El burro flautista analista

Interesante documental de la primera cadena alemana sobre un analista de la City que decide irse de la lengua y sacar a relucir los trapos sucios de esa profesión. 

El documental no es interesante por las conclusiones que sacan los productores del documental o las del mismo analista chivato. En cambio, resulta muy instructivo para apreciar el grado de ineptitud que impera en el mundo de las altas finanzas y las inversiones millonarias.

Hago un breve resumen:

Se trata de un chico joven, hippy, de izquierdas y creyente. Sus ideales se debaten entre escupir al sistema capitalista o sumergirse hasta el cuello y dar el pelotazo. Se decide por lo último y su hermano lo enchufa en la City.

Hasta ese momento de su vida nunca había oído hablar de lo que era una acción ni del mercado, pero entra como analista de empresas energéticas. Su labor como analista no es la de conocer dichas empresas y poder aconsejar bien a los clientes, sino la de captar grandes clientes y llevarse unos millonarios bonus por ello. La captación de clientes se hace de la forma que sea, incluidas las juergas nocturnas.

Pero, cuando ya está podrido de dinero, sus escrúpulos aprendidos en los juegos de la señorita Pepis empiezan a causarle un ligero cosquilleo (no en vano es hippy, de izquierdas, creyente y antisistema). Entonces toma la decisión de escribir una columna anónima en un periódico, aireando los trapos sucios de la city. Con esta faceta se siente mejor y piensa que está lavando un poco su conciencia de todo a cien, mientras sigue cobrando los bonus millonarios por su empleo y haciéndose pasar por un genio de las finanzas.

Lo más curioso es que la mayoría de los trapos sucios que saca en la columna que escribe son tópicos falsos que todo el mundo se traga, incluido él mismo, debido a su ignorancia supina sobre el mercado. A pesar de escribir "tonteorías", el público y los medios caen rendidos a sus pies por su valentía. Dice cosas tan inocentes como que los gestores de los Hedge Funds hacen correr un rumor de que una empresa va a quebrar o va a ser opada, para ganar una burrada de dinero en tres horas. Si pudieran hacer esas cosas los Hedge Funds, no hubieran perdido hasta los zapatos en el 2008.

Por fin, ya no puede aguantar más, y, después de asegurarse de que sus bonus han sido ingresados en su cuenta, renuncia al podrido y asqueroso sistema capitalista. Ya está libre del yugo opresor del sistema que lo tenía encadenado al vil metal. Pero… sorpresa, en vez de irse a la India a practicar meditación trascendental como tenía previsto…, graba un disco, escribe un libro y vive encadenado al móvil para atender a todos los medios de comunicación que necesitan una voz crítica con la milla cuadrada.

El chiste final es cuando admite haber perdido una burrada de dinero en la crisis actual. Pobre inocente. Al igual que le paso al burro flautista, el también llegó a creer que sabía mucho sobre el mercado. No es extraño que le ocurriera: es muy difícil estar rodeado de personas que creen que eres un genio, cobrar millones como si fueras un genio, y no contagiarte y acabar pensando que realmente eres un genio de las finanzas.

MORALEJA DEL CUENTO 

Cuando un señor con traje y zapatos caros que tiene varios títulos en su despacho y cobra millones cada año le diga que Enron va a subir, antes de comprar mire el gráfico para ver si está en tendencia primaria bajista.

Cuidado con esto

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