La agitación con la deuda de los periféricos, en cierto modo, le conviene a Alemania porque mantiene al euro débil y aumenta exponencialmente sus exportaciones. Sin embargo, no se puede permitir la suspensión de pagos de España e Italia porque esto pondría al euro en situación límite y una vuelta al marco alemán aplastaría las perspectivas exportadoras de los germanos. Esto visto sólo desde un punto de vista, porque Alemania tiene motivos de sobra para apoyar el Proyecto Europeo (políticos, ideológicos, etc.).
Saludos cordiales