Soluciones al problema de la vivienda en España
La economía europea y española en particular tiene diversos problemas estructurales, con diversos matices y aristas, que suelen estar bien diagnosticados y analizados por los especialistas pero luego no se suelen instrumentar adecuadamente por una casta política que anda siempre a la greña con su específica función objetivo de conseguire el poder, a veces a cualquier precio, con sus populismos, maniqueismos y enfoques dogmáticos fundamentalistas, en vez de estar enfocados en el máximo consenso posible con punto de vista ciudadano, que no súbdito. Destacan sobremanera los problemas y preocupaciones de los españoles relacionados con educación, sanidad, paro, sueldos y salarios, pensiones, inmigración, energía y vivienda.
Respecto al problema de la vivienda en España, afectando a buena parte de la población, especialmente la juventud, están muy claros los siguientes aspectos que se enumeran seguidamente.
* Desequilibrio entre oferta y demanda, con notable escasez de oferta de vivienda digna y asequible.
* Aumentos desproporcionados de precios, generándose burbujas inmobiliarias, tanto en la compra como en el alquiler.
* Dificultades para el acceso a una hipoteca asequible sostenible financieramente y que permita una adecuada planificación financiera y de ciclo vital, especialmente de la juventud, fomentando así también la natalidad.
* Fiscalidad excesiva y asimétrica sobre la compra y alquiler con 25 figuras impositivas resultando la mayor presión fiscal de la Unión Europea.
Las soluciones a estos problemas y preocupaciones pasan, breve y sintéticamente, lógicamente por aumentar la oferta de vivienda digna y asequible con la máxima colaboración entre el sector público y el privado, por supuesto mejorar la fiscalidad con enfoque auténticamente progresivo. Sueldos y salarios deben estar también más acordes con el precio de la vivienda, tanto en compra como en alquiler, para lo cual es fundamental el aumento de productividad, competitividad, aumentar la formación continua y especialización. Por supuesto, disminuir las tensiones y desequilibrios en el mercado de trabajo fomentando también para ello, entre otros aspectos, una necesaria inmigración que resuelva el invierno demográfico, respetando cómo no la legalidad, y que contribuya también dicha inmigración a cubrir demanda instatisfecha por lo tanto a disminuir los niveles de paro, así como la sostenibilidad del sistema de pensiones.
Con exceso de regulación e intervencionismo los problemas y preocupaciones aumentarán. Es mi humilde opinión.
Luis Ferruz Agudo / Escritor, economista y naturalista/
La economía europea y española en particular tiene diversos problemas estructurales, con diversos matices y aristas, que suelen estar bien diagnosticados y analizados por los especialistas pero luego no se suelen instrumentar adecuadamente por una casta política que anda siempre a la greña con su específica función objetivo de conseguire el poder, a veces a cualquier precio, con sus populismos, maniqueismos y enfoques dogmáticos fundamentalistas, en vez de estar enfocados en el máximo consenso posible con punto de vista ciudadano, que no súbdito. Destacan sobremanera los problemas y preocupaciones de los españoles relacionados con educación, sanidad, paro, sueldos y salarios, pensiones, inmigración, energía y vivienda.
Respecto al problema de la vivienda en España, afectando a buena parte de la población, especialmente la juventud, están muy claros los siguientes aspectos que se enumeran seguidamente.
* Desequilibrio entre oferta y demanda, con notable escasez de oferta de vivienda digna y asequible.
* Aumentos desproporcionados de precios, generándose burbujas inmobiliarias, tanto en la compra como en el alquiler.
* Dificultades para el acceso a una hipoteca asequible sostenible financieramente y que permita una adecuada planificación financiera y de ciclo vital, especialmente de la juventud, fomentando así también la natalidad.
* Fiscalidad excesiva y asimétrica sobre la compra y alquiler con 25 figuras impositivas resultando la mayor presión fiscal de la Unión Europea.
Las soluciones a estos problemas y preocupaciones pasan, breve y sintéticamente, lógicamente por aumentar la oferta de vivienda digna y asequible con la máxima colaboración entre el sector público y el privado, por supuesto mejorar la fiscalidad con enfoque auténticamente progresivo. Sueldos y salarios deben estar también más acordes con el precio de la vivienda, tanto en compra como en alquiler, para lo cual es fundamental el aumento de productividad, competitividad, aumentar la formación continua y especialización. Por supuesto, disminuir las tensiones y desequilibrios en el mercado de trabajo fomentando también para ello, entre otros aspectos, una necesaria inmigración que resuelva el invierno demográfico, respetando cómo no la legalidad, y que contribuya también dicha inmigración a cubrir demanda instatisfecha por lo tanto a disminuir los niveles de paro, así como la sostenibilidad del sistema de pensiones.
Con exceso de regulación e intervencionismo los problemas y preocupaciones aumentarán. Es mi humilde opinión.
Luis Ferruz Agudo / Escritor, economista y naturalista/