Un mayor perfil de riesgo se corresponde con mayor renta variable (bolsa), y un menor perfil de riesgo se corresponde con mayor renta fija (deuda de administraciones públicas o de empresas).
El problema es que la renta fija puede dar rendimientos negativos (letras del tesoro español hasta hace poco por ejemplo, aunque desconozco cómo estarán ahora), y además desde que el fondo compra el título hasta que vence, es posible vender la deuda a terceros, por eso su valor también fluctúa (aunque suele ser menos que la renta variable). Además, la renta fija no está exenta de quiebra, aunque es bastante raro un default de un Estado o la quiebra total de una empresa con respecto de una mera caída en su valoración.
En teoría:
1. Si vas a muy largo plazo (<10 años): todo a RV
2. Conforme vas reduciendo los años en los que planeas retirar la inversión, se debería ir reduciendo la RV y aumentando la RF.
En la práctica, la RF está en rojo. Por ello creo que es mejor invertir menos cantidad pero todo en RV, que tener RF de manera innecesaria y restando rentabilidad a la cartera.