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Cuenta atrás con la hucha de los pensiones: los expertos no la ven más allá de 2019
La hucha de las pensiones, el fondo de reserva creado para pagar las pensiones en caso de necesidad, puede tener los días contados. Según las previsiones de cada vez un mayor grupo de economistas, al ritmo actual no podrá seguir más allá de 2019.
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E. Ruiz-Hidalgo / www.invertia.com
Jueves, 10 de Marzo de 2016 - 10:52 h.
¿Qué es la "hucha de las pensiones"?
Es un Fondo especial que se creó para generar una reserva de dinero con el objetivo de pagar las pensiones contributivas y del que se pueda usar en caso de necesidad.
Este fondo surge como consecuencia de la exigencia institucional para establecer fondos especiales de estabilización y reserva destinados a atender las necesidades futuras en materia de prestaciones contributivas originadas por desviaciones entre ingresos y gastos de la Seguridad Social. El principal destino de los recursos que dotan el fondo es la inversión en deuda pública española.
LOS EXPERTOS NO LO VEN MÁS ALLÁ DE 2019
Círculo de Empresarios, Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), Funcas… cada vez hay más expertos economistas que dan al fondo de reserva una fecha de caducidad cercana a 2019.
El Círculo de Empresarios cree que la hucha podría agotarse en 2019 y ha alertado sobre el “agotamiento” del Fondo de Reserva de la Seguridad Social después de que en julio el pago de las pensiones fuera de 39.520 millones tras una última disposición de 3.750 millones. “De continuar este ritmo de trasvase podemos prever el agotamiento del Fondo de Reserva en 2019”.
Así lo señaló el Círculo de Empresarios en el documento de análisis de los Presupuestos Generales del Estado 2016. Ante esta situación, y “para garantizar prestaciones dignas a largo plazo, es necesaria una reforma que convierta progresivamente el actual sistema de reparto en uno mixto de reparto, capitalización obligatoria y capitalización voluntaria”.
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social, conocido como “hucha de las pensiones”, podría agotarse en dos años, según previsiones de la AIReF, lastrado principalmente por el desequilibrio entre ingresos y gastos que conforman un déficit estructural.
El saldo, a cierre del año 2015, fue ligeramente inferior a los 32.500 millones de euros, lo que supone un 3,12% del Producto Interior Bruto (PIB). En el año 2015 se realizaron disposiciones del fondo por valor de 13.250 millones de euros para abordar el abono de las dos pagas extraordinarias a los pensionistas.
El déficit estructural
Existe un déficit (diferencia entre ingresos y gastos) cuantificado en aproximadamente 25.000 millones de euros, aproximadamente el 2,5% del PIB, que adquiere el carácter de estructural en la medida que no depende del ciclo económico.
Según el presidente de la AIReF, José Luis Escrivá, el déficit está directamente relacionado con el comportamiento del sistema público de protección social. En un entorno de ciclo económico neutral como el que se prevé en 2018, la Seguridad Social sumará un desequilibrio equivalente al 3% del PIB.
Además, el control de la deuda se hace complicado en un entorno en el que no se consigue situar los ingresos por recaudación (40% del PIB) por encima de los gastos (42% del PIB).
Los expertos de AIReF consideran que España no reduciría su nivel de deuda por debajo del 60% del PIB hasta al menos el año 2033 (bajo unas hipótesis optimistas de variables macroeconómicas) o hasta el año 2036 (bajo unas hipótesis de cálculo menos optimistas).
En opinión del economista Santiago Niño-Becerra, a partir de 2018 ya no habrá dinero en el Fondo de Reserva de la Seguridad Social para asumir el pago de las prestaciones y ello implicará tomar medidas como quitar las pagas extra a los pensionistas, reducir el importe de la pensión máxima y, probablemente, crear un impuesto para financiar las pensiones. En este sentido, recuerda el caso de Grecia, donde las pensiones han llegado a bajar un 40%.
A este respecto, el economista José María Gay de Liébana ha manifestado que uno de los problemas es que los jubilados se van retirando con pensiones medias más altas, mientras que los jóvenes que se incorporan al mercado de trabajo lo hacen con sueldos cada vez más bajos y, por tanto, cotizan menos.
En 2012, cuando el Gobierno decidió recurrir al fondo de reserva de la Seguridad Social para pagar las pagas extra de los pensionistas, éste tenía un importe equivalente al 6,2% del PIB, equivalentes a unos ocho meses de pensiones. Actualmente, según los datos del Ministerio de Empleo, su importe asciende a 32.481,31 millones de euros, lo que supone el 3,12% del PIB, con lo que no llega ni para pagar cuatro nóminas.
Según un estudio publicado en la revista "Papeles de Economía", de Funcas, si no se hubiera retirado nada, el fondo estaría en un 7,7% del PIB, es decir contaría actualmente con casi 80.000 millones de euros para el futuro, que permitiría pagar nueve mensualidades.
Según Ignacio Zubiri, autor del informe, "el recurso al Fondo Reserva ha permitido financiar las pensiones a partir del 2012". El problema es que los recursos del fondo se están agotando y la creación de empleo es lenta.
A este problema se suma otro: la ralentización del aumento de la recaudación debido a la moderación salarial, los salarios más bajos de los nuevos empleos y las reducciones incentivadoras de cotizaciones.
Saludos.
