Después de tres años sin decir prácticamente nada buenos sobre nuestro país, esta semana el diario americano The Wall Street Journal ha publicado un articulo positivo sobre las empresas españolas, el cual os traduzco:
España S.A. realiza operaciones corporativas en medio del abatimiento.
Las empresas realizan fusiones en el exterior a pesar de los males económicos del país.
La nube de incertidumbre que se cierne sobre la economía española no genera un escenario ideal para las fusiones y adquisiciones. Pero eso no ha impedido a muchas de las primeras empresas del país generar grandes y en algunos casos audaces, adquisiciones en el extranjero en los últimos meses.
Este relativo ambiente de fuertes operaciones en España, llega en un momento de sufrimiento y pesimismo. El Déficit presupuestario de España en porcentaje sobre el producto interior bruto ha aumentado en dos dígitos, mientras que los precios inmobiliarios se han desplomado, golpeando duramente a sus bancos, en particular a las instituciones de ahorro regionales conocidas como cajas.
Dadas las similitudes con los males que ha sufrido Irlanda, actualmente a la espera de recibir 67.500 millones de euros del rescate internacional, existe una preocupación generalizada de que España, en última instancia, también requiera esta intervención. El índice español IBEX 35 ha bajado un 13% en el último año, en comparación con una ganancia del 11% para el más amplio índice Stoxx Europe 600. Normalmente, el sentimiento entre los inversores en acciones es un buen indicador de la actividad en fusiones. Subidas en el precio de las acciones a menudo van acompañadas con un incremento de las fusiones.
De hecho, Santander puso en marcha la segunda adquisición extranjera más grande para una empresa española del año pasado, al ganar una subasta en septiembre para comprar el Banco de Polonia Zachodni WBK SA por 5.350 millones dólares, según datos de Dealogic. Santander también mantuvo conversaciones, finalmente rotas, el año pasado para combinar sus operaciones en el banco Sovereign en los EE.UU. con M & T Bank Corp., en lo que hubiera sido un acuerdo multimillonario.
Quizás el ejemplo más llamativo sea el de ACS, la mayor empresa constructora de España, que parece probable que cierre una oferta no solicitada de 4.700 millones de dólares para el control de la poderosa constructora alemana Hochtief AG. La economía Alemana ha estado en auge en los últimos tiempos, consolidando su papel de economía mas fuerte de Europa.
Sin duda, el volumen en dólares de las transacciones españolas en 2010 ha sido más bajo que durante los años 2005 a 2008, debido a la debilidad en la fusiones y adquisiciones a nivel mundial. Si el gobierno español falla en apuntalar su débiles cajas de ahorros, generaría una mayor erosión de la confianza internacional en el país, por lo que los inversionistas podrían dar la espalda a las empresas españolas en general, impidiendo el acceso al capital necesario para lograr grandes acuerdos en el hogar o en el extranjero.