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Los mandos medios del PCCh son más peligrosos que la OTAN para Xi Jinping

Los mandos medios del PCCh parecen estar haciendo más daño al régimen de Xi Jinping que la OTAN o que EEUU.

China es un país que tiene una mezcla de país desarrollado y tercermundismo muy contrastante.  Y es esa mezcla la que hace que los mandos medios del PCCh y los gobiernos locales empiecen a funcionar como un rebaño de gatos que deben ser pastoreados.  ¿Alguna vez has tratado de meter al redil a un grupo de gatos?

En la guerra entre China y Japón, China tenía un ejército tercermundista a toda honra.  Millones de personas sin capacitación alguna, saliendo en masa a atacar a un enemigo.  Esto nunca cambió. No tienen redes de apoyo social para los más vulnerables (ancianos, enfermos, pobres) como si hay en occidente, la mayor parte del empleo es informal, lo que causa que la recaudación de impuestos no represente la mayor tajada de los ingresos fiscales.  Y tantas otras cosas que están por debajo del nivel de un país de tercer mundo.

Para entender lo que ocurre vamos a tener que adentrarnos en la idiosincrasia de la gente en China, para comprender cómo es que a pesar del aparente control absoluto del gobierno sobre el ciudadano chino, existe un caos desorganizado.  

Hay muchas malas costumbres que vienen de los tiempos de pobreza pre-revolución, y que siguen presentes y amenazan al régimen de  Xi Jinping.  Cabe aclarar que me referiré a aspectos de costumbres e idiosincrasia específicos de los que viven en China continental, y no es extrapolable a chinos viviendo en ultramar, ni tampoco a ciudadanos de otros países de Asia que compartan rasgos físicos.  

 El sentido de superioridad


Ese mismo sentido de superioridad que inunda a las élites en occidente, y que les hace estar desconectadas de las necesidades de los ciudadanos, y crea una mezcla de arrogancia e incompetencia, está presente también en la cultura china, pero a niveles más interpersonales.

Por ejemplo, si vas a conocer a una persona china y esa persona quiere impresionarte en el restaurante, probablemente habrá de tratar mal al mesero, para demostrar poder, aunque esa persona sea tan ciudadano de a pie como el mesero.

Este desprecio hacia quienes son considerados inferiores, algo relativamente natural en la China imperial del siglo 19, hoy esa superioridad existe en la jerarquía social y política china. Es decir, que un empresario podría maltratar a un ciudadano de a pie, pero alguien del partido podría maltratar a un empresario como si fuera ciudadano de a pie, y un miembro de la alta jerarquía del PCCh podría maltratar a un miembro de una jerarquía más baja.

Ese sentido de superioridad impide que haya críticas duras que permitan mejorar las cosas, e impide valorar el mérito de las propuestas en el proceso de comunicación vertical. Eso también crea miedo en el estrato que es considerado inferior, porque mientras más alto, peor es el maltrato.  Eso hace que todas las quejas, o las críticas constructivas o las propuestas que están varios niveles por debajo de Xi Jinping, nunca lleguen a Xi Jinping.

La imagen


La cultura de China tiene la imagen muy sobrevalorada, incluso por encima de lo que veríamos para las caprichosas élites de occidente.  

Si un funcionario debe escoger perjudicar a los ciudadanos y traicionar a la patria, con tal de mantener su imagen, lo hará sin dudarlo. 

El problema de la gobernanza


Eso hace que la gobernanza a niveles medios no sea estructurada ni consistente.

Podemos pensar que si hubiera una guerra de China contra alguien, el ejército es el front desk, pero el backoffice funciona muy mal.  Sabemos que en materia de front desk, los chinos han aprendido mucho de Rusia. Pero el backoffice es un desastre, y fue ese backoffice el que causó la revolución francesa en Francia, porque no supo llevar bienestar a los ciudadanos, ni contrato social, ni nada.

La mala ejecutoria del backoffice del gobierno chino se manifiesta en temas alimentarios, de empleo, y en caso de guerra, daría un pobe apoyo de suministros y mala integración de los esfuerzos logísticos.

La consecuencia final es que los niveles medios del gobierno chino, aparte de los usuales culpables cuando hay corrupción, tienen la capacidad de arruinar los planes de sus superiores.

La mejor manera de dar una imagen es mentir en una guerra de narrativas, porque los resultados van primero por la via de la narrativa, en lugar de los KPIs, como en los aparatos estatales tercermundistas. Y así se desinforma a los superiores. Encima, solucionar implica que había un problema, así que prefieren barrer la suciedad debajo de la alfombra, hasta que el problema crece y revienta en la cara a los superiores.  Y prefieren decir que el problema ya se atendió o ya se solucionó, aunque no se haya hecho nada.

Si China fuera un país pequeño, Xi Jinping sólo necesitaría intervenir un sitio, una institución, pero es un país enorme.

Hoy China tiene 3 grandes problemas:
  • Desempleo por salida de empresas
  • Desempleo juvenil de graduados al alza.
  • Un desastre financiero y de vivienda, donde nadie quiere poner la mano al fuego.

Desintegración operativa


Parte de lo que ha ayudado a Rusia ser efectivo en el frente de batalla se debe a la integración y la comunicación.  Los distintos sistemas y participantes comparten información de distintos tipos y eso permite en un tiempo muy corto atacar posiciones con artillería.  Esa unicidad también se vio en la segunda guerra mundial, cuando EEUU lidiaba al tener que poner a negociar a la naval, al ejército y tenía a una fuerza aérea atada a las fuerzas de tierra. Poner a negociar a los diferentes participantes en tiempos de problemas no es lo mejor.

En el caso de los problemas de vivienda, las desarrolladoras se comieron el dinero de los que hicieron leasing para tener casa, y como el sistema plantea que el gobierno pasa dinero a una empresa, que pide prestado al banco y le da el dinero a la desarrolladora por adelantado, no es de extrañar que el peso de la falta de supervisión recae en el gobierno local, porque de mano en mano se pierde un elefante.  Y el problema es que ya no hay dinero, y si se quiere seguir adelante, alguien va a tener que poner el dinero y el gobierno local no quiere por un tema de imagen, y en la empresa fachada que maneja los fondos tampoco, y el banco tampoco quiere poner más dinero, y la constructora ya se gastó el dinero y la corte no permite penalizar a la desarrolladora porque debe tener sus contubernios escandalosos con los gobiernos locales.  Así que el que sale mal es el que hace leasing de la casa.  

Lo serio de esto es que si vimos que occidente puede embargar el dinero a quien le plazca, los gobiernos locales chinos tienen la facultad de incumplir contratos a placer.  Y eso genera una inseguridad jurídica y financiera de niveles escandalosos.  Pero no sólo hay un problema jurídico, sino que hay un incumplimiento del mandato de las altas jerarquías del PCCh de resolver el problema de las viviendas, o sea, una desobediencia de mandos medios.

Imagina un general que ordena que le traigan suministros al frente de batalla, los mandos medios le dicen que el problema ya fue atendido y nunca enviaron los suministros.

A como resuelvan el problema de desempleo igual que como están resolviendo el problema de la vivienda, lanzándose la papa caliente entre los distintos actores, enterrando los problemas en el olvido, normalizando el incumplimiento de contratos, pasando por encima de los derechos de la ciudadanía, un día Xi Jimping podría creerse que en China todo va bien, mientras que hay ebullición social de revolución francesa.

Sabemos que ya Xi Jinping sabe de los problemas, que ha girado directrices, y sabe que el desempleo empuja Tang Ping y Bai Lan entre los jóvenes, y que dicta órdenes. Pero la órden que sale de Xi Jinping es muy diferente de lo que llega a la población.

Parece que si contratabas a alguien para desinformar a Xi Jinping desde occidente, mejor te ahorrabas ese dinero, que los mandos medios del gobierno chino hacen más daño que la OTAN o que EEUU.

Decía el dicho "nunca interrumpas a un enemigo cuando está cometiendo un error".  Parece que occidente no querrá interrumpir a los mandos medios del gobierno chino.  Parece que el partido en su faceta de backoffice, ha resultado más peligroso que un ejército enemigo.  Y si asi va a funcionar con cualquier batalla, seguramente no habrá guerra, porque aunque el ejército chino tenga las mejores armas o las mejores tácticas, o al personal más entrenado, con una mala gestión del backoffice no tendrán suministros, se robarán el dinero en esquemas locales corruptos, violarán contratos, pero dirán que ya los entregaron y a toda honra.

¿Qué salvaría el día?


¿Qué tendría que hacer el gobierno chino para salir de este jaleo?
  • Tendría que entregar cheques de estímulo a los jóvenes graduados desempleados, a los desempleados de fábricas y empresas que se vayan de China, y a los que no han recibido su vivienda, para que con ese dinero se pague su cuota de leasing.  ¿Qué sale caro?  Pues si, pero sale más caro el derrumbe macroeconómico y social si no lo hacen. Y por supuesto deben deben vigilar la ejecución de fondos, porque habrá gente en el gobierno, pasándose de listos, queriendo robarse ese dinero.  Si prefieren la opción tacaña, esa opción tiene un costo geopolítico enorme para China.
  • Tendría que castigar de manera ejemplarizante a los dueños de inmobiliarias que se han comido el dinero en golosinas, y a los más altos jerarcas de gobiernos locales que permitieron este problema.
  • Tendría que desconfiar de sus mandos medios y establecer mecanismos de contraloría y verificación de KPI (ejecutoria) y no una evaluación del desempeño basada en narrativas, donde las exageraciones, los egos y la incompetencia florecen.  Las mentiras tendrían que castigarse con dureza, porque a estas alturas del juego las mentiras para mantener la imagen constituyen desinformación pura y dura hacia las altas jerarquías del partido.
  • China necesitaría auditores externos para poner a los funcionarios con sus barbas en remojo. En todos los niveles de la administración se roban dinero. Es una enfermedad cultural. Eso hace que para el PCCh sea muy dificil financiar grandes iniciativas, porque cada nivel se roba una parte del dinero y lo que llega para obtener resultados es ínfimo.

Los incompetentes en mandos medios están acostumbrados a ganar la batalla contra el ciudadano. El victorioso con el tiempo se vuelve estúpido.  Y esa estupidez puede hundir aún más a China.

El PCCh y Xi Jinping tienen la opción de dejar las cosas como están, y dejar que se destruya China desde adentro, mientras EEUU y la OTAN sólo ven el espectáculo mientras comen palomitas de maíz.  Pero esa no parece ser la mejor opción.

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  1. en respuesta a Joper35
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    Top 100
    #2
    13/04/23 04:09
    En occidente esas cosas de género ocurren cuando quieren distraerte. Te distraen con Trump, con temas de género, para que no veas el tema de la desdolarización o de lo que ocurre en Europa.  
  2. #1
    13/04/23 03:14
    El feminismo y los LGTBXYZ tambien son un "inside job" de los enemigos dentro de occidente mismo?????

    Lo de narrativa, robar dinero y enchufar amigos y familia en puestazos me hizo recordarlo