¿Se está pasando hambre en España?. Noticia inquietante.

Hay que diferenciar entre la miseria vergonzante y la miseria desvergonzante. La miseria vergonzante se vivió en la doble post-guerra de España,cartillas de racionamiento,frío,miseria,desnutrición,etc,sobre todo en el bando perdedor,que es dónde me crié,teníamos verguenza de ser muy pobres y se disimulaba,hay mil anécdotas. Pero nos espabilamos,yo con 10 años recogía papeles,metales,carbón en las vías del tren,etc y lo vendía a los traperos y chatarreros,con ese dinero yo compraba un Kg de pan,1000 grs Precio=5,30 ptas=0.03 euros). no como ahora que 1/4 de Kg. son 150 gr. Con ese pan y algo más, comíamos siete personas. Mi padre Q.E.P.D. despúes de salir de la cárcel (ex militar profesional republicano), se colocó de peón en una fábrica y su sueldo no llegaba ni para dos días. Mi madre Q.E.P.D. hacía de fregona, la pobre,lavando la ropa de los demás.... y salimos y tanto que salimos,llegaron los 60 y se acabó la miseria. Esto era miseria vergonzante. La miseria desvergonzante es la actual,lo de los de los vividores del paro,del PER,de la cervecita diaria,el Marlboro,las tragaperras,etc.,el no luchar,el ganduleo. El dinero está en la calle,pero hay que trabajar para buscarlo,madrugar,sacrificarse,etc,etc, habrán casos excepcionales,pero pasar hambre,HAMBRE,no pasa nadie. Hambre de cubatas sí, de buen tabaco,de tapitas,de carajillos, quizás,pero irse a dormir con la barriga vacía de 24 horas sin comer...NO. Yo no pasé hambre,pero si otra sensación que es la falta de saciedad...Comer dos patatas cuando te hubieras comido todo la azafata,comer un huevo frito cuando te hubieras comido cuatro,etc, sin hambre ,pero siempre pensando en comer,pensando en la Navidad para comer pollo. El otro día, me pidió dinero un vagabundo,por cierto entrado en carnes,le dije que se lo daba si era para vino y el me dijo: "Pos pá que va a ser,sinó" le agradecí la franqueza y el hombre también me agradeció la ayuda. Nos entendimos los dos. Por ahí van los tiros.....,pero lo más decepcionante es que a los 60 y pico de años de aquella época tan dura, vuelva a ver situaciones de precariedad parecidas. Una cosa es,por ejemplo,"El espíritu de la Colmena" y la otra las fiestas del botellón. Los principios morales han cambiado,trabajo,esfuerzo y sacrificio ya no gustan a nadie y ese es el único camino para salir del túnel. Hambre en países africanos,en la India,pero en España hay más cuento que hambre. Todas las opiniones son respetables,pero no hay que caer en el simplismo o en lo políticamente correcto,que es lo más incorrecto de la política.

Creo que aqui ninguno podemos decir demasiado de la pobreza porque no la conocemos, y menos del hambre. Se puede generalizar pero nunca se esta en lo correcto, porque nadie sabe exactamente las condiciones de las personas que estan en estas situaciones y me da que ninguno de nosotros se para hablar con estas personas. Lo unico que podemos hacer es opinar sobre estadisticas y poco mas, porque hasta que no estemos en la situacion no sabremos como actuaremos. Es muy frivolo hablar desde la estabilidad economica. Lo unico que se ve es que hay mas pobreza, mas gente en las cocinas economicas y delitos por hambre, eso es innegable, de ahi a decir que los pobres con la cerveza o el pitillo, igual esos son una minoria y los que estan pasando hambre de verdad, estan intentando encontrar donde conseguir algo de dinero o comida

Aunque la red social en España deja mucho que desear, yo veo que en la parroquia de mi barrio, cada principio de mes reparten comida y otros productos a gente normal y corriente. También hay un local de Cocina Económica. Y la mayoría tenemos algún familiar que nos pasaría 50 euros al mes para comida sin ningún problema SI REALMENTE lo necesitásemos.

Pero ya el tipo de "robo" del que habla la noticia para mi resulta clarificador. Los robos son del 20 al 30 de cada mes. Yo si cobro 600€ al mes, reparto 20€ para cada día. Y si cobro 300€, pues 10. Pero siempre conoces a gente que cobra el doble que tú y tiene la cara dura de decirte "que no llega a fin de mes". Claro, le ingresan sus 3.000€ el día 1, y lo primero que hace es irse al Corte Inglés a fundirse 1000€ en mamarrachadas, comprarse 10 cartones de tabaco para quitarse el mono de los 10 días anteriores, ropa de marca...

Yo tengo algunos años, y se lo que es tener falta de cosas (que no hambre). Cuando era niño no había para helados, ni croasán dominguero, ni Fanta y tapa en el chiringuito playero. Pero ahora mucha gente necesita aparentar, y aunque tenga que robar la comida a fin de mes (por no pasar la "vergüenza" de ir a Cáritas), que me vean en la terraza lo bien que vivo.

Estoy con Usted, la apariencia es un arte pero en el fondo un teatro de puertas hacia fuera y de tragedia de puertas hacia dentro. Me recuerdan a los hidalgos venidos a menos del s. XVII, que se ponían migas de pan en la barba para que la gente pensara que habían comido. Recuerdo una historia curiosa de un individuo que vivía en Málaga y que portaba buenos trajes, conducía coches bastante caros y vivía en el centro, y lo conozco porque su hijo salía con mi hermana. Celebró la comunión de su hija a "tutti plein" en un hotel 5 estrellas. Más tarde nos enteramos que no pagó la factura porque no tenía un duro,la casa tampoco era comprada sino alquilada y su casa era visitada frecuentemente por el cobrador del frac.Vivía al escondite y en su casa las latas de fabada y lentejas eran comida del día porque ya no le fiaban.Debía lo más grande.Creo que hay muchas historias como esa, el arte es que no se sepan.S2

Me he sentido muy identificado, no por mi, sino por lo que cuenta mi padre, de lo que fue su niñez, de miseria yo no llamaría vergonzante, sino miseria digna.
Mi abuelo, vencido, llegó en 1945 de Córdoba con su familia, 5 hijos mas seis que vendrían despues, y hasta 1956 vivieron de ocupas, si si, de ocupas, hasta que la empresa donde trabajaba, construyó un bloque para sus trabajadores. Lo mejor de todo es que antes de la guerra mi bisabuelo era lo que ahora llamaríamos un pequeño empresario. Puestos en el mercado, empresa de transportes, y trabajo para todos sus hijos en los negocios familiares...
Sigamos: Mi padre, tiene, es un decir, aún las manos negras de ir a por carbón a las vías del tren.
Colarse en Mestalla para ver el futbol y de paso arramblar con todos los cascos de bebida para sacar unas pesetas por ellos.
Comer pero no saciarte.
No poder estudiar lo debido porque había que cuidar a los pequeños.
Ir al puerto a "conseguir" plátanos de los que descargaban los barcos.
Pedir chicles a los americanos..., y una vez recibir 20 duros de uno de ellos, y acordarse mi padre hoy, casi hasta las lágrimas, de la alegria que se llevo mi abuela, al darle los 20 duros.
Muchas veces decir que estaba enfermo mientras los amigotes se gastaban el dinero del jornal en el bar, porque daba todo el dinero del sueldo en su casa, porque hacía falta.
Y empezar a trabajar a los 14 años, durante 46 años, para por fin jubilarse la semana pasada, precisamente...Pobres, vencidos, pero honrados, sin robar nunca nada a nadie,(nadie los denunció por pegar la patada a aquella puerta...) y trabajando como un ca...ón toda la vida.
Luego vinieron los sesenta, y lo que ahora sería una vida humilde, para ellos era casi como ser ricos en comparación con diez años antes. Un queso a la semana, dos jamones al mes, tortillas de patata con muchos huevos, bocatas de blanc i negre..., se desquitaron bien de lo pasado casi durante 25 años antes...

Actualmente, lo que le diferencia de su mejor amigo de toda la vida, con el mismo oficio por cierto, que este último optó por pasar de la miseria vergonzante como bien la llamas, a la miseria desvergonzante,lo que lleva a un resultado, entre otras cosas:
-uno vive en su piso propio de zona media y otro alquilado en las afueras.
-uno cobra una pensión mas que digna y otro 600 euros. Por supuesto el segundo no tiene unos miles de euros en un plan de pensiones.
-uno tiene un buen coche alemán en su garaje, y otro juega a las máquinas en el bar, y no tiene coche.

En resumen, y como bien dices, insisto en la cultura del esfuerzo, del levantarte días que agusto te quedarías en la cama, incluso a veces, levemente enfermo, para ir a trabajar. Yo creo que mucho es lo que aprendemos de pequeñitos ver hacer a nuestros padres.

En resumen, secundo una a una tus palabras. Un saludo.

Conmovedores testimonios, amigos. Buen material para una serie televisiva que provoque lágrimas por toneles. Pero veo que nadie pone el dedo en la llaga. Y perdonadme que insista. Hay que huir de los tópicos de la cervecita y el Marlboro. La crisis está aquí, ha llegado como un toro furioso y descontrolado que se está llevando por delante las expectativas y el futuro de millones de trabajadores que se ven arrojados a la calle como trastos inservibles, trabajadores que siguen comiendo (por ahora) y tomándose su cervecita (a lo mejor Adlerbrau en lugar de Mahou o Heinekken, y quizá sólo una el domingo, en lugar de tres).
Pero quiero insistir en que aunque no tengamos una situación que pueda semejarse a la que hemos escuchado de nuestros abuelos y padres (el mío ya era pastor ¡con seis años!), hemos de convenir en que no sólo de pan vivimos hoy. Hay muchos compromisos personales, proyectos de vida, en los que nos hemos embarcado al calor de una situación que inspiraba confianza: compra de piso, tal vez, coche nuevo, un ordenador para el niño que empieza en el instituto... Eso son necesidades, no voy a decir que tan acuciantes como la más básica, que es alimentarse, pero son también necesidades: vivir en una casa, de alquiler o propia, la primera de ellas.
Por lo tanto, insisto en que la gravedad de esta crisis, que no ha sido provocada por ninguno de los trabajadores que por millones están perdiendo sus puestos de trabajo en todo el mundo, no sólo en España, no puede hacernos reflexionar con tan baja altura de miras, que si la cervecita, que si el Marlboro, que si los 600 euros malgastados...
Hay que gritar que ESTE SISTEMA ES UNA MIERDA, y EXIGIR A QUIENES NOS GOBIERNAN CAMBIOS CUALITATIVOS Y CUANTITATIVOS, BERREAR CONTRA LAS DESIGUALDADES (¿por qué no se limita el monto de las grandes fortunas?) Y REBELARSE CONTRA LA EXCLUSIÓN SOCIAL.
Porque, entre otras cosas, hoy ya no tendríamos la posibilidad de buscar carbón en las vías, ni pedir chicles a los norteamericanos: no hay trenes que usen ese mineral y los yankees están tan jodidos como nosotros.
(Y ya digo de antemano que paso de quienes me acusen de utópico y afirmen que estamos en el mejor de los mundos posibles).
Saludos.

No hay mas que decir, no hay mas sordo que el que no quiere escuchar

Opino lo mismo, mira qué casualidad, y qué bonito coincidir plenamente.
S2