Novato en autónomos, IRPF

Hola a todos, ante todo gracias por cualquier ayuda que puedan prestarme.
Me encuentro a punto de darme de alta en autónomos, y tengo problemas en escoger el modelo de pago fraccionado de irpf en el modelo 307. La teoría la entiendo, pero me cuesta ejemplificarla y adecuarla a mi caso concreto.

Soy programador de software y calculo que este mes facturaré cerca de 2000 euros sin iva. Es probable que el mes que viene vuelva a facturar tal cantidad o algo más. Enero sabe Dios! :)

Entiendo que cualquier opción (estimación directa, o directa simplificada, objetiva) no pueden cambiarse más adelante, esto es así?

Podrían recomendarme qué tipo de opción escoger en mi caso?

Por otro lado, durante este año terminé la carrera y generé ingresos por ventas en ebay de artículos de los que era propietario. En ningún caso superan los 2500 euros. Tendré que explicar estos ingresos a final de año? Sgún tengo entendido vender artículos del propio patrimonio no son considerados actividades económicas.

En fin, si pudieran ayudarme, lanzarse por cuenta propia parece que no era suficiente tortura como el papeleo que me espera :)

Muchas gracias.

Alvaro.

Estimación objetiva es lo que se conoce como "módulos". Es una forma de tributar propia de ciertas actividades empresariales, pero solo de algunas concretas. Las actividades profesionales no contemplan módulos.

La estimación directa es la que se basa en la contabilidad normal de toda la vida, que en resumen es Ingresos - Gastos computables. La modalidad normal es la ajustada al PGC, la que correspondería a una empresa mercantil normal y corriente. La modalidad simplificada es apropiada para actividades profesionales o empresariales de pequeña cuantía. En esencia es la misma que la anterior, solo que sustituyendo todo el conjunto de provisiones por causas diversas en una sola provisión genérica del 5 %, y aplicando una tabla de amortización simplificada.

En la práctica, para actividades económicas profesionales, la modalidad simplificada viene a ser una forma de tener una bonificación fiscal del 5 % del saldo neto.

La venta de elementos patrimoniales particulares no se considera actividad económica, aunque pueden generar ganancias o pérdidas patrimoniales que sí deben declararse en el IRPF.