Según cuenta Plutarco en sus "Vidas paralelas", un patricio romano llamado Publio Clodio Pulcro, dueño de una gran fortuna y dotado con el don de la elocuencia, estaba enamorado de Pompeya, la mujer de Julio César. Tal era su enamoramiento, que en cierta oportunidad, durante la fiesta de la Buena Diosa -celebración a la que sólo podían asistir las mujeres- el patricio entró en la casa de César disfrazado de ejecutante de lira, pero fue descubierto, apresado, juzgado y condenado por la doble acusación de engaño y sacrilegio. Como consecuencia de este hecho, César reprobó a Pompeya, a pesar de estar seguro de que ella no había cometido ningún hecho indecoroso y que no le había sido infiel, pero afirmando que no le agradaba el hecho de que su mujer fuera sospechosa de infidelidad, porque no basta que la mujer del César sea honesta; también tiene que parecerlo. La expresión, con el tiempo, comenzó a aplicarse en todo caso en el que alguien es sospechoso de haber cometido alguna ilicitud, aún cuando no hubiera dudas respecto de su inocencia, en la forma "No basta que la mujer del César sea honesta; también tiene que parecerlo".
No basta que la mujer del César sea honesta; también tiene que parecerlo.
Pues sinceramente no sé si es honesta o no, probablemente lo sea, pero parecerlo, pues más bien no, al menos en mi opinión. Nos llenamos la boca de "castas" de "puertas giratorias", y si se llamasen las cosas por su nombre, lo más apropiado sería llamarlo, chanchullos, amiguismo, enchufismo, prebendas y privilegios varios, lo cual es cierto, cuando algunos de los “nuevos” hablaban de ello, ¿razón? Más que aun santo, que luego se pudiera demostrar en un tribunal, si es que alguien lo planteara ahí (que esta es otra), ya depende, en primer lugar porque la legislación en temas políticos dura, lo que se dice dura pues no, entonces el que aun llegando a un tribunal no fuera sancionado, no significa que sea correcto, es una simple cuestión de la legalidad vigente en dicho momento.
Entonces, si, algunos se llenaron la boca de este tipo de calificativos (casta, puertas giratorias…) pero a que tienen el poder, parece que se les olvida y actúan del mismo modo o parecido. Aquí no se trata de debatir si el Sr. Alemany es la persona idónea para desempeñar el cargo, es posible que si lo sea, carezco de datos para conocer las virtudes del caballero, ahora bien, Barcelona ciudad cuenta aproximadamente con 1.602.000 habitantes (censo de 2014), con lo cual la pregunta que creo debemos hacernos es:
¿No hay entre estos 1,6 millones de personas alguien que tenga un perfil similar, y de ellos alguno que tenga interés en la función pública?
Por mera estadística la respuesta parece obvia, pues no, da la impresión que el Sr. Alemany es la única persona que puede desempeñar el cargo de Representante de Relaciones Políticas e Institucionales de Barcelona en Comú, curioso, muy curioso, aunque en su favor hay que decir que el cargo es de confianza, aun así entre 1,6 millones, seguro que hay varios que cumplirían los requisitos, lo de “la confianza” incluido.
Lamentablemente esto no es una anécdota, como el que dice “llevamos 4 días” con las nuevas formaciones y en Madrid ya tenemos a un sujeto al que le pierden las formas, ya doy por descontado que no es antisemita, ni anti-sionista, que es otra cosa, y estoy también convencido de que está absolutamente alineado con la familia de Marta del Castillo, apoyando a la familia para que de una vez por todas, la malograda chica pueda recibir sepultura como merece ella y cualquier persona, y poder acabar con el suplicio de la familia, que no con pérdida de un ser querido, porque de esto no existe forma de olvidarlo, ahora bien estamos ante otro caso de “la mujer del César…”, el Sr. Zapata será honrado, no lo dudo, sin embargo con este humor de tan mal gusto, no lo parece, en consecuencia no es suficiente que se retracte o que deje el cargo en el ayuntamiento, debe devolver el acta de concejal, así de simple, porque simplemente y valga la redundancia, así se presentó Ahora Madrid en las elecciones, con un cambio radical de estilo, del que parece que se olvidan a la que tienen la poltrona, pues nada la sujetamos durante 4 años.
Y ya, para recochineo, y al más puro estilo Johan Cruyff, lo de “la mejor defensa es un buen ataque”, que en muchos casos vale para el fútbol (y otros deportes), se “ataca” indicando que los que no desean o les agrada el resultado de las urnas, buscan debajo de las piedras, algo para desacreditarles, y probablemente tienen razón, “la guerra sucia” que se ha desatado últimamente no tiene parangón en nuestra democracia, vale, de acuerdo, no obstante que se busque debajo de las piedras, o en las cloacas de la política, no cambia los hechos, los cuales son lo que son.
