He dedicado estas últimas semanas a estudiar backtests de la cartera con múltiples variantes para entenderla mucho más a fondo, vamos a ver los resultados y vamos a tratar de simplificarla lo máximo posible para que cualquiera pueda reproducirla sin perder rentabilidad.
Parámetros
Durante los últimos posts he ido describiendo la cartera y sus fundamentales. Los diferentes parámetros que podemos variar en la gestión de la cartera son los siguientes:
- Qué cantidad mínima y máxima rebalancear en la cartera.
- Cada cuanto rebalancear la cartera.
- Número de posiciones asignadas en función del tiempo de retorno de cada empresa.
- Proporción de cash en la cartera.
- Número de empresas en cartera.
Rentabilidad
Estudiando la cartera a fondo se puede superar ampliamente la rentabilidad base cambiando adecuadamente los parámetros de gestión de la cartera, pudiendo llegar al 24% de cagr aplicada sobre las empresas del S&P500. Pero estos cambios no son ajustes de parámetros de un algoritmo, son modificaciones fundamentales de la gestión de cartera una vez entendido a fondo como funciona después de examinar todos los backtests. Y son rentabilidades teóricas, que pueden continuar en el futuro o no, no es ninguna garantía.
Cantidad mínima y máxima a rebalancear
Expuse en los anteriores posts, que una adecuada gestión de cartera sería no variar una posición más del 10% de la cantidad asignada a la posición, ni cambiarla si supone menos del 10% de las acciones actuales. Esto en principio suaviza las variaciones en cartera, asimilando a un DCA, y evitando sorpresas como por ejemplo crear una posición y que al día siguiente baje un 30%. Pero realmente resta rentabilidad a largo plazo.
Si somos capaces de soportar en nuestra cartera eventos inesperados, solo con este cambio podemos pasar del 12% al 20% de rentabilidad a largo plazo. Eso sí, hay que ser capaz de soportar eventos desagradables y bruscos en la cartera.
La gestión sería más agresiva, rebalancear todas las posiciones de golpe cuando toque rebalanceo. Y si una posición se debe deshacer, se deshace totalmente ese mismo día.
Este es el cambio que nos propulsa más la rentabilidad, y depende de nuestra capacidad de soportar minusvaloraciones bruscas. Pero la recompensa es importante.
Cada cuanto rebalancear la cartera
Rebalanceando cada dos meses perdemos algo de rentabilidad, pero algo despreciable. Pasamos del 20% al 19%. Pero solo por la regla de los dos meses de Hacienda nos va a compensar con creces. Y esa variación del cagr es casi más estadística que real, así que yo recomiendo hacerlo cada dos meses.
Número de posiciones asignadas en función del tiempo de retorno
Una parte importante de la gestión es el número de posiciones asignadas a cada empresa en función del número de años de retorno. En los anteriores posts di una tabla, pero, ¿qué pasa si no lo hacemos y solo asignamos una posición a cada empresa? Pues el resultado es que estadísticamente es equivalente si renunciamos a un poco de cash. Es decir, esa gestión más inteligente nos gestiona el cash para darnos un extra de rentabilidad, pero si estamos dispuestos a tener un poco menos de cash podemos renunciar a esa gestión inteligente. Por ejemplo, con 10 empresas en cartera y con 1 posición de cash obtenemos ese 19% de cagr. Yo es algo que recomendaría para simplificar enormemente la gestión, asignar un 9% o 10% de cash y asignar una posición a cada una de las empresas en cartera.
Esto es así porque rebalanceamos cada dos meses. Es decir, cada dos meses volvemos a hacer que todas las empresas tengan otra vez el mismo peso. Esta es otra parte importante de la gestión de cartera, que tiene dos patas, una la asignación de posiciones y otra el rebalanceo periódico para volver a asignar ese peso asignado.
Proporción de cash en cartera
En realidad, cuando menos cash tengas en cartera mejor, pero con ciertos matices. Si tienes cash en cartera es para aprovecharlo en momentos de alta volatilidad, pero por el contrario renuncias a que ese cash te de la rentabilidad de la cartera a largo plazo. Cada uno debe valorarlo. Si tu bróker te da opción de apalancamiento, yo no tendría cash y en momentos de altísima volatilidad yo utilizaría un pequeño apalancamiento. El valor más apropiado sería del 20%, nunca mayor, como vimos ya hace muchos posts.
Número de empresas en cartera
Pasando de 10 empresas a 8 en la cartera, es cuando obtenemos más rentabilidad. Aquí es donde está la otra clave, y podemos llegar al 24% de cagr. Menos empresas dan más rentabilidad, por ejemplo, con 5 llegamos al 25%, pero el riesgo de que algo salga mal es mucho mayor. Yo creo que el número adecuado es 8 o 10, con una posición de cash.
Resumen de la estrategia simplificada
En resumen, la estrategia simplificada que nos puede dar un 24% (teórico) de rentabilidad es la siguiente: 8 empresas permanentemente en cartera y una posición de cash, rebalanceado cada 2 meses para que vuelvan a tener de nuevo el mismo peso, y haciendo y deshaciendo las posiciones de golpe.
¿Qué empresas?
Las que tengan dentro del S&P500 un menor número de años de retorno (PER ajustado por crecimiento e inflación) con crecimiento de earnings predecible y mayor al 10% anual durante los últimos 4 años (r^2 > 0.95), y perspectivas de continuación de crecimiento.
IMPORTANTE: la coletilla de “con perspectivas de continuación de crecimiento” es muy importante, y es aquí donde debemos ser inteligentes. Puede que una empresa esté en este grupo, pero veamos que no hay perspectivas de que en el futuro siga creciendo. Y es a través de un análisis de la empresa como debemos saber si debemos incluirla en la cartera o no. En caso de equivocarnos la diversificación nos suaviza el efecto.
Robustez de la estrategia
Analizando la rentabilidad que históricamente genera cada empresa a la estrategia, vemos que se cumple la regla de Pareto, el 20% de las empresas nos genera el 80% del beneficio. Como ejemplo ilustrativo pongo una foto del número de acciones del ticker URI (United Rentals, Inc.) en un backtest, vemos como la gestión de cartera a través del rebalanceo y de la selección de empresas es muy eficiente y nos ha dado mucha rentabilidad. Pero esto no pasa en todas las empresas, en muchas se invierte, se desinvierte y la rentabilidad es muy normal.
Pero, ¿qué pasas si borramos de nuestro catálogo de empresas a esas que han ofrecido alta rentabilidad en la estrategia? Pues el resultado es el mismo, aparecen otras empresas que generan ese efecto de Pareto. Y así una y otra vez. Llegando al límite de borrar el 10% de las empresas del S&P500 que más rentabilidad nos daban, llegamos a obtener exactamente la rentabilidad del S&P500.
Esto nos enseña lo robusta que es la estrategia y que quitando el caso de equivocarnos al invertir en empresas que se vayan a deteriorar bruscamente, obtendremos de promedio una rentabilidad en concordancia con los fundamentos de la estrategia pudiendo estar tranquilos.
Arranque de la cartera
Pensaba arrancar la cartera en septiembre, pero sinceramente no se si es buen momento. Quizás lo haga, pero solo con el 25% del capital. Y mi intención es darle seguimiento y mostrar aquí los resultados reales, de la forma más profesional que pueda. Pero sin garantías, no soy asesor financiero ni gestiono ningún fondo, solo expongo cómo gestiono mi propio capital.
Y el listado que ahora mismo podría estar en cartera es el siguiente, a elegir entre estas 12:
CHTR, DVA, BBY, AMD, TGT, BMY, VRTX, TER, LOW, MS, EBAY, KLAC.
Método más casero
Si alguien no tiene herramientas como para calcular la predictibilidad de los earnings, puede usar el siguiente método simplificado para construir una cartera.
Anota los earnings de la empresa que estés revisando de los últimos 4 años, a ser posible los earnings ajustados porque mejorará mucho el resultado. Calcula el crecimiento de un año al siguiente y calculas el promedio de ese crecimiento. Debes ver que es muy parecido de año en año, si no es así la empresa NO es predecible y hay que descartarla. Si crece menos del 10% tampoco merece la pena. Si es predecible, anota el PER NTM (next twelve months) y corrígelo por crecimiento con la fórmula log(1+k·PER) / log(1+k), por ejemplo si el PER NTM es 20 y crece en beneficios al 15%, se calcularía como: log(1+0.15x20)/log(1+0.15)=9.9. Si es mayor a 10 descártalo porque hay empresas mucho más baratas. Y así hasta que juntes una cartera de 8 o 10 empresas, cuanto menor sea el valor de PER corregido mayor será el margen de seguridad. Y cuanto mayor sea el crecimiento de beneficios de las empresas que tengas en cartera mayor será la rentabilidad esperada de tu cartera. No hace falta tener en cuenta tampoco la inflación ni los tipos de interés si la empresa crece a más del 10% y está barata, no es peligroso, sería peligroso si la empresa no creciese o si estuviera cara pero es justo lo opuesto a lo que buscamos.
Notas importantes
Importante: cuando hablo de beneficios o earnings, quiero decir beneficios o earnings por acción, es importante porque por ejemplo la recompra de acciones puede ser un importante driver de crecimiento.
Antes de invertir en una empresa para esta cartera se debe analizar, prestando especial atención a su generación de beneficios, de donde surgen y también cual es la fuente de crecimiento de esos beneficios año a año, es importante encontrar esos “drivers” de beneficios. Ver si esos “drivers” son sostenibles. También es importante analizar la sostenibilidad de la empresa.
Es recomendable ver que en las empresas en las que invirtamos, se correlaciona el precio de la acción con los earnings por acción a largo plazo. Normalmente será así, pero quizás encuentres alguna excepción.
Los dividendos no son importantes aquí porque se descuentan automáticamente de la cotización y es más una molestia que otra cosa, hay que reinvertirlos.
Hay que tener templanza en los rebalanceos, porque verás que vendes de empresas que suben para comprar empresas que bajan. No hay que tener miedo, aunque vayamos en contra de lo que nos dice el estómago, es ahí de donde surge la rentabilidad como hemos visto arriba.
Hay que diferenciar un poco entre inversión tradicional y esta gestión de cartera. Por ejemplo, con el caso de META, esta cartera analizaría los beneficios presentes reales y no los futuros. Es decir, veríamos que está invirtiendo mucho capital en el metaverso pero que no se materializa en beneficios, pidiéndonos desinvertir en la acción, y si algún día logra beneficios nuestra cartera lo verá y actuará en consecuencia. Una inversión más tradicional analizaría esa inversión en el metaverso y sabría predecir con antelación cómo se materializará eso en los beneficios. Esta inversión tradicional hay que decir que es mucho más rentable, pero mucho más complicada.
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