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Saludos a todos, Victor Galan al otro lado de la pantalla, un placer volver a veros por otro nuevo post. Hoy no vengo a hablar de acciones. Llevo un tiempo observando la falacia de las redes sociales donde todo el mundo finge ser feliz pero la vida y la realidad del día a día son otra cosa muy diferente y quería reflexionar sobre ello. Voy a hablar de finanzas, de nuestros hábitos, sueños, vamos a sacar algunas reflexiones importantes a la luz. Yo sé que mucha gente divaga de la independencia financiera, pero yo hoy vengo a hablar de nuestra dependencia financiera

 

Construimos nuestra vida y nuestros sueños como la mayoría de los mortales hacen. Queremos un trabajo, un buen sueldo, una casa bonita, un buen coche, el ultimo IPhone o IPad y la mejor escuela y caprichos para nuestros hijos (si los tenemos). Nuestros sueños y aspiraciones a veces corren más rápido que nuestros actos para llegar a alcanzarlos y a la gran mayoría nos ha contado la sociedad que la manera de llegar a estos objetivos pasa por ir a la universidad y trabajar en una gran empresa para ganar un buen sueldo y que todo venga rodado. 

 

En España tenemos una de las tasas más bajas de emprendimiento frente a trabajo por cuenta ajena o funcionarios. La gente que emprende, que pone en marcha ideas novedosas son el verdadero motor de la economía y la innovación. No es únicamente culpa nuestra pues el gobierno quiere hacerte pobre a golpe de talonario antes de que tengas tiempo de intentarlo, pero todo esto daría para horas de debate y no es el caso ahora. 

 

Decía antes que precisamente trabajar para otros hará que tu sacrificio personal vaya la mayoría de las veces destinado a satisfacer los sueños de esas otras personas. ¿Alguna vez has encontrado a alguien cansado de su trabajo?; ¿Harto del jefe?; ¿Sin capacidad de ascender o con miedo a dar el paso hacia un nuevo cambio?; ¿Qué mina todas nuestras ilusiones de una vida más tranquila? 

 

La dependencia financiera. Dependencia por tener que seguir pagando la hipoteca, de seguir pagando el crédito de las últimas vacaciones en Cádiz todo incluido, a seguir pagando la natación de la pequeña que parece que tiene futuro, o Netflix, HBO y Disney Plus. 

 

En realidad, pensamos que así es la vida y que así ha venido dada, pero nada más lejos de la realidad es algo que nosotros hemos ido asumiendo. ¿Cómo? Hipotecando nuestro futuro en la famosa “carrera de la rata” que ya comentaba Kiyosaki en su libro “Padre rico, padre pobre”. A medida que han aumentado nuestros ingresos personales o familiares, en la mayoría de los casos, hemos ido aumentando el consumo de la misma forma. En vez de ser ahorradores y vivir una vida más modesta para ser mas independientes del dinero, hemos hecho todo lo contrario. Además, hay otros gastos imprevistos que se han ido sumando a nuestra economía familiar que hacen que vivamos al límite. 

La realidad de las familias en este país es que la mayor parte viven al límite. Nuestra cultura financiera ha sido siempre muy bajita independientemente de que seamos grandes profesionales y personas inteligentes y competentes. Por ello, para solucionar todo esto ¿que necesitamos? Mas dinero. 

 

¿Como obtenemos ese dinero? A base de mucho dolor y trabajo buscando un mejor puesto en nuestro trabajo o un nuevo ascenso. Y a cambio, ¿Qué hemos intercambiado con la vida? Ese extra de dinero por mucho tiempo libre perdido. Hemos ido sacrificando a lo largo de los últimos años mucho esfuerzo por mantener esos ritmos de vida y nos han pasado factura en muchas cosas. 



Tenemos que contratar a alguien para que nos cuide a las personas mayores o incluso nuestros hijos. 

Hemos dejado de ver muchos amigos o familiares por dar ese plus extra en el trabajo. 

Vamos corriendo a todas partes, con estrés, en el coche, en el metro, o por la calle. 

Hay personas que no saben hacer otra cosa mas que trabajar y viven por y para ello. 

Hay personas que sufren depresión por no verse realizados laboralmente. 

No pudimos ir a ese concierto de nuestro grupo favorito. 

Llegamos a casa y no tenemos tiempo ni de sentarnos a descansar o hablar con nuestros seres queridos. 

¿Tienes esa sensación de que no tienes tiempo para nada?; ¿Qué la vida te atropella? 


Que nadie se ha hecho rico ahorrando en su cuenta corriente no es algo nuevo que os vaya a contar, pero la verdad es que pocas veces reflexionamos sobre ello. Poco se reflexiona de lo mucho que nos hemos empobrecido como personas intentando coger la zanahoria que nos han puesto delante. Poco hemos reflexionado de nuestra cultura financiera. 
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  1. en respuesta a Eiton
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    Top 100
    #2
    20/06/21 17:11
    Padre rico, Padre Pobre 
    Es un libro de lectura obligada.

    Si bien es verdad, que aparte de lo que comentas, no es el pez que se muerde la cola?

    Aunque seamos de los que consigamos salir de la carrera de la rata (que más bien, la traducción correcta al castellano, sería "La rueda del Hamster" ), y aunque consigamos que nuestros activos, generen ingresos mensuales, que hagan prosperar a nuestra riqueza.
    Precisaremos de clientes que sigan consumiendo nuestros productos, y que estén en la rueda.

    De tal manera, y sin ánimo de pecar de iluso, pasaremos de esclavos para ser esclavistas, me temo que sin remedio alguno.

    Lo argumento únicamente, como reflexión personal.
  2. #1
    20/06/21 13:44
    Tienes razón Victor y pienso que este artículo dará paso al segundo en el que podrás explicar como salirte de la "carrera de la rata" de  Kiyosaki, que por cierto he leído y manda un mensaje muy claro. No todos pueden salirse, cuesta mucho dejar de gastar dinero en cosas superfluas a los que crees "tener derecho", en lugar de "sacrificarte", invertir en el futuro y vivir más modesta y tranquilamente el presente. En este país no se da y por tanto no hay cultura financiera, se prima el consumismo.
    Seguramente quien deba aprender esta lección y necesite leer "Padre rico padre pobre" no está entre tus lectores. Un saludo

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