Beatriz Corredor, lectora silenciosa de blogs, ha escuchado el clamor 2.0 de miles de ahorradores cuya cuenta vivienda vence en breve, sin posibilidad de utilizar su dinero para el fin previsto por la legislación. Le parece razonable alargar su plazo de vencimiento establecido en 4 años, aunque esta decisión no le corresponde a su departamento sino al de Solbes. Ahora mismo desconozco cuánto ingresaría el erario público por las eventuales devoluciones con sus correspondientes intereses, pero creo que a la banca no le sentaría nada bien la salida de esos ahorros. Y menos si mi amigo coje el dinero y da la entrada de un coche. Entonces habrá alguien en la economía real que agradecerá el pinchazo de la burbuja crediticia, al menos por un momento. Seguro que el ministro está trabajando en ello porque, haga lo que haga con esta medida fiscal, habrá consecuencias a nivel microeconómico.
De cualquier manera, yo seguiré en mi línea radical y aconsejaré a los que me lo pregunten que se olviden de comprar vivienda por unos cuantos años. Vamos que, parafraseando a Chicote, antes que comprar le regalaría mi dinero a Hacienda.