La línea Sigfrido se hizo popular en la Segunda Guerra Mundial, fue construida por el ejército Nazi entre los años 1936 y 1939, y consistía en un sistema de fortificaciones establecidas por la Alemania nazi para defender la frontera con Francia.
El sistema fortificado se desarrolló en tres líneas paralelas que, como anteriormente ya hemos comentado, su misión era la de ponérselo difícil al ejército que quisiese entrar en territorio alemán. En el lado opuesto, es decir en Francia y teniendo el recuerdo la Primera Guerra Mundial, igualmente se había construido otra línea defensiva que recibió el nombre de línea de Maginot, nombre de su creador el ministro de Defensa francés, André Maginot.
Seguramente que muchos hayáis visto en alguna película de la Segunda Guerra Mundial, unas pequeñas formaciones piramidales, cuya finalidad era la de no dejar pasar, o al menos dificultar el avance de los carros de combate del ejército aliado, en su avance hacia Alemania después de liberar Francia.
Pues bien, la situación en el futuro del oro, la podemos comparar con la nombrada línea Sigfrido, y es que en el gráfico que os adjuntamos del oro, podemos observar como una invisible línea o mejor dicho, zona invisible (recordad que la línea Sigfrido constaba de tres líneas paralelas) está poniendo todos los obstáculos posibles al avance de las tropas alcistas en el oro.
Así las cosas y como podéis observar en el gráfico, desde que el oro hiciese suelo en la zona que por pauta, Elliott nos adelantó, en su rebote alcista el oro se ha encontrado una fuerte resistencia, comprendida entre el primero de los objetivos propuestos (línea horizontal superada el día 8 de febrero) , seguida de la línea verde (fosforito) que se ha convertido en la verdadera línea Sigfrido , y la línea 2-4 que, ayer poco antes de las 15:00 horas fue perforada con fuerza, si bien posteriormente se vino abajo.
Resumiendo, el futuro del oro lo tenemos atrapado en una zona triangular imaginaria formada por las línea reseñadas que, de superarse podríamos entrar en una auténtica escalada alcista de la que iríamos viendo poco a poco hasta dónde se podría extender.
Para terminar deciros que, tanto la línea Sigfrido como la línea Maginot sirvieron de poco, y a buen entendedor pocas palabras.
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