Se invertirá 0-100% del patrimonio en IIC financieras, activo apto, armonizadas o no, pertenecientes o no al grupo de la gestora o subgestora. Se invertirá, directa o indirectamente, entre 30-75% de la exposición total en renta variable (principalmente a través de ETF), de emisores/mercados de EEUU. El resto en activos de renta fija pública y/o privada (incluyendo depósitos e instrumentos del mercado monetario, cotizados o no, líquidos), de emisores/mercados zona euro, en emisiones con al menos media calidad crediticia (rating mínimo BBB-) o, si fuera inferior, el rating del Reino de España en cada momento. La duración media de la cartera de renta fija será superior a 18 meses. Podrá existir concentración geográfica o sectorial.