Buenos días, por experiencia observo habitualmente en foros, lugares de opinión, etc... el nerviosismo derivado de la actuación en cortoplacismo, donde estacionalidades por rangos inferiores dentro de tendencias principales de largo plazo desvirtúa la visión general del mercado. Esto lo he aprendido a base de fuerza bruta o traducido "heridas de mercado", y ocurre tanto en zonas de suelo, como intermedias y techos. Si tomamos como ejemplo a un índice mundial director, como puede ser el caso del SP500, y nos detenemos en su actuación de la presente década (partimos del 2020), podemos estudiar lo que comento. Encontramos en este desglose dos supertendencias dentro de una supertendencia primaria, precedidas por suelos estructurales (mar2020; oct2022; ) y para mi la ultima zona de suelo estructural de abr2025; esas caídas precedentes del entorno del 20, 25, 30 %, eso si son entornos correctivos de entidad, ahí no hay ruido, hay realidad de mercado bajista correctivo, ese que te saca pulverizado del mercado, ese que te hace pensar "se acabó la bolsa, cierro todo y no vuelvo" es donde se produce la purga real de mercado, rotación sectorial y suelos plenos para posterior nuevo ciclo alcista. Por eso, cuando observo el nerviosismo en zona intermedias o primeras extensiones de ciclo, por caídas en diario que no son más que consolidaciones secundarias de dichas supertendencias, ahí es donde se produce el ruido que hace que la operativa sea errónea e inconsistente, dando lugar a la frustración, desengaño y al no acabar de disponer de un elemento viable para la inversión. Con esto, no quiero parecer pretencioso, es tan solo una observación personal, de la que además he sido otra víctima más. Si nos centramos en la fase actual del SP500 (el otro día expuse mi análisis), en la que determino que el último suelo se produjo en el nivel de los 4850 puntos para el índice el pasado abril del presente, el S&P 500 se ha movido dentro de lo que considero otro inicio ciclo de supertendencia alcista, eso si, la experiencia histórica en fases comparables indica que lo más probable en el corto plazo no es una subida en línea recta, sino una pausa natural (ruido de mercado) corrección ordenada o lateralización que permita descargar excesos antes de definir el siguiente tramo.
Cuando ampliamos el horizonte, a 6–12 meses, el patrón es claro ya que en la mayoría de precedentes, la tendencia alcista terminó imponiéndose de nuevo, eso si, siempre se debe vigilar que se respeten los soportes estructurales.
El riesgo de un giro mayor está ahí (siempre está ahí), pero suele estar ligado a rupturas de fondo y cambios de ciclo mucho más profundos, como son los precendentes que hemos comentado. En ese sentido, la clave práctica es vigilar la solidez de los soportes de referencia, determinar la fase de mercado en la que nos encontramos, disponer de elementos de juicio apropiados, y mientras éstos se mantengan, la estructura de supertendencia sigue viva.
Un saludo.