Pues vaya tela...
A ver, todos nos equivocamos, aunque sean errores tontos. El que trabaja en una asesoría, aunque haga habitualmente un mismo trabajo, puede equivocarse, por qué no?
Pero otra cosa es no admitir el error. Mira, yo trabajo toda la vida en una asesoría (bueno, he estado en otra anteriormente, pero vamos, mi vida laboral, ya de unos cuantos años, es en asesoría) y hemos tenido que responsabilizarnos hasta de errores que no han sido nuestros... Pero es que si el error es nuestro, se le ha de reconocer al cliente, hay que ser humilde ante todo y con sinceridad vas donde quieras.
En tu caso pudo ocurrir lo siguiente: domiciliaron el 303. Una vez presentado, se dieron cuenta de que había un dato erróneo que, si bien no modificaba el resultado, sí había que comunicarlo correctamente. Hablaron con hacienda para que les dijesen cómo arreglarlo. Se toparon con el inútil de turno, que les dijo que hiciesen una sustitutiva (sabiendo que no existe...); la asesoría se deja guiar por lo que les dicen y, zas!! la han cagao...
A mí me pasó algo parecido. Un caso que no se me había planteado nunca y consulto en hacienda cómo teníamos que hacerlo. Bueno, pues lo jodimos, así de claro. Le llegó un recargo al cliente y tuvimos que asumirlo. Aunque en hacienda nos dijesen mal lo que había que hacer, la responsabilidad frente al cliente es nuestra!
Y ya te digo, más de una vez nos ha tocado asumir errores que no eran nuestros.
No creo que tarden seis meses en devolverte, eh? será prontito, ya verás. En eso no suelen tardar mucho, porque está muy claro.