619 millones por hacerse con Talgo ¿Pasará a manos húngaras?
El pasado 7 de marzo, el grupo húngaro Magyar Vagon presentó oficialmente ante la Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV) su oferta pública de adquisición (OPA) sobre el fabricante español de ferrocarrilesTalgo.
El importe de la oferta: 619 millones de euros por el 100% del capital de la empresa española.
Talgo cerró el ejercicio 2023 con unos resultados históricos: una cifra de negocio de 652 millones de euros (+39%), frente a los 469 millones del ejercicio anterior, arrojando un beneficio neto de 12,2 millones (en comparación con los 1,4 millones de 2022).
La empresa cuenta con 2 fábricas en España (Madrid y Álava), 8 centros de mantenimiento y da empleo a 1.300 trabajadores.
La oferta lanzada por el grupo húngaro se trata de una "OPA amistosa" que lleva fraguándose desde finales de 2023.
A través de la misma, el fondo estadounidense Triatlantic, la familia Oriol y el empresario Juan Abelló (principales accionistas de Talgo, poseedores del 40% de su capital) habrían aceptado la venta de sus acciones a un precio 5 euros cada una, lo que supone:
una prima del +14,4% con respecto a su precio de cotización actual (a fecha 7 de marzo);
una prima del +27,7% con respecto al valor de cotización cuando Magyar Vagon trasladó su interés en la compra a los actuales accionistas el pasado noviembre de 2023;
y una prima del +41,4% con respecto al valor medio de cotización de los 6 meses anteriores.
Hablamos, por tanto, de una oferta bastante "generosa", muestra del gran interés de la compañía húngara por hacerse con el fabricante español de trenes.
Magyar Vagon es un grupo industrial público (el segundo mayor de Hungría) especializado en la construcción ferroviaria.
Cuenta con 8 factorías en aquel país, las cuales ocupan más de 510.000 metros cuadrados, dando empleo a 2.500 trabajadores.
El grupo está participado al 45% por el fondo públicoCorvinus, creado por el estado húngaro para la promoción de sus empresas en el extranjero y, por tanto, vinculado al gobierno de Viktor Orbán, presidente de Hungría.
El restante 55% está en manos de Ganz-Mavag, un entramado societario detrás del cual se encuentra un poderoso fondo de capital-riesgo húngaro.
La oposición del Gobierno Español
Por su parte, el Gobierno de España ha anunciado que empleará todas las herramientas legales a su alcance (y que básicamente se reducen al llamado "escudo anti-opas") para evitar que la operación se lleve a término.
De esta forma, el gobierno español trata de impedir que Talgo, empresa considerada "estratégica" para el país (tanto por el sector en el que opera, como por su tecnología y vinculación al desarrollo de España), pase a manos húngaras.
Preocupa además la relación entreViktor Orbán y Vladimir Putin y, por tanto, que la tecnología de Talgo pudiera terminar indirectamente en manos rusas.
Durante las negociaciones con el gobierno español, Magyar Vagon viene argumentando que, gracias a esta absorción, Talgo incrementará con creces su capacidad productiva, al poder usar a mayores las 8 factorías del gigante húngaro.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos del gobierno español por justificar que Talgo es una compañía "estratégica", muchos juristas dudan de la efectividad del "escudo anti-opas" en este caso concreto.
