Un bufete de EE UU prepara una demanda colectiva contra Santander por la cuenta vinculada a Irán
El despacho Frank R. Cruz anima a inversores que se sientan perjudicados por el desplome de las acciones a unirse al pleito
Tras la revelación de los movimientos bancarios de Irán a través del Santander en Reino Unido, el banco desminitió esta información y aseguró que había realizado una investigación interna que concluye que “no ha incumplido la normativa estadounidense sobre sanciones impuestas a terceros”.
El medio británico detalló que, en base a documentos a los que ha tenido acceso, Santander habría albergado cuentas de compañías que están en secreto en manos de Petrochimical Commercial Company (PCC), una de las empresas iraníes sobre la que pesan las anteriormente mencionadas sanciones. Según FT, un cliente británico de la entidad bancaria, la sociedad Pisco UK habría recibido dinero desde el extranjero (China, principalmente). El problema es que esta sociedad estaría participada por una empresa estatal iraní (
Petrochemical Commercial Company), gracias a la utilización de testaferros.
Petrochimical Commercial Company es parte de una red internacional de sociedades a la que Estados Unidos acusa de haber sido un vehículo para generar cientos de millones de dólares para la Guardia Revolucionaria de Irán y de haber trabajado con la inteligencia rusa con el fin de financiar milicias cercanas al régimen iraní.
La Unión Europea aprobó el último
paquete de sanciones contra Irán hace un año, por la represión de protestas pacíficas. También Reino Unido y Estados Unidos llevan años imponiendo multas y restricciones a aquellas empresas que pretenden hacer negocios con el régimen de los ayatolás. De hecho, años atrás, cuando se demostró que otros bancos europeos habían incumplido las sanciones estadounidenses sobre Irán fueron sancionados con grandes multas. Standard Chartered tuvo que pagar más de 1.000 millones de dólares a modo de castigo y
Unicredit afrontó otra penalización de 1.000 millones de dólares en 2019.
El despacho Frank R. Cruz cuenta con casi 20 años de experiencia en class action relacionadas con “fraude de valores y mala conducta corporativa”, según indica en su propia página web