Lo del 6,24 % no digo nada. Puede ser, o puede no ser. Eso es uno de los elementos de discusión.
Digo que la fórmula PLUS es racional y razonable:
De los PGE le sacamos todas las cosas que Euskadi ya hace, y nos queda lo que es "el coste del Estado".
A ese coste, le pasamos la derrama proporcional que a Euskadi corresponda (aquí ya empieza lo político a discutir).
A ese resultado, le ajustamos un +/- por lo del déficit, y un +/- por lo del IVA. En esto del IVA está lo de la falta de transparencia y el ocultismo.
La fórmula es racional,
Son discutibles varias cosas:
Lo del porcentaje sobre PIB como parámetro ideal para establecer la aportación vasca, sin obviar que quizás incluso ese porcentaje sea tramposo, aunque eso es lo de menos. Es discutible para mi porque nuestro modelo tributario tiende a ser bastante social y redistributivo, de manera que quien más tiene, proporcionalmente debe pagar algo más. No paga el mismo tributo uno que gana 20.000 € al año que uno que gana 100.000 € al año. Proporcionamente paga más el segundo. En el caso del cupo vasco no es así (a efectos "españoles", no así a efectos "vascos", donde la tributación sí es distributiva).
La no incorporación de nuevos gastos de re-equilibrio territorial a la fórmula. Mediante la fórmula del cupo, Euskadi aporta al constitucional fondo de compensación interterritorial, que solo está destinado a inversiones nuevas, pero no a cubrir déficits, estructurales o coyunturales, del gasto corriente. Hay territorios que necesitan de manera continuada un cierto apoyo a la financiación del gasto corriente. Hay mucho que hacer, por supuesto, pero en el mientras tanto, haría falta una cierta participación en la solidaridad activa.
El ajuste político del IVA. Para Euskadi se ha establecido un mecanismo que es justo el contrario al implícito que rige para Navarra. El IVA es un impuesto finalista, que soportan los consumidores. Euskadi, que es una economía exportadora, debiera tener un porcentaje de atribución del IVA seguramente inferior a su participación en la economía general de España, pues "sus consumidores" pagan menos IVA que lo que genera "su economía". El fundamento legal del concierto es que "los impuestos de los vascos se quedan en su territorio, y sus administraciones forales, pagan una cuota justa a España". Con este ajuste político del IVA, resulta que las adminstracioens forales vascas, además de los impuestos de los vascos, manejan también una parte, menor pero significativa, de impuestos pagados por ciudadanos no vascos.
Pero los principios del concierto, y el marco de la fórmula del cupo en sí mismos son bastante justos y racionales.
la plus belle des ruses du Diable est de vous persuader qu'il n'existe pas!