Según el sitio web de la Agencia Tributaria: en las comprobaciones limitadas del IRPF, la Administración revisa únicamente determinados elementos de la declaración, y en el caso de rendimientos de capital inmobiliario (como los alquileres a través de plataformas como Airbnb), es habitual que exijan acreditar la vinculación directa de los gastos deducibles con la obtención de esos ingresos.
El problema que describes es frecuente: Hacienda suele denegar gastos como luz, agua, internet, limpieza o suministros si considera que no están justificados documentalmente como necesarios para la obtención de los ingresos, sobre todo cuando no hay un contrato formal de arrendamiento donde se detalle qué servicios se incluyen. Aunque tengas facturas y recibos, si no se acredita que esos gastos son exclusivos o proporcionalmente afectos a la actividad (por ejemplo, porque el inmueble también lo usas como vivienda propia o no existe separación clara de consumos), Hacienda puede rechazarlos.
Esto ha pasado a otros contribuyentes, especialmente tras los recientes criterios restrictivos de la Administración sobre alquiler turístico. Es recomendable:
- Aportar contratos (aunque sean electrónicos) donde conste que se ofrece el alojamiento con esos servicios.
- Acreditar la afectación exclusiva o proporcional de los gastos (por ejemplo, facturas separadas, contadores individuales, o cálculos de prorrateo razonables).
- Si recurres, presentar alegaciones bien fundamentadas, acompañadas de documentación adicional.
Te recomiendo leer el Manual de IRPF 2023, en especial el capítulo de rendimientos de capital inmobiliario:
Manual IRPF 2023.
salvo mejor opinión