Ante todo expresar mis disculpas si alguien se siente ofendido por utilizar la expresión "robar" al referirme al acto de solicitar una hipoteca. Efectivamente, uno quiere pensar (siendo más un deseo que una constatación experiencial) que existen personas en las entidades financieras que son capaces de hablarte honestamente y no tratar de engañarte. Francamente, creo que las personas verdaderamente honestas y con un sentido de justicia tanto en pensamiento como en acto no creo que duren mucho trabajando en un banco de cara al cliente por pura lógica: o bien porque su conciencia les tortura al ver cómo muchos clientes firman documentos de cuya trascendencia no son conscientes porque han creído en las palabras siempre positivas del director o del comercial; o bien porque al no
generar las ventas programadas son despedidas o degradadas.
Pero yendo al término robar, en mi caso, aunque efectivamente pueda ser injusto o de mal gusto generalizarlo, en realidad no deja de ser una especie de metáfora en el sentido de que cuando entras en un banco a solicitar una hipoteca, se pone en marcha un mecanismo perfectamente engrasado que se basa en tratar de exprimir al máximo la economía de la persona que está en el lado débil de la balanza (generalmente la persona que pide una hipoteca para primera vivienda, por lógica, no dispone de efectivo, pues de lo contrario sería absurdo financiar una compra que podría pagar al contado) aprovechándose precisamente de su posición de debilidad. Dicha lógica perversa (en mi opinión) se pone de manifiesto en todo su esplendor cuando TODOS los bancos aplican el mismo algoritmo a la hora de fijar condiciones y tipos de interés: al que más solvencia tiene, más facilidad para pagar; al que menos solvencia, más dificultad: "como corro más riesgo prestándote dinero, te lo voy a poner más difícil con lo cual voy a contribuir a que aumenten las posibilidades de que efectivamente, no me lo devuelvas".
Siempre consideraré esta lógica de una gran perversidad psicopática (aunque establecer el paralelismo entre comportamiento psicopático y comportamiento bancario sería motivo para otro comentario).
Por último, creo que es perfectamente justo emplear el término robar cuando nos referimos a comerciales bancarios que tratan de engañarte directamente con las siguientes prácticas entre otras: 1) Venderte un derivado swap haciéndote creer que es un seguro contra las subidas del Euríbor; 2) Añadir productos vinculantes en el último momento cuando el futuro hipotecado está en la notaría sabiendo que la inmensa mayoría de las personas que están en esa situación se sienten en una gran indefensión unido al estado de necesidad que hace prácticamente imposible que paren todo el engranaje en ese momento por mucho que no entiendan o no esperasen esos nuevos documentos a firmar que de pronto les presentan por delante con la anuencia (o pasividad) del notario: las pocas veces en esta vida que he ido a un notario, siempre he visto a un tipo estresadísimo que lee deprisa y corriendo un documento sin que apenas se le entienda nada y que con sus gestos mete presión para indicar que lo que quiere es que se firme cuanto antes, y lo dejen marcharse cuanto antes para seguir haciendo lo mismo.
Creo que podemos hablar de "robo" (ya sé que penalmente tendría otra catalogación) cuando un banco, en connivencia con una tasadora, tasan deliveradamente a bajo precio una casa para obligar a subir los costes de forma imprevista de la hipoteca; creo que podemos hablar de "robo" cuando no se informa verbalmente y con ejemplos comprensibles para las personas con bajo nivel cultural, de detalles trascendentales de la hipoteca como que ésta posea un "suelo", como las consecuencias de devolver recibos, como la no obligatoriedad de contratar determinados productos vinculados, como la libertad del cliente de elegir notario y gestoría; y por poner el último ejemplo, creo que podemos hablar de "robo" cuando un banco no acepta la tasación hecha por una tasadora para otro banco... ah! y creo que podemos hablar de "robo" siempre que la información dada al cliente, que normalmente no está suficientemente informado ni formado en temas financieros, sea proporcionada con la intención de inducirle a error de apreciación de los riesgos y costos futuros, ocultándole los detalles relevantes que van a suponer costos enormes que en muchos casos no van a poder hacer frente y les van a llevar a perder sus casas y convertirse en morosos el resto de sus vidas.
Es en este sentido al que me refería cuando dije que tengo claro cuando entro en un banco que el objetivo de ellos es "robarme" lo más posible, y mi objetivo evitarlo en todo lo posible.