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Participaciones del usuario Crayola

Crayola 09/09/19 11:11
Ha comentado en el artículo ¿Quieres conocer el estado de una vivienda subastada recién desalojada?
Tristán, que nos hacemos mayores...el piso está de lujo, no te quejes tanto. Hace unos meses entramos en un piso en la playa y la mitad de las paredes estaban reventadas, la cocina destruida en el centro del salón, las tuberías a la vista y los cables colgando. Había sido la comunidad de propietarios, que para arreglar una fuga, entró sin permiso y acabó con todo, sin reparar los daños estéticos a posteriori. Cuando vendimos el apartamento, me comentó el comprador que los reformistas habían salido corriendo, porque con con los agujeros en la pared se habían colado media docena de ratas...del tamaño de conejos.
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Crayola 03/01/19 13:46
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Jajaja. El caso es que, cuando vio al tipo borracho en la ventana, y con el fusil apuntando, le dijo a la señora: "mire, yo me voy para casa, que su marido no está bien de la cabeza". Se dieron la vuelta los dos y el subastero llamó a la Guardia Civil, avisando de lo que estaba ocurriendo. Los de la Guardia Civil, que debían conocer bien al bebedor, decidieron esperar al día siguiente para pasar a visitar la nave, esperando que se le hubieran bajado los humos. Y efectivamente, estaba durmiendo la mona en la nave. Lo recogieron y se lo llevaron.
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Crayola 03/01/19 12:27
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El caso es que, con la puerta de entrada de por medio, negociaron una fecha de desalojo del inmueble. Firmaron un documento y el subastero les permitió permanecer en el piso varias semanas más. Me contó otra anécdota de una nave, o granja, que se quedó en un pueblo. Y cuando fue a negociar la entrega de llaves, la esposa del ejecutado le confesó que se había ido con la escopeta, borracho, a la propiedad. Para allí se fue el subastero con ella, y a medida que se acercaba, veía asomar por una ventana la cabeza del ultrajado, con la escopeta, borracho.
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Crayola 03/01/19 12:03
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Recuerdo una anécdota que me contó un subastero. Ocurrió antes de la crisis económica que hemos vivido esta decada. Se adjudicó un piso y el juzgado realizó el lanzamiento, cambiando la cerradura del mismo. Eran fechas navideñas, así que allí se quedó el hombre, revisando el inmueble, y dándose cuenta de que la familia que lo habitaba no se había llevado nada. Encontró ropa, dinero, joyas... Y en ese momento alguien, desde fuera, intentó abrir la puerta repetidamente. Hasta que entendió que la cerradura se había cambiado. Los antiguos propietarios, con hijos incluidos, se encontraban en el portal intentando acceder a la que había sido su casa, y el subastero dentro, atrapado y sin saber qué hacer. Me confesó que, a pesar de su experiencia (y puedo asegurar que tenía mucha) había sentido un gran agobio.
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Crayola 08/05/18 08:42
Ha comentado en el artículo Cuando lo barato sale caro en las subastas judiciales
Quería quedarme el inmueble, así que lo primero era presionar al BBVA para que firmase escritura de cancelación. Tardé diez meses, pero al final acudieron los apoderados al notario y pude limpiar la nota simple y vender el apartamento. Durante este tiempo hablé una par de veces con el departamento que se encarga de certificar las deudas del banco. Me aseguraron por activa y por pasiva que esa deuda no existía, pero yo tenía claro que sí estaba incluso antes de presentarme a la subasta: una hipoteca de 2009...imposible que se cancele en unos pocos años y luego se deje subastar con otra carga mucho menor. El abogado del banco, por cierto, un desastre de hombre, me dijo que no era la primera vez...
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Crayola 08/05/18 00:40
Ha comentado en el artículo Cuando lo barato sale caro en las subastas judiciales
En defensa de la empresa que se ha adjudicado y registrado el inmueble, aunque haya hecho una chapuza, decir que seguramente habrán acudido a la Caja correspondiente en la ns y ésta les habrá dicho lo siguiente: "Aquí no me figura que exista deuda alguna". Con lo cual habrá creado una falacia narrativa que consiste en pensar que si la entidad financiera ya no reclama deuda, es porque ésta ya no existe. Y lo que suele ocurrir es que se ha vendido a un fondo. Incluso cuando la entidad te certifica que no hay deuda puedes echarte a temblar: me adjudiqué un inmueble con SS, hipoteca de BBVA anterior, certificado de deuda 0. Pero resultó que, al ponerme en contacto con el banco para cancelar registralmente, me comunica su abogado que se deben 150.000 del ala. No te puedes fiar.
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Crayola 09/03/18 12:07
Ha comentado en el artículo Cómo eludir impuestos para compensar las pérdidas que nos provoca la inacción del gobierno del señor Rajoy
Que no participe no significa que no os siga ;) Respecto al tema de la fiscalía, son compras ante notario con precios anormalmente bajos, que pueden indicar que hay dinero b de por medio, o que existe una abuso en la compra, por el motivo que sea. Hay que destacar que el señor registrador dispone de testigos de venta muy fidedignos para poder realizar una comparativa. Hace poco me comentó un conocido que una señora le quería vender un piso por 60 (mil) euros. El inmueble en cuestión valdría en el mercado el triple. La gente mayor confunde 60 (millones) de pesetas con 60 (mil) euros. Me preguntó qué haría yo, y le contesté que (al margen de disquisiciones morales) esa venta en ese precio era un problemón como la copa de un pino. Cosa bien distinta es si el inmueble se compra en subasta. Ahí es una administración la que guía (aunque obligando al vendedor) la enajenación, y ninguna otra puede chistar por el precio de la misma.
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Crayola 09/03/18 00:53
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De hecho, conozco casos en los que, ante precios anormalmente bajos, el señor registrador a avisado a la fiscalía del asunto y el vendedor ha sido citado para consultarle las circunstancias de la venta. Hecho que no me parece mal, desde el punto de vista de defender al consumidor de abusos impropios e inconfesables.
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