Les quería contar esta historia que ha durado unas semanas desde que hablo con el protagonista y el protagonista toma decisiones y finalmente vende.
Muchas veces he dicho que la única forma de coger todo un ciclo alcista de un activo especulativo como el bitcoin sería comprarlo cuando sale, tener un accidente, entrar en coma y despertarse después justo en máximos, solo así seríamos capaces de vencer la tentación de vender cuando ganas un 100% o un 500% o un 1000%, solo un comatoso tiene el temple suficiente para soportar el tintineo implacable de las terminales bursátiles.
Pues algo así ha pasado durante el último mes, verán yo tenía la típica comida con amigos donde hablas de lo humano y lo divino y les conté que había comprado unas acciones cuando la crisis del repo también llamada covid que compré cuando nadie quiere comprar y todos venden y que las fui soltando, pero fue de pasada porque hablaban de invertir en zulos y alquilarlos a 600 euros al mes, porque según mis amigos la vivienda nunca baja y el alquiler es la mejor solución de inversión porque el activo está ahí y siempre se puede vender, ante un público tan entregado empecé a hacer la típica media verónica y el habitual pase de pecho para obviamente pasar a hablar del futbol y de la champions league que siempre es un recurso ameno para huir de algo.
El caso es que uno de esos amigos, uno muy prudente, de los que escucha más que habla, se me acerca después y me dice:
-pues yo a 8 vendería las BBVA
-que a 8 si está más arriba
-es que verás mi padre compró unas acciones del BBVA que era el banco donde tenía los ahorros y todo domiciliado y el que le atendía le iba asesorando para invertir y se fue comprando acciones, de hecho tenía acciones compradas desde el año 2002 fue comprando en caídas y las mantenía y cuando volvía a caer volvía a comprar.
-Haz una cosa habla con el del banco que te saque un extracto de lo que tienes y a que precios de compra y te digo como salió la inversión.
-Yo quiero venderlo, coger la pasta y trincarme un coche guapo
-Bueno pásamelo
Y me pasa esto:
El padre de mi amigo es uno de esos que en el título del post he llamado “los que abandonan este mundo”, vamos que el buen hombre (era realmente majo e inteligente) enfermó y no pudo vencer a la enfermedad, la enfermedad le venció a él y el hijo recibió eso en herencia, junto a algún inmueble. Todo esto ocurrió hará unos cuatro años, cuando nuestra Sanidad colapsó y muchas personas no fueron atendidas porque el coronavirus impidió que muchas personas recibieran sus tratamientos, pero el padre de mi amigo tuvo las acciones muchos años, y mi amigo las recibió y ni las miró, las recibió como quien recibió una casa cueva en Granada, no pensó ni en venderlas ni nada hasta que me oyó en aquella comida hablar de que los activos financieros son muy interesantes y que no hay que pensar solo en términos de inmuebles y que se pueden obtener plusvalías con ellos.
Analizamos la operación a ver cómo había salido la inversión, compras en 2002, en 2009 y en 2012, vamos cuando las cosas iban mal pero mal compraba y las dejaba, se dedicaba a cobrar el dividendo y ni miraba la cotización, esto me recuerda al estilo de mi buen amigo de Twitter Ipar, seguro que le gusta la historia, pero bueno detrás de cada padre siempre hay un hijo dispuesto a gastar lo que el padre ahorró, es ley de vida, y si no es el hijo puede ser la nuera o la exmujer del hijo, para gastar siempre hay alguien. Total que tenía 5769 acciones y el coste de adquisición era de 34.588 euros con lo que tenía un precio medio de 5.99 euros, todo esto sin contar los dividendos cobrados por su padre y por él en todo este tiempo.
Cuando vio que sus acciones cuando le sacaron el extracto tenían un valor de 62.132 euros estaba como loco, quería vender, liquidar, marcharse con su pasta y comprarse un coche guapo después de irse de vacaciones a un resort de las Canarias a ponerse ciego de caipirinhas y mojitos, algo muy loable y digno que probablemente era para lo que todos los padres ahorramos, para que nuestros hijos puedan pulirse nuestro esfuerzo en Resort de pulserita con comida y bebida sin límite.
Total que el tío está como loco por vender y me pide opinión, a mí, que las vendí más abajo, pues vamos le dije que la banca estaba en un momento mágico, con altos tipos de interés para cobrar a los esclavos con hipoteca y bajos tipos de interés para pagar a los hombres libres con depósitos y encima en una época con aún baja morosidad y en la que el despilfarro del gasto público de gente como Biden o Sánchez tenía a la economía chutada y no se veían síntomas de recesión, pero que pasara lo que pasara lo que viniera sería malo para los bancos, que el momento de venta era este y que yo veía lógico que vendiera. Y se va corriendo al banco a hablar con su “gestor”, y el “gestor” del BBVA le dice que venda, pero que venda ya, que es un momento superoportuno que nunca van a estar a este precio que venda y que con lo que saque se haga participe de un fondo de inversión que tienen en BBVA que gana mucho y que seguro que el año que viene ganará más y que debe soltar las acciones y comprar ese fondo (ese fondo que si le coloca el gestor, el gestor cobra una comisión por colocarlo…)
Total que se decide a vender, y claro se va a la oficina a vender las acciones y el gestor le dice que lo tiene que vender por internet y le dan unas claves, y no se aclara y me llama por teléfono y me dice que si le puedo ayudar que si conozco el entorno web de BBVA (que es uno de los bancos con los que trabajo y que es uno de los brokers que tengo), total que me arrimo a su casa, procedo a hacerle la venta y mi amigo se sorprende de que el dinero “ya está en la cuenta!!!!!!!!!!!!!!!!”, se extraña de que se ingrese directamente en el mismo instante y que no haya retención de IRPF…
El precio de la venta fue de 10.88 y mi amigo se subía por las paredes de espaldas igual que la niña del exorcista pero sin insultar al interlocutor, tenía junto a la mesa el pedido del Tesla model 3, lo cual es muy digno, todo euro gastado de un modo ecológico merece nuestro aplauso, todo lo que sea por salvar el medio ambiente, ayudar a las ballenas, o reducir nuestra huella de CO2 es algo digno y debemos apoyar esas medidas, esa gente puede entrar en los centros de las ciudades subvencionados por los que queman gasoil o gasolina como terroristas ambientales, todo es poco para nuestros salvadores, y obviamente también tenía abierta la página de Meliá para reservar un resort todo lujo en Tenerife. Y mientras ejecutaba la venta yo pensaba en el padre y en si su idea de qué hacer con los ahorros era esa o no, de algún modo me sentí un poco culpable, pero eso es lo que pasa por postergar tu consumo presente y lanzarlo al futuro que lo mismo en el futuro el que consume es otro u otra.
Y ahora viene el análisis económico, la inversión obtuvo una plusvalía de casi 5 euros por acción, sin tener en cuenta fiscalidad ni sumar los dividendos cobrados durante todo este tiempo. Esta acción en 2020 estuvo a 2 euros, en ese instante el titular perdía alrededor de 4 euros por acción y no vendió, y no vendió porque el muerto no toma decisiones, ¿es el mejor inversor posible? El que se está quieto y no toma decisiones, esa es la moraleja de hoy, está claro que yo planteo movernos, ser activos y seguir a los ciclos, y también está claro que cuando tienes enormes beneficios y miras tu cartera controlar ese impulso que te lleva a hacer realidad los beneficios es complicado, aunque eso lo que hace es que cortas la operación y si sube más te lo pierdes.
¿Acaso el finado es el mejor inversor posible, o el comatoso, o el amnésico, acaso todos aquellos que compran y se olvidan y no tocan, no miran, no piensan, son los mejores inversores porque no sobreoperan? Esa es la moraleja de hoy… bueno hay varias, otra es la de todos aquellos que están renunciando a consumo presente y guardando y guardando que acaban legando sus bienes a un individuo con otras curvas de utilidad y con otra curva de consumo presente/consumo futuro, vamos lo que toda la vida hemos llamado un quemapasta.
Por cierto ojo a la cotización de BBVA hoy, porque mi amigo que no miraba la bolsa nunca ahora con todo lo explicado se ha hecho adicto, me he sentido como el camello que vende el primer chute a un menor, y ahora no deja de mirar cuanto ha bajado la acción y no deja de decirme lo agradecido que está porque le diera la idea de vender, a ver yo no sé qué va a bajar justo cuando vende, pero él si lo cree…
¿Pero esto es así? ¿Son los que no hacen nada los mejores inversores?
¿Acaso no habría ganado más si hubiera seguido a la fed y además de comprar en mínimos hubiera vendido cuando el ciclo lleva la bolsa a máximos?
¿Acaso no habría perdido todo si en vez de abrir la cuenta en el BBVA su padre la hubiera abierto en Banco Popular?
¿Acaso no sería uno de los que acabaron en los juzgados si en vez de un banco hubiera abierto la cuenta en una caja de ahorros y su gestor les hubiera colocado participaciones preferentes?
¿Acaso Unicaja ha tenido la misma evolución que BBVA que ha invertido en México y se salió de EEUU justo antes de las crisis de los bancos regionales americanos?
¿Acaso hubiera sido un éxito si la inversión se hubiera hecho en Grifols, Duro Felguera o Abengoa, empresas que en su momento era sólidas y fiables?
No amigos, no hacer nada, no es lo mejor puede parecerlo en situaciones como estas pero la realidad es dinámica y a los inversores nos toca improvisar con los factores que van apareciendo, la gestión activa evita ciertos desastres. No podemos ser Marvin, no recuerdan lo mal que acabó Marvin, de verdad creen que Marvin es nuestro modelo, tenemos que ser el Sr. Lobo, Marvin no hizo nada, el Sr. Lobo se adapta
Disclaimer
Ya saben que no puedo aconsejar legalmente vender acciones de BBVA o Unicaja pero creo que mi amigo tomó una buena decisión, me refiero a la venta de esas acciones en un momento de máximos, ya después lo de consumirse el capital y disfrutarlo en vez de seguir ahorrándolo y no disponer de él es otro santo. En todo caso ya van casi un -10% desde máximos.