Lo cierto es que esta es la frase más pronunciada por los comerciantes de Santander desde hace más de un año, antes de que se pudiera hablar oficialmente de crisis. Pero es ahora, al comienzo de las rebajas de verano, cuando la alarma ha saltado y no sólo en el sector textil.
De entrada, los escaparates se han llenado, desde el primer día, de carteles con precios al 50% -que no olvidemos pueden ser falsos descuentos en productos que han subido de precio los días previos a la temporada, este timo lo conocen muy bien unas cuantas inmobiliarias de Santander, por cierto-. Las asociaciones de consumidores estiman que las ventas bajarán un 15% respecto al año pasado y que el gasto medio que va a realizar un jovencito consumista será de 125 euros -dinero prestado, supongo, por papá y mamá, que sólo se gastarán 90 euros-. Por supuesto, son estimaciones que a muchos se nos antojan un poco altas. No sé si los socialistas recién salidos del 37º Congreso seguirán la consigna: consumid, compañeros, consumid.
Otro sector que también parece inquieto es el de la automoción, si bien este es el primero que se resiente apenas hay un rumor de malos tiempos. En Cantabria se anuncian despidos a nivel de concesionario, pero esto es sólo el continuará del parón que llevamos viendo a escala nacional, con varias fábricas españolas cerrando turnos. Lo dicho, que no se vende nada. Y es que hace tiempo que se acabó lo de meter el bólido en el crédito hipotecario.
A pesar de todo, la Operación Salida ha comenzado muy bien y la DGT ha estimado en 4,3 millones el volumen de desplazamientos por carretera. Puede ser señal de que muchos españoles han dejado el viajecito por Europa para tiempos mejores y han decidido quedarse en territorio nacional. En cualquier caso, habrá que ver los datos de RENFE -incluido nuestro improductivo tren playero- y de las aéreas porque no me cuadra nada la factura de la gasolina.
Mientras tanto, la gente ya está cantando que a Pamplona hemos de ir. Con el euro tan caro, veremos si se nota en el turismo yankee. Nosotros, en Santander, tenemos un buen indicador económico: número de pinchos vendidos en las casetas de la Feria de Día. A 2 con 50, oiga. No se corten y salgan a la calle. Que no se diga.
Buen Domingo.