La exposición a renta variable será como mínimo del 75%, y de este parte, al menos el 75% estará emitida por entidades radicadas en Europa, pudiendo invertir en valores emitidos por entidades radicadas en otros países pertenecientes a la OCDE, incluidos mercados emergentes hasta un máximo del 15%. Habitualmente la exposición del Fondo a renta variable será del 100%, pero podrá variar en función de las estimaciones respecto a la evolución del mercado, pudiendo invertir en títulos de baja, media y/o alta capitalización bursátil. La posibilidad de invertir en activos con una baja capitalización puede influir negativamente en la liquidez del Fondo. La exposición máxima a riesgo divisa podrá superar el 30%.