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Me voy a Lisboa

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#66873

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Este post casi último se me había escapado sin responder. Bueno, no importa, tampoco lo voy a hacer pero voy a postear algo mucho más bonito que una simple respuesta bovina... ;-=)

Posted by Lílemus in EL LENGUAJE

≈ 6 Comments

Un inglés y un español, que visitan Galicia y han caído en el mismo grupo turístico, contemplan un atardecer en Finisterre. El guía, que es de Corcubión, se acerca lleno de orgullo local y les pregunta por sus impresiones. Responde primero el español: «¡Muy bello!» El inglés añade: «Very beautiful».

Atardecer y faro de FINISTERRE / FISTERRA y el oceano Atlantico.

Aparentemente ambos han dicho lo mismo, cada uno en su idioma. Los adverbios muy y very parecen dos modos equivalentes de expresar la misma idea superlativa, como esos artículos de tienda de aeropuerto con el precio marcado en dos monedas distintas que expresan el mismo valor. Tendemos a ver la diferencia entre las lenguas en el hecho de que usan palabras diferentes para nombrar las mismas ideas. Pero, si lo de las palabras diferentes es obvio, no lo es tanto que las ideas nombradas sean las mismas.

Porque sucede que las palabras tienen historia, y su historia les confiere personalidades propias que a menudo suponen diferencias sustanciales. En general, las lenguas romances forman el grado superlativo mediante evoluciones del adverbio de cantidad latino multum, que significa ‘mucho’. Así, el italiano molto bello, el portugués muito belo y el español muy bello. El inglés, por su parte, forma el superlativo con la palabra very, que en origen no es un adverbio de cantidad. Very viene del francés antiguo verrai, un adjetivo que a su vez se remonta al latín verus, ‘verdadero’. En resumen, cuando un español dice: muy bello, etimológicamente quiere decir ‘enormemente bello’, mientras que, cuando un inglés dice: very beautiful, quiere comunicar algo sutilmente distinto: ‘verdaderamente bello’. De hecho, en el moderno really beautiful, ‘realmente bello’, parece haber un intento de actualizar aquel sentido primitivo de very. Como si la lengua quisiera refrescar la memoria de sus orígenes.

La diferencia entre ambas visiones del atardecer gallego es tenue pero apreciable. Si el superlativo sirve para intensificar el significado de un adjetivo, tal intensidad es para el español una cuestión cuantitativa, como si dijese: la belleza del atardecer es grande. Para el inglés es una cuestión cualitativa, como si dijese: su belleza es auténtica. El adverbio muy proyecta el adjetivo hacia el exterior: por obra suya la belleza parece extenderse hacia afuera y crecer físicamente en tamaño. En cuanto a very, el secreto poder de su etimología le hace apuntar hacia el interior, hacia la esencia. Es como si ese atardecer que el turista inglés contempla flemáticamente hubiese acertado justo en el centro de la diana de la belleza. Por eso su very beautiful sonará con cierto aire de contención, sin signos de exclamación, casi pudoroso, nada que ver con el tono categórico que habrá empleado el español. Y al considerar estas cosas, uno se siente verdaderamente identificado con el inglés de la historia. Casi dan ganas de rematar la jugada con un «my goodness!». En fin, cosas del alma inglesa.

Y como sé que alguno se estará preguntando qué pasa con el très beau francés, voy a adelantarme a responder. Por curioso que parezca, très es la evolución de la preposición latina trans, que significa ‘más allá de, por encima de’. Y al caer en la cuenta de ello, ya me parece estar viendo un tercer turista que, perfectamente consciente de su francesa distinción, se ha colado en la escena y, arrimándose discretamente al inglés y al español, se las arregla para colocar un cantarín: «Très beau!» ¡Oh, hallazgo! El atardecer ya no es de gran belleza, ni siquiera de auténtica belleza. Ahora es de una perfección que va más allá de la belleza corriente y terrenal, es el rien ne va plus, el no va más de los atardeceres. O, como diría el guía, que aunque es de Corcubión se codea con estudiantes de Santiago y le gusta repetir las frases de moda: «bello no, ¡lo siguiente!»

(Dedicado a Roland Fisher, el mayor amante de la lengua española que conozco entre los nacidos bajo pabellón británico, y a mi querido gallego Juan Vázquez, para quien ninguna lengua puede dar la auténtica medida de un atardecer en Galicia)

Un abrazo cuya mejor y más intensa imagen de ocaso fue vista y grabada en la retina en Galicia...

¡Sed felices!

http://lilemus.wordpress.com/2014/03/07/very-beautiful/

Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.

#66874

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Es posible que la frase el que se fue a Sevilla perdió su silla os haya servido alguna vez para defender vuestro derecho sobre un lugar que otro ha desocupado (una silla propiamente dicha, el puesto en una fila), cuando este lo reclama argumentando que antes lo había tenido él.

El origen de esta frase proverbial es uno de los mejor documentados que hay, y la silla mencionada no es una cualquiera, sino aquella desde la que el obispo preside las celebraciones litúrgicas en una catedral, y que en latín se llama precisamente sedes (‘silla’ o ‘asiento’).

La historia es como sigue. Hacia 1460 era arzobispo de Sevilla don Alonso de Fonseca, un importante miembro del clero que en el año 54 había oficiado la boda real entre Enrique IV de Trastámara y la princesa Juana de Portugal. Eran tiempos en que las familias poderosas pugnaban por colocar a sus representantes en catedrales y obispados, y los cargos eclesiásticos eran asignados sin demasiada consideración a la santidad de los candidatos. Y digo demasiada, porque siempre ha habido buenos clérigos. Esta costumbre, a la que puso freno un siglo más tarde el Concilio de Trento con su inmensa labor reformadora, hizo que un sobrino de don Alonso de Fonseca, también llamado Alonso, fuera hecho arzobispo de Santiago de Compostela gracias a las influencias de su poderosa familia. El propio rey Enrique cursó la petición al papa.

santiago-compostela-catedral

Desde su cátedra, el fogoso sobrino tomó parte en luchas políticas diversas, por las fue condenado en 1465 a dos años de cárcel en Noya (La Coruña). Para redondear el asunto, los Fonseca intentaron pagar un rescate con dinero y joyas de la catedral de Santiago, y el escándalo resultante se resolvió con un destierro de diez años para el joven arzobispo. Entonces el tío tuvo la astuta idea de intercambiar su sede con la del sobrino, de modo que se cumpliera el castigo sin que la familia perdiera ninguno de los dos cargos. Y a Santiago se fue, donde en unos pocos años logró arreglar el espinoso asunto. Pero al intentar recuperar en 1469 la sede de Sevilla, se encontró con que el peculiar sobrino se había aficionado a la ciudad y se negaba a devolverla.

Fue necesaria la intervención armada del duque de Medina Sidonia y hasta de Beltrán de la Cueva, apoyado en la visita de Enrique IV a Sevilla, para que el sobrino terminara obedeciendo la bula papal de Pío II. Por la importancia de los personajes implicados, el caso fue muy comentado y dio lugar a la frase: el que se fue DE SEVILLA perdió su silla.

Pero el paso del tiempo hizo que se olvidaran los detalles del asunto, y el dicho adoptó la variante que sin duda conocéis: el que se fue A SEVILLA perdió su silla. Lo cual es comprensible, ya que, al difuminarse la anécdota original, lo mismo daba una cosa que otra.

Como ya sabéis de qué pie cojeo, remataré la historia con consideraciones etimológicas. La palabra latina sedes, con la que en origen se nombraba la silla del obispo, pasó a designar la catedral en sí, que es la sede obispal. De hecho, a través del catalán, produjo nuestra palabra seo, que es como se llama a las catedrales en Aragón y Cataluña (la Seo de Urgel, de Zaragoza, de Manresa).

En cuanto al sustantivo la catedral, es en origen un adjetivo (la iglesia catedral), porque es el templo en el que se encuentra la cátedra del obispo. Y es que la palabra griega καθέδρα (cathédra) significa precisamente eso: ‘silla’, ‘asiento’. Y como en otros tiempos los profesores universitarios daban clase a sus discípulos desde una silla elevada, a esta se le llamó cátedra y al que se sentaba en ella, catedrático.

Lo que pocos saben es que de καθέδρα viene también nuestra cadera. En efecto, los griegos nombraban así –en plan gracioso- al trasero, visto como un asiento proporcionado por la naturaleza. Un asiento tan cómodo, que Alonso de Fonseca, el ingrato sobrino, se resistió todo lo que pudo a levantarlo del sitio. Como dice el refrán: al que Dios no da hijos, el diablo le da sobrinos.

(Dedicado a mi amigo Manu Feria, a quien Sevilla le hipotecó el corazón y anda todavía pagando plazos)

Este blog no tiene pérdida...

Del mismo lílemus...

Un saludo cordial

¡Sed felices!

Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.

#66875

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Tienes razon karli...no sólo la justicia...pero poquito a poco...fíjate en claudette colbin...hace apenas cincuenta años...a poco que miremos hacia atrás vemos que es cierto que hay injusticias ...pero jamás en la historia de los hombres se esta recortandola tanto en tan poco tiempo...un abrazo...

Quien tiene dinero tiene en su bolsillo a quienes no lo tienen

#66876

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

¡Buenos y felices días!

Hoy entro y salgo rapidito, que me están esperando los amigos de la recogida mensual de alimentos no perecederos.

Solo entro a responderte brevemente.

Dices que jamás en la historia de los hombres se está recortando tanto en tan poco tiempo. Bueno, en función de a qué te refieras exactamente, igual hasta estoy de acuerdo contigo.

Cuando los derechos son vilipendiados, la ley de la lógica se impone, antes o después. Lo que yo expongo es que la justicia lenta es una forma más de injusticia.

¿Que llegará a imponerse el sentido común? Pues espero que sí, pero desde mi punto de vista, ya está tardando.

Un abrazo

¡Feliz día!

¡Sed felices!

Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.

#66877

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Buenos días ...eso dicen algunos...y de alguna forma objetivamente es verdad...pero todo depende del periodo de tiempo que analicemos...si ya se que dicen que Fidel decía que pa'tras ni pa cojer impulso...para mi que hace ya tiempo detecte que esta era bíblica...y que en medio de ella he cambiado tanto que ni en lo espiritual me parezco...te diré...que mis previsiones máximas no se cumplieron...se acercaron a lo que consideraba que era el punto de no retorno...y claro que ha habido retrocesos pero no que no ha habido concesiones...hemos aceptado de alguna forma...pero en nuestro fuero interno sabemos que este terreno será recuperado en breve...este mundo necesariamente lo tenemos que dejar mejor que lo encontramos...a salvedad de los destrozos y heridas que más o menos gratuitas le hacemos a la que nos cobija...por lo demás estoy tranquilo karli...ellos saben que a los que tienen que temer son a los tranquilos...siempre a sido así...un abrazo de domingo ...

Quien tiene dinero tiene en su bolsillo a quienes no lo tienen

#66878

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Un abrazo recordándote ...que hay quie pelea por nuestras batallas...no salirnos nosotros de esa línea de justicia...no dejarnos arrastrar a cuarteleras diatribas y opciones...intentar estar con nuestras mentes limpias...y ya sabes que ...nuestro aliado es imbatible...un abrazo...

Quien tiene dinero tiene en su bolsillo a quienes no lo tienen

#66879

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Aquí "alguien" ha hecho una trampita...

Uno hablaba de un "avatar golondrino", no de un avatar de chica adornada con golondrinos, jajajajajaja... si es queeeeeeee..

En fin, Sonso, que te damos un multilam.. alutimo... tulirramo... estooo... ultimatum, caramba, o entras o mandamos al "aguila" a buscarte, luego ya os entenderéis, jajajajaja. Además, puedo prometer y prometo que voy a retorcer el idioma este todo lo que pueda para darte algo de curro, caramba, jajajajajajaja.

Y encima tiene un horno que anda al buen tin tin... lo que yo digo, la primavera (los golondrinos)... en fin, todo el mundo "alterao".

Abrazo grande de esos a repartir.

Suerte a todos.

no desaparece lo que muere, desaparece lo que se olvida

#66880

Re: El Mundo: Vivir por tiempo, morir por dinero

Juer, comostá el patio...

Hala, me quedo con la chica de los golondrinos, que pájaros hay muchos y alguno de cuidado, a la vista está...

En fin, no le des sustos con fotos de estas al personal que la liamos, y menos en finde, caramba... desde luegooooooo...

Abrazo grande (reparto obligatorio).

Suerte a todos.

no desaparece lo que muere, desaparece lo que se olvida