En lugar de andar babeando y aprender a hablar y respetar la integridad física de su interlocutor, lanzamiento de misiles líquidos, mejor se ocupaba y preocupaba de intentar la defensa del indigno de su hijo, imputable en unos cuantos asuntos judiciales cuando menos bastante turbios.
Y es que el que sube al púlpito y no predica con el ejemplo, lease curas pederastas, poco porvenir le queda, salvo que el proceso de envenenamiento y sedación de la población catalana haya sido tan efectivo, que hagan lo que hagan sus dirigentes, o dejen de hacer, les lleve a una impunidad total con la aquiescencia de su pueblo.
Llegados a ese extremo, de hipnosis colectiva, chapeau !!! por esos prestidigidatores y a
los que duermen el sueño de los justos.......cuando abran los ojos, sencillamente ya será demasiado tarde para reconducir tanto engaño, falacia e hipocresia.