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Invertir de manera Ética, ¿se puede?

39 respuestas
Invertir de manera Ética, ¿se puede?
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#25

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

En Bélgica aún recuerdan la Primera Guerra Mundial.

Esta postguerra es muy larga. Y los que fabricaron las armas hicieron negocio antes y causan gastos y daños incluso 100 años después de la contienda. Unos ganaron dinero y otros lo siguen pagando con dinero y con su salud.

https://elpais.com/internacional/2014/07/04/actualidad/1404476121_358259.html

 

 

 

CAMPOS MINADOS EN FLANDES

Un complejo militar destruye cada año unos 1.500 proyectiles de la I Guerra Mundial

JOSÉ LUIS ABELLAN

6 JUL 2014 - 00:27   CEST

 

Los vestigios de la I Guerra Mundial se enredan en el día a día de muchos belgas. En los campos de Flandes, al noroeste del país, miles de proyectiles de aquella contienda acechan en cualquier zanja. Por inofensivas que parezcan —fragmentadas, cubiertas de óxido, aparentemente detonadas…—, muchas de esas armas conservan intacta la capacidad de matar. En mitad de la llanura flamenca, un vasto centro militar aplica las más avanzadas tecnologías para evitar que esos proyectiles cumplan su cometido 100 años después de haber sido lanzados.

Los temores no son exagerados. Dos trabajadores de la construcción murieron el pasado marzo en Ypres, uno de los enclaves más castigados por los bombardeos de la guerra, cuando intentaban desenterrar unos proyectiles encontrados mientras cavaban. La escena resulta familiar para los lugareños: cualquier obra iniciada en ese terreno se topa, antes o después, con restos de armamento. Existe un estricto protocolo que deriva inmediatamente los casos al centro militar encargado de transportarlos y destruirlos, pero la frecuencia con la que se repite el episodio relaja, en ocasiones, los controles.

“Cuando yo era niño, muchas veces iba a dar un paseo al campo o a jugar y me los encontraba. Llamaba a un adulto, que venía, los apartaba en el camino y contactaba con la policía. Me habrá pasado unas 20 o 30 veces en el campo, aquí estamos muy acostumbrados a eso”, relata Jo Lottegier, vecino de Ypres y hoy encargado de promocionar toda la oferta turística asociada a las huellas de la Gran Guerra en la zona de Langemark-Poelkapelle, en las proximidades de Ypres. Lottegier cuenta que algunos vecinos los almacenan como recuerdo —algo que está prohibido— y que a los turistas que visitan la región hay que advertirles constantemente del peligro que supone manipularlos.

Los riesgos no desaparecen ni siquiera con las restrictivas normas del centro militar que el Ministerio de Defensa belga gestiona a pocos kilómetros de Ypres. Un grano de gas mostaza encontrado en uno de esos obuses perdidos bastó para provocar una enorme quemadura en el brazo de uno de los 127 trabajadores del complejo. “No existe riesgo cero en este trabajo. Cada año hay uno o dos incidentes, pero normalmente son leves”, explica Glenn Nollet, comandante del Centro de Eliminación de Artillería Explosiva de Poelkapelle, durante una reciente visita en la que participaron varios medios de comunicación, entre ellos EL PAÍS. El complejo, perdido en una zona poco poblada y sin apenas señalización, solo es accesible con autorización.

Los mismos campos que entre 1914 y 1918 sufrieron el lanzamiento de minas —en buena medida alemanas— acogen hoy estas instalaciones, compuestas de un centro de identificación, donde los expertos comprueban con rayos X si los proyectiles son tóxicos o convencionales, y otro de destrucción del material hallado. “Apenas un 1% de lo que encontramos corresponde a la II Guerra Mundial; el resto es casi todo de la primera”, explica Walter Verhaeghe, responsable del área de identificación.

Cuando recibe la llamada de la policía, este centro desplaza una unidad al lugar donde se han encontrado los proyectiles. Los identifican y los transportan al centro para su destrucción. La demanda de intervenciones es ingente: casi 3.000 en todo el país, de las que 1.839 van a parar a esta instalación, especializada en minas tóxicas, según datos de 2013. Los militares aseguran que ni siquiera tienen tiempo para hacer búsquedas propias; se limitan a atender las llamadas que reciben. Los trabajadores calculan que participan, de media, en 15 intervenciones al día.

“Esta actividad puede durar otros 100 o 200 años”, aventura el comandante Nollet. Se calcula que en la zona se dispararon 1.500 millones de proyectiles. Aunque la técnica de elaboración era muy avanzada para la época, el 30% de ellos no llegaron a estallar por fallos de fabricación. Un 5%, además, eran tóxicos, por lo que sus efectos pueden ser más duraderos e imperceptibles. Los responsables del Centro de Eliminación de Artillería Explosiva eluden cifrar cuántos puede haber aún escondidos, pero dan por hecho que son miles. Cada año se destruyen entre 1.000 y 2.000, dependiendo de las circunstancias.

Con las obras realizadas en el terreno —la zona ha sido cuidadosamente reconstruida— y los movimientos de las placas tectónicas, los obuses tienden a salir a la superficie. Hace apenas cuatro meses, los militares de Poelkapelle recibieron una llamada para acudir a una obra en la que encontraron 782 minas, el 90% de ellas tóxicas. Antes de eso, el mayor alijo que recuerdan fueron 700 toneladas de munición en el año 2007.

Los restos de proyectiles no son patrimonio exclusivo de Bélgica, pero este país ha sido el que más recursos ha dedicado a neutralizarlos. El comandante Nollet asegura que Francia, otro de los países con más munición enterrada, intenta implantar un sistema similar y que de momento se limita a apilar el material encontrado en sus campos.

Las labores de limpieza de la zona belga han cambiado mucho desde que empezaron a desarrollarse, en 1941. Hasta los años ochenta, el material encontrado simplemente se tiraba al mar. Las inquietudes medioambientales llevaron al Gobierno a poner en marcha en 1989 este programa avanzado para destruir el arsenal. El complejo, dotado de fuertes medidas de seguridad, llegó a tener 27.000 obuses almacenados hace unos años. Ahora hay 3.500 de carácter tóxico, esperando una nueva maquinaria más segura para neutralizarlos. Un accidente ocurrido en las instalaciones hace casi dos años, que costó cuatro millones de euros en reparaciones, aconsejó el cambio de técnica.

Pero la eliminación del material convencional continúa. “En la cámara de destrucción hacemos cuatro o cinco sesiones al día. El proceso puede llevar de 15 minutos a una hora, dependiendo del tamaño de los proyectiles”, detalla Dirk Van Parys, supervisor de esta cámara. Los responsables del centro rechazan activar la máquina en presencia de los periodistas, pero explican que se produce un gran estruendo y que el suelo tiembla cuando las minas se destruyen.

A pocos kilómetros de esas detonaciones, un buen número de cementerios y trincheras ofrecen testimonio de una guerra todavía muy presente. Destaca el cementerio alemán de Langemark, un sobrio emplazamiento con pequeñas lápidas que recuerdan a los soldados alemanes muertos en combate y que suelen visitar los escolares. Muchos provienen de Reino Unido, cuyas tropas fueron especialmente castigadas por las alemanas (hubo 300.000 británicos fallecidos en la tercera batalla de Ypres, en 1917). Varios cementerios británicos les rinden homenaje.

El interés por descubrir esas huellas ha crecido este año, con motivo del centenario del conflicto. “El cementerio alemán registra ahora 185.000 visitas al año, un 30% más que antes”, explica el coordinador de turismo de la zona, Joe Lottegier. Cerca de allí, una antigua trinchera camuflada en un polígono industrial sorprende a varios visitantes extranjeros que solo asocian la guerra a los libros de historia.

 

 

#26

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

Hace 1000 años no se invertía en armas y las guerras asolaban el mundo. Pero hace millones de años, no existian ni las civilizaciones, y entre las especies  que evolucionaron al ser humano se extinguían las unas a las otras. Por tanto, vete a vender la idea de que un mundo sin armas es un mundo seguro y un mundo bueno a otro.

#27

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

😪😪😪😪
Hubiera sido mejor dejar pacíficamente q Alemania invadiera Europa..
O Hitler..Stalin...

Mucho mejor 😁😁😁

Solo se que no se nada.

#28

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

Son cuestiones ineherentes a la naturaleza humana.

Una nación que renuncie a la defensa de sus intereses y de su soberanía se expone a su pérdida.

Es una idea muy cándida que no se corresponde con la naturaleza y realidades humanas

#29

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

En mi anterior post reflejo lo que pasa aún hoy en Bélgica con las bombas que quedan de una guerra sucedida hace 100 años. No es una opinión, es un hecho.

Y hace 1.000 años se invertiría en armas, pues alguien debía fabricar y vender espadas y otros utensilios de la época. Alguien proveería a los soldados de caballos, cascos, armaduras, etc. Y si no tenían dinero suficiente, alguien se lo prestaría. Por lo que alguien invertía en la guerra.

Yo no vengo a vender nada. Que cada uno invierta según su forma de pensar y su ética. Yo creo que se puede invertir con ética.

Además tender al desarme es posible. De hecho lo están haciendo EEUU y Rusia con el arsenal nuclear desde que terminó la guerra fría. No es una opinión, es un hecho.

 

#30

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

También debía parecer inherente a la naturaleza humana la esclavitud hasta el siglo XIX, pues desde la Grecia clásica y mucho antes se practicaba y era aceptada como algo natural. También debía parecer inherente al ser humano que las mujeres no pudieran firmar contratos sin el permiso del marido o sacarse el pasaporte sin su autorización como sucedía hasta los años 70 en España. Y lo que digo no son opiniones, son hechos.

Yo no he afirmado en ningún lugar que alguna nación deba renunciar a la defensa de su soberanía. Aunque creo sus intereses los debería defender de acuerdo con las leyes y los tratados internacionales, sin violencia.

Las guerras por controlar materias primas de lugares lejanos son un ejemplo de para qué se usan las armas y los ejércitos (la guerra de Irak por ejemplo).

Yo no he dicho en ningún sitio que no deban existir los ejércitos. Lo único que digo es que yo con mis cuatro eurillos ahorrados no quiero participar en empresas vinculadas al armamento. Y creo que otras personas opinarían lo mismo si supieran a qué dedica el banco donde depositan sus ahorros parte del dinero que les confían. Los que ya lo sabéis ya invertís en lo que estimais oportuno con la información que os preocupais de buscar. 

#31

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

No sé qué tiene que ver no querer que mi dinero se invierta en proyectos armamentistas con Hitler o Stalin. En ningún momento he dicho que deban desaparecer los ejércitos. Mientras haya un país con ejército casi todos los demás querrán tenerlo también.

Ya pago con mis impuestos (como todos los que los pagamos) el mantenimiento del ejército español (con armas caras y en muchos casos inadecuadas para el caso de España, cosa que no digo yo si no personas que saben de la materia), sólo me falta ser más cómplice del asunto invirtiendo en empresas privadas del sector armamentista.

#32

Re: Invertir de manera Ética, ¿se puede?

Yo pensaba exactamente igual, Som Energia. Pero a ver qué te parecen los siguientes puntos débiles:

Igual que no habría que comprar acciones de una empresa que vende armas, ni del banco que la financia, ¿no sería igualmente "correcto" no comprar acciones de las empresas proveedoras de las cuales dependa tanto como de esos bancos? Si un fabricante de misiles necesita acero, ¿ponemos en la lista negra a la empresa que le provee de acero? ¿y a la minera que extrae el mineral de hierro para ese acero? ¿y a la empresa de cátering, la que provee de guantes, la que mantiene los ascensores, etc.?

E incluso podría ser mejor al revés: ¿compramos esas acciones para usar los derechos políticos en el sentido más "ético"? Algo parecido pide la Federación SETEM a los accionistas de bancos ("cédenos tu voto en la Junta de Accionistas para denunciar").

Luego tenemos la "crítica a la crítica" a las armas, que la resumiré así: ¿invertimos en fabricantes de balas y pistolas como las de los policías que neutralizan asesinos? ¿y en fabricantes de material militar no ofensivo, como radares, uniformes, aviones de transporte, o incluso armas como misiles anti-misiles (p.ej., los que neutralizaron misiles Scud desde Irak hacia Israel en la guerra del Golfo, evitaron muchos muertos, tan maléficos no serán esos misiles)?

Pero los párrafos anteriores contienen un error, y es dar por hecho que si soy accionista de un fabricante de armas, le estoy financiando o apoyando o siendo cómplice, y salvo que seamos un Botín o un Buffet, va a ser que no. Sólo le financiaríamos en caso de acudir a una OPS o OPV, comprando acciones nuevas. En el mercado secundario las acciones se las compro a Fulano y se las vendo a Mengano; el único favor quizás sería dar más liquidez a la acción.

Otra crítica es a los propios fondos éticos. ¿Estamos seguros de que invierten en empresas "éticas"? Un ejemplo: mi anterior empresa sigue con buena posición en el índice de empresas socialmente responsables FTSE4Good, del que beben muchos fondos éticos, y eso a pesar de los EREs continuados (complementados con reclutamiento de nuevos becarios). Eso no es "socialmente responsable" digan lo que digan.

Finalmente, una pregunta que podría explicar por qué gustan los fondos éticos: ¿compraríais acciones de "Estado Islámico S.A." o "Hitler S.A." suponiendo que existieran y que la empresa fuera rentable, sin deuda y en expansión, aunque genocida? Yo no. ¿Pero por qué, si no supone ser cómplice? Pura psicología.

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