El grupo húngaro Ganz-MaVag (Magyar Vagon) ha confirmado el interés que tiene por comprar Talgo por 620 millones de euros, si bien ha desinflado las expectativas del mercado respecto a la ejecución de la operación, al no tener la suficiente certeza para hacerlo.
En un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Magyar Vagon explica que la principal traba está relacionada con las financiaciones de la compañía sujetas al cambio de control de cara a la obtención de los permisos regulatorios correspondientes.
A este respecto, la CNMV le ha trasladado que no se permite someter la oferta a la condición de la obtención del consentimiento de las entidades financiadoras por el cambio de control.
Por todo ello, asegura no tener certeza de que la Oferta Pública de Adquisición (OPA) que ha calentado la acción en los últimos meses se llegue a formular, aunque promete que informará de cualquier posterior decisión a su debido momento.
De esta forma, confirma las informaciones que apuntaban a una OPA a 5 euros por acción, si bien detalla que todavía no se ha alcanzado ningún acuerdo ni ninguna decisión al respecto, a la espera de dilucidar las trabas regulatorias a las que ha hecho la referencia la CNMV.
En torno a las 16.00 horas del jueves, el regulador decidió suspender la cotización de Talgo de forma cautelar y con efecto inmediato tras haberse disparado repentinamente sus acciones en Bolsa un 10% ante los rumores de una OPA.
Antes de dispararse la cotización, las acciones de Talgo valían 4,4 euros, lejos de los 5 euros que Magyar Vagon desembolsaría para hacerse con la compañía, por lo que las acciones llegaron a los 4,78 euros antes de que se suspendiera su cotización.
Cuando en noviembre trascendió esta posible operación, Talgo cotizaba en 3,9 euros y se dio la misma situación, sus acciones se dispararon hasta los 4,4 euros, ya que la prima hasta los 5 euros alcanzaba el 27,7%, y la CNMV la suspendió durante unas horas.
La compra de Talgo por 5 euros por acción supondría valorar el 100% de la empresa en torno a los 617 millones de euros. El principal accionista de la compañía es el fondo de inversión Trilantic.
Por su parte, Magyar Vagon, propiedad del empresario András Tombor, opera la empresa fabricante de trenes DJJ, que compró en 2020. Si se abre la veda de las ofertas, la vasca CAF también sería un buen postor por Talgo.
Una vez aportadas las debidas explicaciones, la CNMV ya ha tomado la decisión de retirar la suspensión de sus acciones, por lo que la compañía volverá a cotizar el lunes a la apertura del mercado.