramente superior: 1110 millones de euros según LSEG.
El aumento de la facturación neta se vio respaldado por «un incremento de la cuota de cartera de los clientes existentes».
El grupo neerlandés precisa que «su crecimiento se ha visto frenado por los cambios en los aranceles estadounidenses, que han afectado especialmente a los grandes comerciantes en línea con sede en la zona Asia-Pacífico».
Por su parte, el EBITDA aumentó un 28 % hasta alcanzar los 543,7 millones de euros, con un margen EBITDA del 50 %, frente al 46 % del primer semestre de 2024. Se esperaba que alcanzara los 550,8 millones de euros. Por último, el beneficio neto ascendió a 481 millones de euros, lo que supone un aumento del 17 %.
Al mismo tiempo, el volumen procesado por Adyen alcanzó los 649 000 millones de euros en los primeros seis meses del año, lo que supone un crecimiento del 5 % con respecto al año anterior.
Adyen precisa que, si bien sus avances han sido en general conformes a las expectativas durante el periodo, parte de sus clientes se han visto afectados por presiones externas. «Los cambios en los aranceles estadounidenses han afectado especialmente al comercio electrónico, mientras que las fluctuaciones monetarias también han repercutido en nuestros resultados», destaca el grupo neerlandés.
«En el primer semestre, nuestra rigurosa ejecución nos ha permitido crecer de forma continua en todas las regiones y sectores de actividad, aunque algunos clientes se han enfrentado a un entorno operativo más difícil. Ante la evolución de la dinámica del mercado, la capacidad de adaptación se vuelve tan importante como la capacidad de crecimiento», explicó Ethan Tandowsky, director financiero de Adyen.
Tras esta publicación, su competidor Worldline registra una de las mayores caídas del índice SBF 120. La empresa pierde un 1,38 %, hasta los 2,92 euros.
Perspectivas decepcionantes
Adyen está siendo sancionado por los inversores debido a sus perspectivas. El grupo considera que el entorno macroeconómico se ha vuelto cada vez más incierto.
Cuando se publicaron los resultados del segundo semestre de 2024, el grupo anticipaba una ligera aceleración del crecimiento de su facturación neta anual para 2025, suponiendo un crecimiento estable del volumen de mercado. Este último experimentó un aumento inferior a las previsiones de la empresa durante los primeros seis meses del año. Por lo tanto, Adyen considera que ahora es «improbable que se produzca la aceleración prevista». Se espera que esta tendencia continúe hasta finales de año.
No obstante, se han confirmado los objetivos financieros y se sigue esperando un crecimiento de la facturación neta de entre el 25 % y el 30 % hasta 2026 inclusive, y el margen del EBITDA debería ser superior al 50 % en 2026.
Ni arrepentido ni encantado de haberme conocido