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Recuperación de Memoria Histórica: Los Sefardíes, desde la expulsión en 1492 a la nacionalidad 2021 – IV

 

 
Recuperación de Memoria Histórica:  Los Sefardíes, desde la expulsión en 1492 a la nacionalidad 2021 – IV 

     Europa y en particular España deben saber aprovechar mucho mejor desde la perspectiva turística y de creación de empleo, también de atracción de inversión extranjera,  su rico legado histórico, artístico y sus rutas de Cultura y Naturaleza en el contexto del impresionante crisol de culturas que ha formado la identidad española y de sus diversas Comunidades Autónomas. 

     Es un momento histórico especialmente importante para fomentar la cultura judeo-cristiana en el contexto del apogeo actual de recuperación de la nacionalidad española por parte de los descendientes de judíos en España y en concreto de los judíos en Aragón, de los sefardíes o sefarditas. Se trata de actuales generaciones  dispersas por todo el mundo y  vinculados genealógicamente con judíos que vivieron no sólo en Aragón, sino en toda España en la Corona de Castilla  y Aragón, que fueron expulsados por los Reyes Católicos en 1492. Con la conquista cristina en la Edad Media, o Reconquista, la población judía siguió morando a nivel de comunidad en las mismas viviendas dentro de un mismo barrio y esa demarcación es lo que se denomina judería, espacio abierto inicialmente a otras culturas y religiones, si bien con la finalidad de  preservar la cultura, costumbres, leyes etc propias del pueblo judío. El creciente poder hegemónico cristiano fue impulsando el aislar a los judíos y su cultura y finalmente, para el caso concreto de Aragón,  con Alfonso III de Aragón (Valencia 1265, Barcelona 1291)  y un decreto de 1288 los judíos fueron “alojados” en determinadas zonas de los pueblos y ciudades e incluso se les “confinó perimetralmente” con murallas en las denominadas “juderías”.

     Las juderías más importantes de Aragón, que de manera inteligente y con mente abierta, se están impulsando cada vez como referencia cultural, financiera y especialmente turística son las siguientes: a) La judería de Zaragoza fue sin duda la más importante, llegando a tener más de 1.500 habitantes. A partir del decreto de Alfonso III la mezcla cultural e interrelación con otras culturas  se perdió casi en su totalidad y lo que se fomentó fue el “apartheid”  por la presión cultural y normativa cristiana así como sus “murallas”.  Los dos barrios eran el de la judería vieja entre la calle Mayor, la de San Gil y el Coso; por otro lado estaba la denominada judería nueva en la zona de San Miguel, también llamada de los Callizos y donde todavía permanece una sala de baños públicos del siglo XIII.  b)  La judería de Calatayud, que llegó a tener casi mil habitantes, en torno a la Cuesta de Santa  Ana y la ermita de la Consolación.  c) La judería de Huesca, con tres sinagogas, estaba localizada por la puerta de Ramián. Y la de Jaca, con dos sinagogas, en el barrio del Castellar. d)  La judería de Tarazona, que  disponía de una de las juderías, tanto entonces como ahora, más activas. Con dos sinagogas que atraían a más de doscientos fieles, estaba enclavadas fundamentalmente en la actual sede del Palacio Episcopal.  e)  Otras juderías: Teruel, Caspe, Alcañiz, Híjar (quizás la sinagoga mejor conservada de todo Aragón) , Almunia de Doña Godina, Épila,  Almonacid de la Sierrra, Biel, Uncastillo, Sos del Rey Católico, Luesia, El Frago, Tauste, Aguarón y otras. 

    Luis Ferruz Agudo / Escritor y ecoomista / 

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