De vez en cuando te encuentras con inversores que se toman su tiempo para entrar en el mercado. Analizan los detalles, toman nota de sus errores y en general hacen un trabajo planificado y serio. Pero cuando les preguntas: te has planteado operar en otros mercados, brokers o productos te miran con cara rara y te responden un escueto: ‘Y para qué’
Bueno, puede que dependiendo del perfil del trader, para nada, efectivamente. El objetivo es hacer dinero, y si ya lo consigues, ¿para qué cambiar?
Pero también puede ocurrir, y no es improbable, que te sirva para operar mejor y ser más rentable haciendo prácticamente lo mismo.
Si alguien nos dijera que a la hora de comprar un coche sólo podemos adquirir lo que se hayan fabricado en su propio país nos parecería un sin sentido. Al mirar los autos que se fabrican a nivel mundial ampliamos nuestro abanico de posibilidades y estamos más cerca de elegir el adecuado. Esto no quiere decir que debamos excluir lo que ya conocemos, sino que asumir que lo que conocemos es directamente lo mejor es un planteamiento que nos va a costar dinero.
Los tiempos de los corros ya han pasado y ahora internet pone a nuestra disposición un abanico de posibilidades enorme.
Vamos a ver algunas razones que hacen que nos compense el esfuerzo de mirar fuera:
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Tendremos más productos a nuestra disposición. No sólo los que nuestro broker de referencia considere sino muchos más. Puede que alguno de ellos cuadre mejor con nuestra forma de trabajar.
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Menores comisiones. No es raro que los broker nacionales se aprovechen de la falta de perspectiva de algunos de sus clientes para manejar comisiones que están fuera de lo que es habitual. Si tenemos unas visión global de los brokers podremos acceder a las mejores comisiones de cada producto a nivel mundial. O al menos a unas comisiones que sean razonables.
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Mejor liquidez y horquilla. La diferencia entre el precio de compra y de venta así como los retrasos en la ejecución de las órdenes van minando nuestras ganancias o, en el peor de los casos, aumentando nuestras pérdidas. No hay razón para no sumarse a los subyacentes más líquidos del mundo, están a nuestra disposición.
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Acceso sencillo a más información relevante. En una entrada anterior ya hablamos de la diferencia entre información y ruido. No siempre es fácil encontrar la información realmente importante, pero si estas contratando uno de los producto financieros más extendidos esa información será más accesible.
Siempre da unas mezcla de pereza e inquietud dejar de hacer lo que conocemos, pero no podemos dejar que eso nos limite.
Hasta la próxima.