CAF se ha hecho con un contrato de Renfe valorado en 290 millones de euros para suministrar 28 trenes eléctricos de Media Distancia, que permitirá el rejuvenecimiento de la flota de la empresa pública y reducir así el número de incidencias en la red.
Según ha informado Renfe, estas nuevas unidades también contribuirán a aumentar la eficiencia energética, adecuar las obligaciones de implantación de accesibilidad, sustituir el material diésel e incrementar la seguridad en el sistema ferroviario.
El contrato incluye el mantenimiento conjunto, a través de una sociedad mixta Renfe-CAF, de 17 de los trenes durante 15 años y el suministro de las piezas de repuesto, así como la posibilidad de ampliar el suministro de hasta 42 trenes eléctricos adicionales.
Renfe se ha reservado el mantenimiento íntegro de los 11 trenes restantes, que realizará en las distintas bases de Renfe Fabricación y Mantenimiento, lo que supone una internalización de este tipo de tareas y un aumento de la carga de trabajo para los talleres propios de la compañía.
"La adquisición de nuevos trenes de Media Distancia pretende garantizar la máxima eficiencia en la operación de la nueva flota y el menor coste durante un largo periodo de tiempo", defiende Renfe.
Esta operación forma parte del plan de renovación de flota puesto en marcha por la empresa en 2019, que supondrá la renovación de aproximadamente el 50% de los trenes dedicados a Obligaciones de Servicio Público (OSP).
Este plan prevé una inversión total de 4.600 millones de euros y la fabricación de 418 nuevos trenes de Alta Velocidad, Cercanías, Media Distancia y Ancho Métrico, así como locomotoras de Alta Velocidad, lo que supondrá la creación de unos 52.000 empleos.
Entre estos trenes destacan las 211 nuevas unidades de gran capacidad de Cercanías, contratadas en 2021 a Alstom y Stadler y ya en proceso de fabricación, que conlleva una inversión de 2.726 millones de euros.
CAF ya se adjudicó en 2020 el primer contrato de este gran plan de inversiones para suministrar 31 nuevos trenes de vía estrecha y seis de Cercanías, además del posterior mantenimiento de parte de los vehículos, por un importe de 258 millones de euros. Talgo también se hizo en 2021 con un contrato para fabricar 40 cabezas motrices de alta velocidad por un máximo de 281,5 millones de euros