Perdón por ser tan desagradecido. Que sirva este comentario como agradecimiento al ilustrísimo señor Marqués. Gracias al marqués, las monjas pudieron comprar un buen aguilando y jamón ibérico 100% del bueno.
Este señor se ha ganado el cielo. Estoy seguro que la madre superiora tendrá presente al marqués en todas sus oraciones. Me dan igual la sentencia en su contra de hace poco, seguro que está arrepentido. Que dios lo tenga en su gloria.
Yo mismo, me veo obligado a fustigarme por no haber confiado en el señor, sirva esta oración de disculpa:
Dios te salve, Reina
y Madre de misericordia,
vida, dulzura y esperanza nuestra;
Dios te salve.
A ti llamamos
los desterrados hijos de Eva;
a ti suspiramos, gimiendo y llorando
en este valle de lágrimas.
Ea, pues, Señora, abogada nuestra,
vuelve a nosotros esos tus ojos
misericordiosos;
y después de este destierro,
muéstranos a Jesús,
fruto bendito de tu vientre.
¡Oh, clementísima, oh piadosa,
oh dulce Virgen María!