Adjunto el comunicado de la visión de la empresa sobre los resultados y el 2020
El ejercicio 2019 ha destacado por la gran presión en el mercado de la celulosa, que ha supuesto una significativa caída de los precios de la misma, debido en gran medida al elevado stock de pulpa a nivel mundial y fundamentalmente en China, desde finales de 2018 hasta los primeros meses de 2020. Ello, ha influido en la demanda de papel de impresión y escritura en 2019, afectada también por la desaceleración de la economía mundial y el ajuste de inventarios.
A pesar de ello, Iberpapel ha conseguido mantener los precios de venta, si bien, ha supuesto una ligera cesión en las unidades físicas vendidas. En el ejercicio que ahora finalizamos la filial papelera del Grupo estuvo parada por una huelga de seis días alternos en los últimos días de junio y primeros de julio, que lógicamente ha repercutido en los resultados del ejercicio.
En relación con los costos de producción del papel, significar que los precios de compra de la madera de eucaliptos; principal materia prima, en los últimos años se han incrementado, aunque a final de 2019 el mercado empezó a mostrar señales de normalización. Con todo ello, Iberpapel entendemos que ha defendido razonablemente bien su EBITDA, 37 millones de euros, frente a los 41 millones de 2018, lo que supone una caída del 9%. El resultado neto ha sido de 21,70 millones (2018: 25,21 millones) un 14% menos.
Perspectivas 2020
Es un poco pronto para hacer una previsión, por un lado, hay signos de comienzo de recuperación de la demanda de papel, pero todavía no somos capaces de valorar la repercusión de la crisis del coronavirus en la economía mundial y en la del mercado papelero en particular.
Los precios de la pulpa de celulosa continúan con una gran presión en los dos primeros meses del 2020. Si bien, se espera que la reducción de la oferta, así como, que no existen en estos momentos puestas en marcha de nuevas capacidades, hace pensar en una mejora del mercado.
En 2020, Grupo Iberpapel tal y como informa en el hecho relevante de 7 de febrero, va a iniciar la puesta en marcha de las nuevas instalaciones, dentro del programa de reforma y modernización de su actual planta de celulosa.
Además de incrementar la implantación de las mejores tecnologías disponibles (MTD) para el control ambiental en su sector de actividad, se conseguirá un incremento de entre un 15% y un 20% de la capacidad de producción de la planta. Todo ello supondrá una parada técnica en la producción de la fábrica de Hernani por un periodo, aproximado, entre 45 y 52 días, que lógicamente afectará a los resultados del año 2020 del Grupo.