¿Cuáles son los mejores inversores de la historia?

 El mundo de la inversión ha visto a una gran cantidad de excelentes inversores. Y siempre es buena idea conocerlos para tratar de leer lo que hicieron y por qué eran tan buenos. Hoy en Finanbest, te contamos cuáles son los mejores inversores de la historia.

A Benjamin Graham se le conoce por ser el “padrino” de Warren Buffett y el “inventor” del value investing. Hasta que Graham apareció en escena, la mayoría de los inversores acudían a la Bolsa como si fuera un casino.

Benjamin Graham fue el primero del que tenemos constancia que evaluaba las empresas, estudiando su situación financiera y decidiendo sus inversiones en función de ello.

Lo que hacía Graham era estudiar las compañías y determinar lo que él llamaba “valor intrínseco” de la compañía. Y, después, comparaba ese valor intrínseco con el precio que reflejaba la cotización. Si el valor era superior al precio, compraba, y, cuando ambos valores se acercaban, vendía.

Su libro “El inversor inteligente” es uno de los libros más importantes jamás publicados sobre inversión, y ha sido recomendado por Warren Buffett en multitud de ocasiones por ser, según él, el mejor libro jamás escrito sobre inversión.

Otro de los grandes inversores de la historia fue Philip Fisher. Si Benjamin Graham se conoce por ser el padre del value investing, Philip Fisher se conoce por ser el padre del growth investing. Es decir, de la inversión en empresas que tienen un gran potencial de crecimiento futuro.

A diferencia de Graham, Fisher se centraba en empresas que estuvieran creciendo y que tuvieran buenas oportunidades de expandirse. Para determinar qué empresas podían lograr eso de forma sostenida, escogía aquellas que obtenían grandes márgenes de beneficio y que invertían mucho en investigación y desarrollo.

Su estilo de inversión era a muy largo plazo y muy concentrado. Para que te hagas una idea de cuán a largo plazo invertía, compró acciones de Motorola en 1955 y cuando murió en 2004, todavía tenía esas acciones.

También escribió un libro, llamado “Common Stocks and Uncommon Profits”.

No podía faltar una mujer en la lista. Y merece estar por méritos propios (valga la redundancia). Se trata de Geraldine Weiss, más conocida como The Grand Dame of Dividends (o sea, la Gran Dama de los Dividendos).

Geraldine Weiss elegía las acciones que compraba en función de los dividendos que repartían. Cuando los dividendos estaban en máximos, compraba sus acciones. Cuando la empresa rebajaba los dividendos hasta mínimos históricos, la vendía.

A día de hoy, la inversión basada en dividendos no es tan sencilla como en su época, puesto que las empresas actuales optan más por la recompra de acciones que por la distribución de dividendos como vía para premiar a sus inversores.

Sin embargo, conocer su historia y estrategia sigue siendo útil. Y la mejor forma de hacerlo es leyendo sus libros “Dividends Don’t Lie” y “The Dividend Connection”.

George Soros es un inversor un tanto distinto a los que han aparecido en esta lista, puesto que se suele relacionar más con la figura del especulador. Se ha especializado en la inversión en bonos y en el mercado de divisas.

Soros tiene el récord de más dinero ganado con una sola operación, gracias a su operación poniéndose corto en libras, en 1992, con una inversión muy apalancada, que obligó al gobierno británico a devaluar su divisa.

Por lo demás, Soros ha obtenido retornos medios anuales del 30% al frente de su fondo Quantum.

También ha publicado varios libros, entre los que destaca su “The Alchemy of Finance”.

Warren Buffett es, probablemente, el inversor más conocido y mediático de cuantos aparecen en esta lista. Se trata del inversor más rico del mundo, con alrededor de 80.000 millones de dólares en el momento de escribir estas palabras.

Buffett invierte siguiendo la escuela del value investing y a muy largo plazo. Buena muestra de ello es su inversión en Coca Cola, que mantiene desde hace décadas y que le ha reportado cuantiosos beneficios (el valor de Coca Cola se ha multiplicado por 17 desde que compró las primeras acciones).

Buffett es el mejor ejemplo de que lo importante en el mundo de la inversión no es tanto la rentabilidad ni el capital (siendo ambas cosas importantes), sino el plazo. Buffett empezó a invertir cuando tenía apenas 13 años (¡13 años!), y dice que empezó tarde.

Es ese largo plazo el que le ha permitido convertirse en una de las personas más ricas del mundo, a pesar de que otros inversores han conseguido rentabilidades más altas que él.

Es por ello que nosotros siempre recomendamos invertir a muy largo plazo y sin miedo. Cuanto antes empieces y más tarde rescates tu dinero, más capital acumularás.

John Bogle ha sido aclamado por Buffett como la persona que más merece una estatua por ser el mayor benefactor de los inversores estadounidenses. Y no es para menos, porque Bogle hizo algo espectacular.

John Bogle es el fundador de The Vanguard Group, una gestora (de las más grandes del mundo) que comercializa productos financieros con comisiones muy bajas. Estos fondos suelen ser de gestión pasiva, el tipo de inversión que nos gusta en Finanbest y que nosotros realizamos (principalmente).

Entre los consejos de John Bogle está el de no sobreestimar la rentabilidad pasada de un fondo, el de no fiarse de los gestores estrella, y el de construir una cartera de fondos de inversión con comisiones bajas.

Para aprender más sobre el estilo de inversión de Bogle, puedes leer su libro “El pequeño libro para invertir con sentido común”.

Y, si te parece que el estilo de inversión de Bogle tiene sentido y es rentable (lo tiene y lo es), te recomendamos que eches un vistazo a nuestros fondos, pues están basados en buena medida en sus principios de inversión.

Como ves, hay muy buenos inversores a lo largo de la historia, y es fundamental conocerlos para aprender de ellos y poder extraer aprendizajes útiles para nuestras propias inversiones. Leyendo sobre los que te hemos mencionado, seguro que mejoras como inversor.