Hoy me he levantado con la mente abierta y con la mirada bien limpia, dispuesto a leerme esas 215 medidas que acaba de presentar Podemos. No tengo demasiados prejuicios en política y tengo que reconocer que he visto cosas bastante potables. Sin embargo, me temo que estamos ante un brainstorming de ideas propuestas desde arriba más que de un programa electoral trabajado desde abajo. En este sentido, lo que acaba de presentar Podemos es una colección de titulares similar al que acostumbran a publicar los partidos tradicionales. Falta un nivel más de concreción y, qué menos, un anexo con numeritos.
Dicho esto, sería muy fácil dedicar esta entrada a poner a caldo una medida tras otra. Pues no. Voy a intentar sacar algo de provecho de este programa, algunas ideas que me parecen defendibles desde cualquier ideología. A ver si consigo sorprenderos.
La dación en pago retroactiva y la auditoría de la deuda pública.
No soy experto en leyes y no tengo ni idea de hasta dónde se puede llegar con estas propuestas. Pero qué queréis que os diga, creo que las reglas del juego deben ser pocas y tremendamente claras, para que las partes contratantes sepan hasta dónde puede llegar su negocio. Bien entendido que la dación en pago limitará la concesión de hipotecas y que la luz y los taquígrafos sobre el gasto público perjudicarán a las campeonas que campan por el IBEX.
Creo que generalizar la dación en pago por defecto (es decir, sin esperar a la negociación) es la única manera de que los bancos asuman su parte del riesgo a la hora de financiar pelotazos y de que el precio de equilibrio se ajuste a la realidad. Y ahora que el sector de la construcción empieza a ver la luz al final del túnel, sería buen momento para que el árbitro deje claro que no va a colaborar en el inflado de la demanda, ni con incentivos fiscales ad hoc ni con garantías de rescate bancario. Insisto en que esta medida puede dejar sin acceso a la propiedad a mucha gente y no va a facilitar que las viviendas vacías se conviertan en hogares. Pero me parece una propuesta inteligente y necesaria.
En cuanto a la auditoría de la deuda pública, no sé si en Podemos son conscientes del neoliberalismo que gasta su propuesta. En efecto, los ciudadanos no tenemos por qué tragarnos ningún sapo en ninguna actuación pública. Una cosa es que haya que pagar a los acreedores y otra cosa es que los responsables de un despilfarro se vayan de rositas. Bien por la auditoría pero me atrevo a sugerir un paso más: exigir a los responsables de un sobrecoste o de una obra innecesaria que pongan el dinero de su bolsillo. ¿Demagogia? Es que si no se ponen límites al endeudamiento no sirve de nada el diagnóstico.
Expertos independientes
Hace poco escuchaba a una miembra de la casta criticar a Ciudadanos por encargar su programa a gente externa. Veo que Podemos, en su propuesta número 17, habla de exigir estudios de viabilidad y consultar acerca de nuevas infraestructuras. ¿Alguien puede estar en desacuerdo con esto? Claro, la cuestión es cómo garantizar la independencia y la neutralidad de tales expertos. Yo no conozco a ningún ingeniero de caminos que se oponga a una buena ronda de obra civil.
No al fracking
Pero no basta con un compromiso público. Mucho cuidado con la compra de alcaldes y vecinos. Nada como unos buenos incentivos económicos para que la gente modifique su opinión sobre un tema.
Apoyo a la economía social y solidaria
Bien entendido que la economía social más auténtica se construye desde la empresa privada. Ya he dedicado una buena colección de artículos a las cooperativas, creo que cuentan con todos los ingredientes que está pidiendo nuestro sistema económico: flexibilidad laboral, participación de los trabajadores en beneficios, incentivos a ganar tamaño, capacidad de innovación, solucionan problemas sociales sin intervención de las administraciones… En concreto, todo lo que queramos hacer para fomentar el desarrollo rural pasa por el cooperativismo o fórmulas similares. Espero que esto no se convierta en un coladero de subvenciones y clientelismo.
Fomento de la economía digital y colaborativa
Amén. Ya he defendido aquí iniciativas como Uber, por mucho que molesten a sectores protegidos. La colaboración se va abrir paso sí o sí en el futuro. Forma parte de la libertad de las personas. Que quede claro que colaborativo no quiere decir gratuito, sino que el modelo de negocio es diferente al tradicional. Y en este sentido, bien por el fomento del software libre.
Red ferroviaria de cercanías
Incondicional de la movilidad sostenible. Considero que la inversión en la red de cercanías es dinero público bien utilizado. Y, por cierto, punto para Fomento, que acaba de anunciar una inversión en mejoras para el ferrocarril. Esto sí tiene rentabilidad social y no el AVE.
Nuevas metodologías en educación
El problema de nuestro sistema educativo es más de pedagogía que de dinero. No sé cómo se puede potenciar esto cortando las alas a la enseñanza privada y concertada. Creo que la fórmula consiste en legislar menos y dar mayor autonomía a los centros. Y, sobre todo, facilitar la información necesaria a las familias para elegir libremente dónde y cómo educar a los hijos.
Open Data
Sí, sí, sí. Gran idea la de introducir esa cláusula en la contratación pública.
Comarcalización
Como proponen también en UPyD y en Ciudadanos, mancomunar servicios en el territorio es una buena idea, siempre y cuando no le complique la vida al ciudadano. Este tema se merece un post aparte.
¿Qué os parece? Desde mi punto de vista, Podemos comete muchos errores de diagnóstico a la hora de entender lo que ocurre en España. De hecho, desconoce que muchas de sus propuestas ya existen en la realidad (y no funcionan). Pero eso no quiere decir que no haya medidas interesantes para un debate desapasionado.
Disfrutad de lo que queda de semana.
S2