Me ha gustado leer en poco tiempo varios comentarios reflexionando sobre la edad al componer la cartera. Sin incitar a nadie a excederse en la volatilidad o (peor) el riesgo, a edad temprana y en fase de creación/acumulación puede uno permitirse determinados experimentos. Las minusvalías tienen tiempo para recuperar y las plusvalías pueden ser relevantes. Recordemos la "magia" del inte és compuesto. En cambio, con el patrimonio ya creado, con aportaciones no significativas sobre el mismo e incluso en edad cercana a requerir de la disposición de dicho patrimonio, estos "experimentos" no son tan recomendables, ya que pueden no aportar significativamente sobre el patrimonio y en el peor de los casos, pueden causarnos una minusvalía no recuperable. Evito referirme a edad avanzada, como suele hacerse, porque no creo que sea la edad por sí misma la que aconseje una estrategia u otra, sino más bien las circunstancias personales y patrimoniales.
Salu2