Si no estás de acuerdo con la valoración de la Administración o aseguradora, la tasación pericial contradictoria (TPC) te permite designar un perito independiente y, si hay gran diferencia, un tercer perito dictará un valor justo y vinculante. Descubre cómo funciona y sus costes.
¿Te han enviado una liquidación con un valor de inmueble que te parece desproporcionado? ¿O la aseguradora valora tus bienes —vivienda, muebles, etc.— por encima de lo que consideras justo? Entonces puede que la herramienta que estás buscando sea la tasación pericial contradictoria (TPC). Aquí te explico qué es, cómo funciona, cuándo conviene usarla, qué costes tiene y cómo empezar…
¿Qué es la tasación pericial contradictoria y para qué sirve?
La tasación pericial contradictoria es un derecho que tienes si no estás de acuerdo con el valor que la Administración (o una aseguradora) ha asignado a tus bienes —normalmente para efectos fiscales, como impuestos sobre transmisiones, herencias, donaciones, plusvalía, etc.
En la práctica, significa que puedes pedir que un perito independiente revise ese valor. Si su valoración difiere —y la diferencia supera ciertos umbrales— se nombra un tercer perito neutral, y su informe final sirve de base para recalcular impuestos o indemnizaciones.
Es decir: no tienes que aceptarlo todo sin más. La TPC existe precisamente para defenderte cuando crees que la Administración se ha equivocado.
¿Quién puede pedirla y en qué situaciones se utiliza?
Cualquier persona que haya recibido una valoración que considere injusta o desproporcionada. Algunos escenarios comunes:
Herencias o donaciones donde el valor comprobado por la Administración es elevado.
Compras o transmisiones de inmuebles. Si el valor comprobado supera el valor real de mercado, la TPC permite reclamar un ajuste.
Valoraciones de bienes muebles, locales, terrenos, etc., cuando los impuestos se calculan sobre valores tasados oficialmente.
En definitiva: siempre que la valoración oficial difiera de la real (o de lo que puedes demostrar como valor real) tienes derecho a impugnarla.
¿Quién realiza la tasación pericial contradictoria y quién decide al final?
El procedimiento involucra tres “intervinientes”:
El perito de la Administración: Es quien realiza la valoración inicial.
Tu perito (perito de parte): Tú mismo puedes designar un perito independiente (arquitecto, tasador, perito inmobiliario, etc.) que presente una valoración alternativa.
Un tercer perito neutral: Si las valoraciones del perito de la Administración y la tuya divergen más allá de ciertos límites (en valor absoluto o porcentaje), se designa un “perito tercero”. El dictamen de este perito será el valor definitivo.
Este sistema busca garantizar que la valoración final sea justa, equilibrada y objetiva.
¿Cómo se inicia una tasación pericial contradictoria? Paso a paso
1. Presenta la solicitud formal
Debes presentar un escrito dirigido a la oficina gestora competente. En general, el procedimiento se arranca a instancia tuya, es decir, tú lo pides.
Si la TPC va ligada a una liquidación por comprobación de valores (por ejemplo, impuestos de herencia o compraventa), hay un plazo de un mes desde la notificación para presentarla.
Si previamente presentaste un recurso de reposición o reclamación, puedes reservar el derecho a solicitar la TPC una vez dicha vía se resuelva.
2. Designa tu perito y presenta su valoración
Cuando solicites la TPC, la Administración te requerirá para que designes tu propio perito y aportes su informe. Los honorarios de este perito corren por tu cuenta.
Si no presentas la peritación en el plazo que indiquen (suelen ser pocos días), se considerará que aceptas la valoración inicial.
3. Evaluación de la diferencia entre valoraciones
Existen unos criterios definidos:
Si la diferencia entre la valoración del perito de la Administración y tu perito es igual o inferior a 120.000 € y no supera el 10 % del valor de la tasación de tu perito, entonces tu valoración prevalece para fijar la base imponible.
Si la diferencia es mayor, entonces se nombra un tercer perito neutral.
4. Designación del tercer perito (si procede)
El tercer perito suele elegirse por sorteo de entre los incluidos en listas oficiales (colegios profesionales, asociaciones, etc.). Una vez designado, ese perito emite su valoración definitiva. Esta será el valor que se tendrá en cuenta para la liquidación del impuesto o la indemnización.
¿Qué tienes que tener en cuenta antes de iniciar el procedimiento?
Antes de lanzarte a pedir una TPC, conviene reflexionar sobre lo siguiente:
Costes (tiempo y dinero)
Necesitarás contratar un perito independiente, cuyo honorario correrá de tu cuenta.
Si se nombra tercer perito, suele requerirse un depósito previo de honorarios (las dos partes, Administración y tú, depositan antes de que trabaje).
Todo ello puede alargar el procedimiento: no suele ser algo inmediato.
Que la discrepancia sea significativa
La TPC no es adecuada si las valoraciones no difieren mucho: hay un criterio claro de diferencia mínima (valor absoluto y porcentaje) para que la Administración acepte tu tasación o nombre un tercer perito.
Lo que puede implicar el valor final
El dictamen final será vinculante. Eso significa que —si aceptas la TPC— la valoración final, sea la tuya (si cabe) o la del perito tercero, servirá para regular los impuestos o ajustes definitivos.
¿Qué pasa si no estás de acuerdo con una tasación inicial?
Si recibes una liquidación basada en una tasación de la Administración con la que no coincides:
Solicita copia del informe pericial inicial para analizarlo.
Si ves errores, datos equivocados, valoración inferior al mercado o sobrevaloración, puedes pedir un perito independiente.
Si decides seguir, presenta solicitud de TPC dentro de plazo (normalmente un mes).
Aporta tu peritación, justifica tu discrepancia.
Si la diferencia es muy grande, el sistema activará la figura del tercer perito.
La TPC te da una segunda oportunidad real para corregir injusticias apreciables.
¿Quién paga la tasación pericial contradictoria?
Depende del resultado:
Los honorarios de tu perito (el de parte) siempre las pagas tú.
Si se nombra tercer perito, ambos deben depositar los honorarios previamente.
Al final: si la valoración del perito tercero resulta en un valor superior al declarado en más de un 20 %, entonces tú pagas sus honorarios. Si no, los paga la Administración.
Es un mecanismo que busca equilibrio: si tu reclamación no tiene fundamento, el coste corre por tu cuenta; si la valoración oficial era demasiado alta, te ahorras dinero.
Ejemplos reales de tasación pericial contradictoria
Para que se entienda mejor, aquí van dos ejemplos prácticos basados en situaciones frecuentes:
Situación
Valor comprobado por la Administración
Valor de la tasación del perito de parte
Resultado final
Quién paga el perito tercero / coste
Herencia de vivienda en zona media
290.000 €
240.000 €
Como la diferencia es 50.000 €, inferior a 120.000 € y <10 %, se acepta 240.000 € como base imponible.
No se nombra perito tercero → coste solo del perito de parte.
Venta de un piso en ciudad con “valor de referencia” muy alto
350.000 €
260.000 €
Diferencia 90.000 €, pero supera el 10 % del valor tasado por tu perito → se nombra tercer perito. El perito tercero valora en 275.000 € → base imponible 275.000 €.
Honorarios del perito tercero pagados por la Administración (valor final más bajo).
Donación de local comercial antiguo
180.000 €
120.000 €
Diferencia 60.000 €, pero inferior al 10 % → se acepta 120.000 €
Sólo pagas a tu perito.
Transmisión de terreno rústico valorado de más
500.000 €
350.000 €
Diferencia 150.000 €, superior a los 120.000 € → tercer perito. Su valoración final: 420.000 €.
Si 420.000 € supera en más del 20 % el valor declarado, tú asumes el coste; si no, lo paga la Administración.
Estos ejemplos muestran escenarios realistas: la TPC puede corregir valoraciones muy disparatadas, o servir para negociar un valor intermedio más justo que beneficie al contribuyente.
¿Qué hacer si no coincides con una peritación de aseguradora / no solo en temas fiscales?
Aunque la mayoría de los ejemplos hablados hasta ahora se refieren a impuestos —herencias, compraventas, transmisiones— la figura de la tasación pericial contradictoria también puede aplicarse en reclamaciones contra aseguradoras, cuando valoran tus bienes (vivienda, daños, muebles) por debajo de su valor real.
El procedimiento es similar: solicitas que se designe un perito independiente, presentas tu valoración, y si existe gran discrepancia puede designarse un perito tercero. El objetivo final es que la indemnización o compensación sea justa.
Ventajas de recurrir a una tasación pericial contradictoria
Te detallamos por qué recurrir a este poder administrativo:
Posibilidad real de revisar valores injustos: no estás obligado a aceptar lo que diga la Administración.
Valoración profesional, según mercado real: con un buen perito, puedes demostrar que el valor real está muy por debajo del oficial.
Mecanismo regulado, con reglas claras: la normativa está definida (artículos de la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria —LGT—, y su reglamento de desarrollo).
Seguridad jurídica: el valor final será vinculante y aceptado por la Administración o aseguradora.
Algunos detalles legales que conviene saber
La TPC está regulada por la LGT (art. 135) y por normativa de desarrollo, como el Real Decreto 1065/2007.
Si la Administración no informa correctamente del derecho a solicitar la TPC, esta irregularidad puede permitir reclamar retroactivamente (por ejemplo, ante un error de forma).
Si planteas la TPC en el contexto de un recurso (reposición o reclamación económico-administrativa), puedes reservar tu derecho a solicitar la TPC cuando el recurso termine.
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¿Cuándo conviene plantearse una tasación pericial contradictoria?
Te conviene si:
Crees que la valoración de la Administración se aleja mucho de la realidad del mercado.
Tienes datos, informes o referencias que demuestran un valor muy inferior.
Estás dispuesto a asumir los costes de un perito independiente (y de un tercero si se nombra).
Quieres tener una base sólida para reclamar impuestos, herencias, transmisiones o disputas con aseguradoras.
En resumen: la TPC no es para cualquier discrepancia mínima, sino para casos en que hay buenas razones para creer que la valoración oficial es exagerada o incorrecta.
Tu derecho a una valoración justa
La tasación pericial contradictoria es una herramienta valiosa, accesible y eficaz para defender tus derechos como contribuyente o asegurado. Te permite cuestionar una valoración oficial, aportar una valoración profesional y, si hace falta, recurrir a un perito neutral que dicte un valor justo.
Si crees que tu vivienda, terreno, local o bien ha sido sobrevalorado por la Administración o aseguradora, no te quedes callado: la TPC te da la oportunidad de presentar una tasación objetiva y realista.
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Preguntas frecuentes (FAQ) sobre tasación pericial contradictoria
Normalmente, un mes desde la notificación de la liquidación basada en valor comprobado.
Se entiende que aceptas la valoración de la Administración y el proceso finaliza.
Depende del perito que elijas y de sí se nombra un perito tercero (en cuyo caso podría requerirse depósito previo). Los honorarios del perito de parte corren por tu cuenta.
Si la valoración final del perito tercero es aceptada y supera en más del 20 % el valor declarado, sí asumirías sus honorarios. Pero la valoración final sigue siendo vinculante.
No necesariamente. También puede aplicarse a otros bienes, derechos o propiedades susceptibles de tasación, siempre que esté previsto por la normativa aplicable.