Rankia España Rankia Argentina Rankia Brasil Rankia Chile Rankia Colombia Rankia Czechia Rankia Deutschland Rankia France Rankia Indonesia Rankia Italia Rankia Magyarország Rankia México Rankia Netherlands Rankia Perú Rankia Polska Rankia Portugal Rankia Romania Rankia Türkiye Rankia United Kingdom Rankia USA
Acceder

Tecnología para dividir o tecnología para unir

El cambio de paradigma será lo que nos defina en el futuro, si hemos de construir una sociedad futura, pasando de la idea de dividir a la idea de unir.

En la evolución de nuestra propia percepción del mundo evolucionamos de no existir a existir separados del mundo.

  • En la Edad Media el arte sólo reflejaba a Dios y los santos y el ser humano no existía en el arte sacro.
  • En el Renacimiento se quiso dar un valor al ser humano, y finalmente el hombre apareció en las artes, las proporciones del hombre, la proporción canónica.
  • Empezamos a ver el mundo de manera distinta, y pasamos a una visión del hombre como eje central de nuestra visión.  Queríamos entendernos nosotros.
  • La naturaleza era lo observado, y el ser humano era el observador, el centro del mundo.
  • Pero pasamos de observar a destruir lo observado, pensando que al destruir la naturaleza no nos afectábamos a nosotros mismos.  Jugamos a ser Dios, y el ser humano desapareció de esa nueva visión, porque nos creímos todopoderosos, capaces de destruir la naturaleza.

Los seres humanos hemos sido notables por nuestra capacidad de dividir.

  • Nos dividimos al competir unos contra otros, en lugar de colaborar.
  • Las bombas dividen edificios, máquinas y personas en pedazos al explotar.  A eso se le llama destruir.  Y hay quienes ganan dinero con la división de la guerra (La guerra: Apostando en la pelea de gallos)
  • Dividimos las tierras, de modo que los animales que emigran en África se encuentran con cercas hechas por humanos y eso les cuesta días extra que podrían significarles la muerte por sed, hambre o cansancio.
  • Dividimos a las personas con etiquetas.  Negros y blancos, ricos y pobres, políticos y nosotros, los enemigos y nosotros, los buenos (nosotros) y los malos (ellos) de la película, esclavos y amos (Inversiones en tecnología y el Coltán (mineral de sangre)).  Estamos geográficamente juntos, pero mentalmente divididos.
  • Destruimos los átomos con reactores de fisión nuclear que parten los átomos en pedazos, y luego no sabemos qué hacer con la contaminante basura nuclear (With no way to process it, US will bury 70,000 tons of nuclear waste).

Los humanos somos muy buenos para dividir, separar.  Hemos construido todo lo que se ocupa para separar, incluso la tecnología.

Pero nos aguarda un cambio de paradigma, que es lo único que hará el futuro y la existencia sostenible.

  • Tendremos que aprender a compartir (El pecado de compartir) y colaborar si hemos de convivir con máquinas, para no vivir en la pobreza y miseria mientras las máquinas hacen todo el trabajo (véase post Arquitectos de nuestra propia obsolescencia).
  • Tendremos que aprender que es más difícil construir que destruir, y que tiene más mérito construir algo nuevo que reconstruir lo destruido.
  • Tendremos que dejar de dividirnos por dinero y el afán de recibir, y unirnos con el trabajo y el afán de dar (Avaricia: La cultura del vago y el pedigüeño).
  • Tendremos que aprender a hacer fusión nuclear que no produce basura radioactiva.
  • Tendremos que aprender de la naturaleza, un sistema donde estamos todos unidos en un sistema, un ecosistema.  Sin entender el ecosistema no podremos construir ecosistemas para sobrevivir en una base espacial permanente autosuficiente.

Estarán aquellos que se resistan, los que quieren dividirnos.  Es cierto que es más fácil destruir que construir.  Y aunque parezca que el que destruye tiene más poder, en realidad al unir se construye una virtud que no se puede destruir con todo el poder del mundo.  Si los que dividen no logran atemorizarnos, nuestra voluntad de unirnos les derrotará, porque ellos sólo saben dividir, y por ello ellos se dividiran entre ellos, se balcanizarán a sí mismos, porque eso es lo que aprendieron.

No estamos acostumbrados a vernos unidos, no pensamos como el bebé que se amamanta de su madre o la madre que protege al niño, como los padres que se aman en lugar de herirse, como el que ama a la naturaleza porque sabe qué es parte de ella.

Pasamos de una visión divinocéntrica donde no existíamos, a una visión antropocéntrica, pero ahora hay que abandonar el antropocentrismo y entendernos como parte del sistema, no el sistema financiero, ni el sistema político, ni el sistema del dinero, que todos esos son sistemas imaginarios que nos enajenan y distraen de la realidad.  Me refiero al sistema real de la naturaleza, que podemos ver y tocar con las manos.

En 2006 todo estaba allí funcionando.  La gente tenía su empleo, la gente compraba, las empresas producían y ganaban, la gente vivía bien en muchos países.  Y de pronto una crisis financiera imaginaria detuvo la maquinaria, igual que se detuvo en 1929.  Es una crisis imaginaria porque sólo existe como videojuego online en las computadoras de bancos y gobiernos.  Y ese absurdo sistema imaginario detuvo toda la actividad humana real.

Los destructores son incapaces de construir y por eso destruyen las vidas de muchos, son incapaces de unir, pues su poder se basa en poder dividir a otros.  Los dictadores han tenido sus estados represivos para evitar la unión de las personas.  Los estados policiales pretenden vigilar para evitar la unión.  Y en los estados orwelianos pretenden disfrazar la distopia profunda división humana bajo la falsa ilusión mercadotecnica de unión utópica.

¿Acaso la frase "soy uno con el universo" es una frase que va más allá de la retórica?  ¿Acaso trae implícita la capacidad de unir?  No tiene sentido luchar contra la oscuridad, porque la oscuridad no tiene sustancia, pues es simplemente la ausencia de luz. Sólo hay que iluminar la oscuridad.  En la oscuridad todo está separado de nosotros y nos tropezamos con los obstáculos, pero cuando vemos al iluminar el lugar, todo está unido por la luz y el camino es claro.

Cuando seamos capaces de crear tecnología para construir (no para destruir), para unir realmente (no para dividir a las personas), cuando entendamos la naturaleza como sistema (y no como la suma de partes) empezaremos el cambio de paradigma para construir el futuro.  Fuimos criados en la mentalidad de dividir, clasificar todo.  Nos va a costar toda una vida aprender lo que es unir, construir, edificar, crear.  ¿Cómo podemos unirnos nosotros hasta ser uno con el universo?

Termino citando una canción de Enrique y Ana que un niño entiende, pero no los adultos, y que ilustra el concepto del cambio de paradigma, de unir en lugar de dividir:

Viva la gente la hay donde quiera que vas
Viva la gente es lo que nos gusta mas
Con mas gente, a favor de gente
en cada pueblo y nacion
Habia menos gente difícil y mas gente con corazón
Habia menos gente difícil y mas gente con corazón

¿Te ha gustado el artículo?

Si quieres saber más y estar al día de mis reflexiones, suscríbete a mi blog y sé el primero en recibir las nuevas publicaciones en tu correo electrónico.

Accede a Rankia
¡Sé el primero en comentar!