El Gobierno canadiense ha mostrado su inclinación por emplear una instalación que tiene Repsol en el país como vía para aumentar el nivel de exportaciones de gas natural a Europa.
Así lo ha asegurado el ministro canadiense de Medio Ambiente, Steven Guilbeault, en una entrevista con 'Reuters'. El Ejecutivo tenía sobre la mesa dos proyectos para aumentar estas exportaciones: uno de Repsol en Nuevo Brunswick y otro de Peridae Energy en Nueva Escocia.
"Repsol probablemente es el proyecto más rápido que podría ser desplegado porque requiere de unos permisos mínimos, ya tiene instalaciones y un gasoducto", ha indicado el ministro canadiense.
La infraestructura de la firma española es una planta de regasificación, con instalaciones de carga y descarga, almacenamiento de gas natural licuado y una profundidad que permite la llegada de grandes buques.
Actualmente, la planta de Repsol, dueña al 100% del activo y operativa desde 2009, es de importación. La planta recibe gas natural licuado y luego lo suministro a través de sus gasoductos al resto de Canadá y a Estados Unidos para uso industrial o para generación de energía eléctrica.
El objetivo de Canadá, según el ministro, es incrementar sus importaciones de gas natural y petróleo en 300.000 barriles equivalentes de crudo por jornada para finales de año. El nivel de exportaciones se podría incrementar aún más a medio plazo con el proyecto de Repsol, aunque Guilbeault ha alertado de que la planta tendrá que cumplir con los requisitos de reducción de emisiones de metano y carbono del país.
"Es un proyecto que podríamos desplegar de forma más o menos rápida, pero aún así estamos hablando de varios años", ha alertado el ministro responsable de Medio Ambiente.
Canadá es el séptimo mayor productor de gas natural del mundo, con un nivel de producción similar a Catar o Arabía Saudí.
El proyecto de Repsol pasaría por añadir capacidad de licuefacción de gas a la planta de regasificación. En un primer momento, la planta podría suministrar 3.200 millones de metros cúbicos de gas. Con el tiempo, la capacidad total podría ampliarse hasta 8.000 millones de metros cúbicos, equivalentes al 22% del consumo total de España o al 9% del de Alemania