Los inversores en Banco Popular podrían encontrarse con un nuevo problema a la vuelta de la esquina. Sus obligaciones contingentemente convertibles pueden sufrir la conversión automática a acciones si su situación financiera sigue deteriorándose.
¿Qué son los COCO´s?
Los “cocos” son instrumentos híbridos de deuda emitidos con un vencimiento fijo o bien a perpetuidad que incorporan una cláusula a favor del emisor que permite convertir las obligaciones/bonos en acciones automáticamente, siempre y cuando la solvencia de la entidad se sitúe por debajo de un determinado nivel, previamente establecido.
Los cocos se convierten en capital o sufren una quita automática, bien cuando la solvencia de una entidad cae por debajo de un umbral predeterminado, pero también a discreción del supervisor. Además, existe la posibilidad de cancelación discrecional del cupón (ya sea por el emisor o por el supervisor).
Los bonos contingentes convertibles (“cocos”) están diseñados para absorber pérdidas rápidamente, sin necesidad de acudir al mercado ni al contribuyente.
![emisiones de COCOs España](https://d31dn7nfpuwjnm.cloudfront.net/images/valoraciones/0027/3440/emisiones-cocos.png?1496226826)
El problema para el Popular se encuentran en dos emisiones de este tipo de activo; una de 500 millones del año 2013, que se convertiría en capital si la ratio CET 1 phase in cae por debajo del 5,125%. La segunda es de 750 millones de euros del año 2015 y la conversión se produciría si esta misma ratio se sitúa por debajo del 7%. A día de hoy aún se encuentra bastante por encima, en torno al 10%.
La inversión mínima para este activo se situaba en 100000€ con lo que se intentaba excluir a los inversores minoristas de estas operaciones. Los principales tenedores de los bonos son:
- Allianz (18%)
- Blackrock (6%)
Si se ejercitará la conversión, estos tenedores de los bonos pasarían a dominar el 31% del accionariado. Ante la incertidumbre la rentabilidad de las dos emisiones se ha disparado hasta un 16 y 14% respectivamente y los inversores iniciales soportan pérdidas de un 30 y 40%.
El Credit Default Swap (CDS) de la entidad se ha elevado hasta los 311,14 puntos, situándose en máximos no vistos desde el arranque del pasado ejercicio.