Hablar de trading o de especulación es hablar siempre de controlar el riesgo, de eso se trata todo esto, de controlar un riesgo constante que sea bastante inferior del potencial beneficio a conseguir.
Cuando un sistema es ganador lo será porque aporta más beneficio que pérdidas, y dentro de ser ganador tendrá varias características que le harán mejor que otros, pero gana más de lo que pierde.
Para eso, debemos tener claro cuánto puede perder y cuánto es capaz de ganar con el fin de parametrizarlo y poderlo valorar. Para hacer todo esto, para limitar las pérdidas que vamos a asumir y de esta manera controlar el riesgo, tenemos un instrumento fundamental en nuestro trading, el stoploss.
A través del StopLoss, una herramienta que aunque sorprenda no lo usan todos los que operan, marcaremos una barrera a partir de la cual cerraremos nuestra operación si el precio llega a ese nivel.
Este Stoploss puede estar insertado en nuestro broker, de forma que de manera automática la posición se cerrará si se dan las condiciones en el precio que hemos fijado, o bien puede estar en nuestra cabeza o en nuestras cartas gráficas, de forma que cuando vemos que el precio llega a ese nivel decidiremos sin dudas cerrar la posición.
Y es doloroso cuando un precio llega hasta tu stoploss y te saca, y más aún cuando llega, te saca y se gira hacia donde tú creías que iría, pero el stoploss es algo necesario pero no perfecto.
Para que entiendas su importancia, un stoploss te ahorraría el sufrimiento que te presento. En esta operación vas en largo, ves un doble techo pero piensas que es un simple retroceso, vas ganando y para qué vas a salir ahora:
Tu cabeza te decía que el precio seguiría subiendo, no tienes stoploss porque tú en eso no crees y el precio sigue hasta hacer esto:
Esto pasa y más de lo que creemos. Un StopLoss te debería haber sacado antes pese a que tu beneficio se hubiera reducido o incluso hubieras tenido una pérdida al entrar en el doble techo y ver cómo el precio se gira.
Lo importante aquí es que debes marcar un nivel sobre el que tu hipótesis queda invalidada y debes reconocer que no has leído bien al mercado y debes salir, aceptando un menor beneficio o bien una pérdida, hacer esto es un ejercicio de responsabilidad fundamental en tu trading.
Para que te hagas una idea, esto sería colocar un StopLoss en tu broker (en el campo que dice "Cerrar con pérdidas").
La colocación del stoploss en sí mismo es casi un arte y cada uno sigue varios criterios, en próximas entradas hablaremos de dónde podemos colocar un stoploss de forma eficiente pero debes entender que el stoploss debe saltar cuando detecta un cambio de tendencia pero resistir las fluctuaciones aleatórias del precio (es decir, resistir su volatilidad). Si usas bien esta definición sabrás mucho mejor dónde ubicarlo.
El Stoploss va ligado directamente con la gestión monetaria que os explicaba en este anterior artículo y a través de ambas partes podremos gestionar nuestro riesgo de forma eficiente, punto fundamental que nos ayudará a poder operar sin descapitalizarnos.